Meditación 23 de Septiembre… Sanación y Liberación de la Codependencia

Melody Beattie, en su Libro Más del Lenguaje del Adiós plantea que el codependiente maneja diversos miedos y que en ocasiones le aterra cuando debe liberarse de ellos. Aunque el intento genera incomodidad, debe asumirse el cambio hasta dejar ir esos temores.

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Medita sobre esto:

Encuentra un lugar tranquilo y cómodo para sentarte o acostarte. Cierra los ojos y respira profundamente varias veces para relajar tu cuerpo y tu mente.

Imagina que estás en un lugar seguro y pacífico, rodeado de luz y amor.

Visualiza un lazo o cuerda que te conecta a una persona o situación que has sentido que te controla o te atrapa en la codependencia. Esta cuerda puede ser simbólica de las relaciones tóxicas o los patrones que deseas liberar.

Con cada respiración profunda, siente cómo esa cuerda se vuelve más tenue y ligera. Visualiza cómo se separa suavemente de ti, permitiendo que te sientas más libre y autónomo.

Mientras observas cómo esa cuerda se aleja, di en voz alta o en silencio: «Soy libre para ser yo mismo. Me amo y me acepto tal como soy».

Continúa respirando profundamente y siente cómo la liberación de esa cuerda te llena de una sensación de paz y empoderamiento.

Lleva tu atención a tu corazón y visualiza una luz cálida y amorosa que crece con cada respiración. Siente cómo esta luz te envuelve y te llena de amor propio y compasión.

Repite en silencio o en voz alta estas afirmaciones: «Merezco amor. Merezco felicidad. Merezco paz».

Permanece en este estado de calma y amor propio durante unos minutos, respirando conscientemente y sintiendo la liberación de la codependencia y el fortalecimiento de tu propio ser.

Cuando estés listo, abre los ojos y regresa gradualmente a tu entorno presente, llevando contigo la sensación de liberación y empoderamiento.

Te invito a ejercitarte en esta meditación. Si deseas, responde estas interrogantes: ¿Estás dispuesto a comprometerte hasta lograr liberarte de la codependencia? ¿Ves como una necesidad enfrentarte con tus miedos, culpa, vergüenza? Si quieres, comparte tus respuestas al respecto.

Reflexión del Dia: 22 de Septiembre

Melody Beattie, en su Libro «Ya no seas Codependiente» reitera que los codependientes tenemos como tarea prioritaria «responsabilizarnos de nosotros mismo». Hemos estado cuidando de los otros, dejándonos de lado por mucho tiempo. Es momento de voltear nuestra atención a nosotros mismos. Buscando ayuda llegamos a encaminar nuestra sanación.

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Reflexiona sobre la transformadora búsqueda de la autonomía en la Codependencia

La codependencia es un camino que a menudo nos lleva a un laberinto emocional donde nos perdemos en las necesidades y deseos de los demás. En este viaje, es fácil perder de vista quiénes somos realmente y cuáles son nuestras propias necesidades y deseos.

El deseo ardiente de cuidar y rescatar a otros puede parecer una virtud, pero cuando se convierte en una necesidad obsesiva, puede convertirse en una carga emocional abrumadora. La codependencia nos lleva a pensar que nuestra valía y felicidad dependen de los demás, y esta creencia nos ata a relaciones tóxicas y comportamientos autodestructivos.

La liberación del ciclo codependiente comienza con la comprensión de que somos individuos valiosos y dignos de amor, independientemente de nuestras relaciones con los demás. Melody Beattie nos guía hacia la necesidad de hacernos cargo de nosotros mismos y desapegarnos de la idea de que nuestra felicidad depende de otros.

Desapegarse no significa renunciar al amor o a las relaciones, sino reconocer que somos responsables de nuestras propias vidas y que debemos cuidar de nosotros mismos antes de poder cuidar genuinamente a los demás. Es un acto de amor propio que nos permite construir relaciones más saludables y auténticas.

A medida que nos desprendemos de las expectativas y demandas de los demás, encontramos nuestro camino de regreso a nosotros mismos. Descubrimos nuestras pasiones, valores y sueños personales. Aprendemos a establecer límites saludables y a decir «no» cuando sea necesario sin sentirnos culpables. Este viaje hacia la autonomía es a menudo desafiante, pero es una búsqueda transformadora que nos lleva a un lugar de mayor equilibrio y autenticidad.

La codependencia puede haber sido nuestro pasado, pero no tiene por qué ser nuestro futuro. A medida que nos hacemos cargo de nosotros mismos y nos desapegamos de la necesidad obsesiva de cuidar a los demás, abrimos la puerta a una vida más plena y significativa. El camino hacia la recuperación puede ser difícil, pero la recompensa es una conexión más auténtica con nosotros mismos y con los demás, basada en el amor y el respeto mutuo en lugar de la dependencia y el sacrificio. (Alpha).

Te invito a reflexionar en el texto anterior, y trata de responder estas preguntas: ¿Has intentado desapegarte de aquello que te perturba? ¿Has visto algún avance en esta dirección? Comparte tus vivencias con nosotros, son de utilidad.

Meditación 22 de Septiembre… Enfado

Melody Beattie, en su Libro El Lenguaje del Adiós plantea que el enfado y la culpa deben ser vistos como parte del comportamiento de las personas durante el proceso de duelo. Solemos lidiar con estos sentimientos y no tiene nada incorrecto sentirlos. Elaboremos el Duelo a nuestro propio ritmo hasta aceptar la pérdida.

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Medita sobre esto:

Sentirse enojado y, a veces culpar a los otros, es una parte natural y necesaria para aceptar la pérdida y el cambio del duelo. Podemos permitirnos a nosotros mismos y a los demás enojarnos a medida que pasamos de la negación a la aceptación.
A medida que aceptamos la pérdida y el cambio, podemos culparnos a nosotros mismos, a nuestro Poder Superior u otros. La persona puede estar conectada a la pérdida, o él o ella puede ser un espectador inocente. Podemos escucharnos a nosotros mismos decir: «Si solo él hubiera hecho eso». . . . Si no hubiera hecho eso. . . . ¿Por qué Dios no lo hizo de manera diferente? . . . «Sabemos que la culpa no ayuda». En recuperación, las consignas son responsabilidad propia y responsabilidad personal, no culpables. En última instancia, la rendición y la autoresponsabilidad son los únicos conceptos que nos pueden mover hacia adelante, pero para llegar allí es posible que tengamos que permitirnos sentirnos enojados y ocasionalmente culparnos.
Es útil, al tratar con los demás, recordar que ellos también pueden necesitar pasar por su etapa de enojo para lograr la aceptación. No permitir que otros, o nosotros mismos, pasemos por la ira y la culpa, puede ralentizar el proceso de duelo.
Confiemos en nosotros mismos y en el proceso de duelo. No nos enfadaremos para siempre. Pero es posible que tengamos que enojarnos por un tiempo mientras buscamos lo que pudo haber sido, para finalmente aceptar lo que es.

«Dios, ayúdame a aprender a aceptar mi enojo y el de los demás como parte normal para lograr la aceptación y la paz. Dentro de ese marco, ayúdame a luchar por la responsabilidad personal».

Mi Reflexión: Durante la elaboración del Duelo todo ser humano atraviesa sentimientos difíciles de manejar como el enfado la culpa por la pérdida sufrida. Los codependientes vemos este proceso con una óptica más dramática y «cuesta arriba», nos desequilibramos emocional y físicamente. Si nos planteamos transitar el duelo y aceptar esta pérdida, entendiendo que todo va a transcurrir conforme a la voluntad de Dios, veremos fluir y aceptar lo ocurrido sin deterioro de nuestra vida. Es importante observar que los demás también sufren su duelo y están haciendo su esfuerzo propio para lograr llegar a la aceptación. Todo va a volver a su cauce, es la ley de la existencia, no podemos alterar esos designios, sólo resignarnos y aceptarlo, sin olvidar que nuestra meta es «responsabilizarnos de nosotros mismos».(Alpha).

¿Has sentido ira y culpa al tener una pérdida importante en tus afectos? ¿Cómo manejas estos sentimientos y emociones?. Comenta aquí.

Reflexión del Dia: 21 de Septiembre

Melody Beattie, en su Libro «Ya no seas Codependiente» refiere que la base de la codependencia en una baja autoestima, con manejo de comportamientos autodestructivos y una necesidad imperiosa de controlar al adicto para modificar su conducta. En ello el codependiente transcurre su vida sin obtener solución, sino desmejorar su propia salud.

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Reflexiona sobre el ciclo Autodestructivo de la Codependencia:

La codependencia es un viaje interior complicado y a menudo doloroso. Aquellos que luchan con la codependencia a menudo se encuentran atrapados en un ciclo autodestructivo que puede ser difícil de romper. Este ciclo está impulsado por patrones profundos de creencias y comportamientos que se han arraigado con el tiempo.

Algunas de las características del comportamiento autodestructivo en la codependencia incluyen:

1. Negación de las propias necesidades: Los codependientes a menudo niegan sus propias necesidades y deseos en favor de satisfacer las necesidades de los demás. Creen que su valía está vinculada a ser útiles y complacientes, incluso si eso significa descuidar sus propias necesidades emocionales, físicas y espirituales.

2. Búsqueda de validación externa: Muchos codependientes buscan constantemente la validación y la aprobación de los demás para sentirse valiosos y amados. Esto los hace vulnerables a la manipulación y la explotación emocional.

3. Autoabandono: A menudo, los codependientes se abandonan a sí mismos en aras de mantener una relación o evitar conflictos. Esto puede llevar a una sensación de vacío interior y a la pérdida de la propia identidad.

4. Perfeccionismo y autoexigencia: Los codependientes a menudo se imponen estándares extremadamente altos y son críticos consigo mismos cuando no los cumplen. Esto puede resultar en altos niveles de ansiedad y una baja autoestima.

5. Miedo al abandono: El miedo al abandono es una fuerza impulsora significativa en la codependencia. Esto puede llevar a los codependientes a quedarse en relaciones dañinas mucho tiempo después de que se hayan vuelto insostenibles.

6. Enfoque en el control: Los codependientes a menudo intentan controlar a las personas y las situaciones a su alrededor en un esfuerzo por sentirse seguros. Esto puede llevar a una constante sensación de agotamiento y fracaso.

Para sanar y romper el ciclo autodestructivo, es fundamental la autoconciencia y el trabajo constante en el autocuidado, la autoaceptación y el establecimiento de límites saludables. También es importante buscar apoyo en terapia o grupos de apoyo especializados en codependencia para obtener orientación y apoyo en este proceso de recuperación.

Recordemos que la codependencia no es una sentencia permanente; con el tiempo y el esfuerzo adecuados, es posible liberarse de estos patrones autodestructivos y construir relaciones más saludables y satisfactorias. La clave es reconocer que mereces amor, cuidado y respeto, tanto de los demás como de ti mismo. (Alpha).

Te invito a responder estas interrogantes: ¿Has estado cuidando a personas adictas? ¿Te sientes comprometida en lo físico y emocional? ¿Cómo has lidiado con esa situación? Comparte en los comentarios tus experiencias.

Meditación 21 de Septiembre … Aceptar el flujo de la vida

Melody Beattie, en su Libro Mas del Lenguaje del Adiós nos hace reflexionar que el codependiente neceita meditar y replantearse alcanzar la paz y serenidad en su vida ingobernable que lleva.

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Medita sobre esto:

Encuentra un lugar tranquilo y cómodo para sentarte en posición relajada. Cierra los ojos y respira profundamente varias veces para relajar tu cuerpo y mente.

– Reflexiona sobre la idea de que la vida es un flujo constante de experiencias, cambios y desafíos. Visualiza un río que fluye suavemente.

– Imagina que estás parado en la orilla de este río. Observa cómo el agua fluye constantemente, llevando hojas y ramas en su camino. Cada hoja y rama representa una experiencia, una emoción o un evento en tu vida. En lugar de luchar contra el flujo del río o tratar de controlar qué hojas y ramas fluyen en él, simplemente observa con aceptación. Reconoce que no puedes controlar todo en la vida, pero puedes elegir cómo reaccionas a lo que llega a ti.

– Respira profundamente y repite en silencio o en voz alta: «Aceptó el flujo de la vida. Confío en que las experiencias que llegan a mí son oportunidades para aprender y crecer».

– Siente cómo la tensión y la resistencia se disuelven a medida que te abres a la aceptación y la confianza en el proceso de la vida.

– Permanece en este estado de relajación y aceptación durante unos minutos, respirando conscientemente y permitiendo que la sensación de flujo y tranquilidad te envuelva.

Cuando estés listo, abre los ojos y regresa gradualmente a tu entorno presente, llevando contigo el sentido de aceptación y confianza en el flujo de la vida.

¿Has asumido como terapéutico la búsqueda de la paz en tu vida? ¿Has buscado ayuda para esto? ¿Lograste este cometido? Comparte en los comentarios

Meditación 21 de Septiembre … Aceptar el flujo de la vida

Melody Beattie, en su Libro Mas del Lenguaje del Adiós nos hace reflexionar que el codependiente neceita meditar y replantearse alcanzar la paz y serenidad en su vida ingobernable que lleva.

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Medita sobre esto:

Encuentra un lugar tranquilo y cómodo para sentarte en posición relajada. Cierra los ojos y respira profundamente varias veces para relajar tu cuerpo y mente.

– Reflexiona sobre la idea de que la vida es un flujo constante de experiencias, cambios y desafíos. Visualiza un río que fluye suavemente.

– Imagina que estás parado en la orilla de este río. Observa cómo el agua fluye constantemente, llevando hojas y ramas en su camino. Cada hoja y rama representa una experiencia, una emoción o un evento en tu vida. En lugar de luchar contra el flujo del río o tratar de controlar qué hojas y ramas fluyen en él, simplemente observa con aceptación. Reconoce que no puedes controlar todo en la vida, pero puedes elegir cómo reaccionas a lo que llega a ti.

– Respira profundamente y repite en silencio o en voz alta: «Aceptó el flujo de la vida. Confío en que las experiencias que llegan a mí son oportunidades para aprender y crecer».

– Siente cómo la tensión y la resistencia se disuelven a medida que te abres a la aceptación y la confianza en el proceso de la vida.

– Permanece en este estado de relajación y aceptación durante unos minutos, respirando conscientemente y permitiendo que la sensación de flujo y tranquilidad te envuelva.

Cuando estés listo, abre los ojos y regresa gradualmente a tu entorno presente, llevando contigo el sentido de aceptación y confianza en el flujo de la vida.

¿Has asumido como terapéutico la búsqueda de la paz en tu vida? ¿Has buscado ayuda para esto? ¿Lograste este cometido? Comparte en los comentarios.

Reflexión del Dia: 20 de Septiembre

Melody Beattie, en su Libro «Ya no seas Codependiente» ratifica que la base de la codependencia es la baja autoestima, y para abordar la solución a este problema, el codependiente debe asumir una serie de pautas para lograr la mejora gradual de la valía propia.

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Reflexiona sobre esto:

Aquí, algunas pautas que pueden ayudarte a mejorar tu autoestima si estás lidiando con la codependencia:

– Autoaceptación: Acepta quién eres en este momento, con todas tus imperfecciones y cualidades. Reconoce que eres digno de amor y respeto tal como eres.

– Practicar la compasión hacia uno mismo: Desarrolla un diálogo interno compasivo y amable contigo mismo en lugar de ser crítico y autocrítico. Trátate a ti mismo con el mismo cariño y comprensión que mostrarías a un amigo.

– Establecer límites saludables: Aprende a decir «no» cuando sea necesario y a establecer límites en tus relaciones. La capacidad de mantener límites saludables es un signo de autoestima y autovaloración.

– Trabajar en la autoimagen positiva: Cuestiona y reemplaza los pensamientos negativos sobre ti mismo con pensamientos más positivos y realistas. Haz una lista de tus logros y habilidades para recordarte constantemente tu valía.

– Practicar el autocuidado: Dedica tiempo a cuidar de ti mismo física, emocional y espiritualmente. Esto incluye actividades que te hagan sentir bien y te ayuden a mantener un equilibrio en tu vida.

– Aceptar que no puedes controlar a los demás: En la codependencia, a menudo tratamos de controlar o cambiar a otras personas. Aprende a soltar este deseo de control y enfócate en cambiar tus propias acciones y respuestas.

Aceptar la responsabilidad personal: Reconoce que eres responsable de tus propias acciones y elecciones. Asumir la responsabilidad personal te empodera para tomar decisiones saludables en tu vida.

Mi Reflexión: Recuerda que la mejora de la autoestima y la recuperación de la codependencia son procesos que llevan tiempo y esfuerzo. Ser paciente contigo mismo y estar dispuesto a trabajar en tu autoestima de manera constante te ayudará a superar los patrones codependientes y construir relaciones más saludables y satisfactorias. (Alpha).

Si deseas, examínate a la luz de estas interrogantes: ¿Has iniciado mi proceso de recuperación? ¿Buscaste ayuda con grupos de apoyo? Si deseas comenta tus respuesta, porque serán de utilidad a otros.

Meditación 20 de Septiembre … Espontaneidad

Melody Beattie, en su Libro El Lenguaje del Adiós plantea que el codependiente debe asumir sus imperfecciones, dejar ir la necesidad de controlarse así mismo y a los demás. En la medida que asumimos la recuperación vamos despertando ese verdadero ser que habita en nosotros y alcanzamos la «espontaneidad».

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Medita sobre esto:

En la recuperación estamos aprendiendo a dejarnos ir. Estamos aprendiendo a ser espontáneos.
La espontaneidad puede asustarnos a algunos de nosotros. Podemos temer la pérdida de control que implica la espontaneidad. Podemos seguir operando aún bajo las reglas codependientes que prohíben la espontaneidad: sé bueno; sé correcto; sé perfecto; sé fuerte; no te diviertas; y estate siempre en control.
Podemos asociar la espontaneidad con el actuar de una manera adictiva, compulsiva, autodestructiva o irresponsable. No es eso de lo que estamos hablando en la recuperación. La espontaneidad positiva implica expresar libremente lo que somos, de una manera divertida, sana, que no nos lastima y que no infringe los derechos de los demás.
Aprendemos a ser espontáneos y libres a medida que nos vamos haciendo más conscientes y vamos creciendo en autoestima. La espontaneidad surge a medida que se incrementa la confianza y la fe en nosotros mismos, y nos vamos sintiendo más seguros de nuestra capacidad de mantener límites sanos.
Ser espontáneos está en relación con nuestra capacidad para jugar y para lograr intimidad. Para llegar a todas esas deseables acciones, necesitamos ser capaces de dejar ir nuestra necesidad de controlarnos a nosotros mismos y de controlar a los demás, y entrar completa y libremente en el momento presente.
Deja ir la tirante rienda con que te detienes a ti mismo. ¿Qué importa si cometes un error? ¿Qué importa si te equivocas?.
Saborea tus imperfecciones. Permítete ser un poquito necesitado, un poquito vulnerable. ¡Corre un riesgo!
Podemos ser espontáneos sin hacernos daño a nosotros mismos o a los demás. De hecho, todo el mundo se beneficiará de nuestra espontaneidad.

«Hoy tiraré el libro de reglas y disfrutaré de ser como soy. Me divertiré un poco con el regalo de la vida, de mí mismo y de los demás».

Mi Reflexión: Cuando los codependientes decidimos transitar el sendero de la recuperación aprendemos a soltar la necesidad de controlar, entendemos y aceptamos nuestras imperfecciones y nos proponemos «amarnos a nosotros mismo» dejando libre a los otros para que actúen conforme a su criterio. Ese tránsito nos lleva a permitirnos ser «vulnerables y mostrar menos rigidez en las actuaciones» Aprender a vivir que el momento presente nos conduce a una serenidad y paz increíbles. (Alpha).

¿Te has permitido mostrarte tal cual eres, necesitado y vulnerable? ¿En tu recuperación has aprendido a vivir en el momento presente? Comenta acá tus vivencias.

Reflexión del Dia: 19 de Septiembre

Melody Beattie, en su Libro «Ya no seas Codependiente» plantea que los codependientes estamos permanentemente sin «equilibrio» en nuestras vidas moviéndonos en irrealidades que solo están en nuestra mente, lo que distorsiona la realidad y nos hace sentir dolor. Al aceptar la curación como vía para recuperar nuestro equilibrio es un «gran paso» en detener el mundo ficticio que inventamos, y enfrentarnos con la realidad, solo así se ira el sufrimiento.

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Reflexiona sobre esto:

Según Melody Beattie, las personas codependientes pueden recuperarse a través de un proceso de autorreflexión, autocomprensión y autotrascendencia. Esta autora/consejera en esta área menciona algunas ideas que puden servir para que el codependiente se recupere de su apego afectivo.

– Aceptación: El primer paso es reconocer y aceptar que tienes un problema de codependencia. Esto implica admitir que tu vida se ha visto afectada negativamente por tu necesidad de cuidar o controlar a otros.

– Educación: Empieza a educarte sobre la codependencia. Lee libros de Melody Beattie y otros expertos en el tema para comprender mejor las dinámicas subyacentes de la codependencia y cómo afecta a tu vida.

– Terapia o apoyo: Considera buscar terapia individual o unirse a un grupo de apoyo para personas codependientes. La terapia puede proporcionar un espacio seguro para explorar tus patrones de comportamiento y emociones, mientras que un grupo de apoyo te permite compartir experiencias y aprender de otros en situaciones similares.

– Establecimiento de límites: Aprende a establecer límites saludables en tus relaciones. Esto implica aprender a decir «no» cuando sea necesario y cuidar de ti mismo sin sentirte culpable.

– Autocuidado: Prioriza tu propio bienestar emocional, físico y espiritual. Dedica tiempo a actividades que te hagan sentir bien contigo mismo y que no estén centradas en las necesidades de los demás.

– Conciencia emocional: Trabaja en desarrollar una mayor conciencia de tus emociones y necesidades. Aprende a identificar y expresar tus sentimientos de manera saludable.

– Perdón y aceptación: Aprende a perdonarte a ti mismo por tus errores y aceptarte tal como eres. La autoaceptación es fundamental en el proceso de recuperación.

– Enfoque en el presente: Practica la atención plena (mindfulness) para mantener tu enfoque en el presente y evitar la rumiación sobre el pasado o la preocupación excesiva por el futuro.

Red de apoyo: Mantén una red de apoyo fuerte que incluya amigos, familiares y terapeutas en quienes puedas confiar y hablar abiertamente sobre tus desafíos y logros en la recuperación.

– Compromiso a largo plazo: La recuperación de la codependencia es un proceso continuo. Comprométete a trabajar en ti mismo a lo largo del tiempo y a mantenerte alerta a los patrones de codependencia que puedan surgir en el futuro.

Recuperarse de la codependencia es un viaje personal y puede llevar tiempo. La clave es la autoconciencia, el autocuidado y el trabajo constante en el desarrollo de relaciones más saludables y equilibradas. El enfoque de Melody Beattie se centra en empoderar a las personas codependientes para que tomen el control de sus vidas y encuentren la sanación y el equilibrio.

Te invito a responder estas preguntas:¿He aceptado que lo que vivo es producto de mi baja autoestima? ¿He iniciado mi recuperación para «revertir» esta situación?. Si deseas, puedes compartir tus respuestas al respecto. Será de utilidad a otras personas.

Meditación 19 de Septiembre … Disculpas

Melody Beattie, en su Libro El Lenguaje del Adiós plantea que es saludable para mantener nuestras relaciones aceptar los errores cometidos y pedir disculpas a la persona que tratamos inadecuadamente. Pedir excusas es un gesto de madurez y evita situaciones difíciles con las personas de nuestro entorno.

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Medita sobre esto:

A veces actuamos de una manera que nos deja incómodos. Eso es humano. Por eso tenemos las palabras: “Lo siento”. Curan y cierran la brecha. Pero no tenemos por qué decir “lo siento” si no hemos hecho nada mal. Una sensación de vergüenza puede llevarnos a disculparnos de todo lo que hacemos, de cada palabra que decimos, por estar vivos y ser como somos.
No tenemos por qué pedir disculpas por cuidar de nosotros mismos, por manejar nuestros sentimientos, por fijar límites, por divertirnos o porque nos estamos curando.
No tenemos que cambiar nunca de rumbo, si éste es el que más nos conviene, pero a veces una disculpa general reconoce otros sentimientos y puede ser útil cuando no están claras las cosas en una relación. Podemos decir: “Siento mucho el pleito que tuvimos. Siento mucho que te haya lastimado con lo que tuve que hacer para cuidarme a mí mismo; no tenía la intención de que así fuera.”
Una vez que pedimos una disculpa, no tenemos que seguirla repitiendo. Si alguien quiere seguirnos sacando una disculpa por el mismo incidente, eso es asunto de esa persona y no tenemos porque dejarnos enganchar.
Podemos aprender a tomar seriamente nuestras disculpas y a no darlas cuando no sean validas. Cuando nos sintamos bien con nosotros mismos, sabremos cuando es momento de decir que lo sentimos y cuando no.

“Hoy tratare de ser claro y sano en mis disculpas, asumiendo responsabilidad por mis acciones y por las de nadie mas. Dios mío, ayúdame a averiguar de que es de lo que necesito disculparme y que no es responsabilidad mía”.

Mi Reflexión: El codependiente se mueve con sentimientos de culpa y vergüenza. Siente que cualquiera de sus actitudes hieren a las personas de su entorno. Asumir a tiempo y cuando sea necesario ofrecer disculpas, es responsable e indica aceptar que se equivoco, solo que debe aprender cuándo darlas y hacerlo una sola vez, no mantenerse pidiendo excusas hasta que la otra persona lo considere necesario. Quien debe saber hasta cuando hacerlo somos nosotros, sin importarnos lo que opine la persona a quien le otorgamos esa disculpa. (Alpha).

¿Has practicado pedir disculpas a quien considera ofendiste con alguna actuación? ¿Lo has hecho con la convicción que es el momento adecuado?. Comenta aquí tu experiencia al respecto.