Reflexión del Dia: 8 de Febrero

Melody Beattie, en su Libro Ya no seas Codependientereitera que solo cuidándonos y amándonos podemos salir de ese atolladero afectivo en que estamos envueltos los codependientes.

Si deseas conocer mas sobre esta Autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esta vía.

Reflexiona sobre esto:

Somos buenos. Somos suficientemente buenos. Somos adecuados. Mucha de nuestra ansiedad y de nuestro temor nacen, creo, de decirnos constantemente que no somos capaces de afrontar el mundo y todas sus situaciones. Nathaniel Branden le llama a esto una “inenarrable sensación de estar incapacitados para la realidad”.48 Estoy aquí para decirles que estamos capacitados para la realidad. Relájense. Está bien ser quienes somos. ¿Qué más o quién más podemos ser? Tan sólo hagamos lo mejor posible lo que se nos pide hacer. ¿Qué más podemos hacer? A veces, ni siquiera podemos hacer las cosas lo mejor posible; eso también está bien. Podemos tener sentimientos, pensamientos, miedos vulnerabilidades al ir por la vida, todos los tenemos. Necesitarnos dejar de decirnos a nosotros mismos que somos diferentes por sentir y hacer lo que todo el mundo hace y siente.
Necesitamos ser buenos con nosotros mismos. Necesitamos ser compasivos y amables con nosotros mismos. ¿Cómo podemos esperar cuidarnos adecuadamente si no nos gustamos o nos odiamos?

Mi Reflexión: El codependiente se autocritica y flagela constantemente, eso forma parte de su vida diaria. La razón una baja estima personal. Llego el momento de entender que no somos diferentes a los demás, no somos malas personas, no somos monstruos; solo seres humanos con limitaciones para entablar relaciones saludables. Todo ello cambiara cuando asumamos que tenemos un alto compromiso con nosotros mismos: responsabilizarnos de nuetsro cuidado. Allí comienza nuestra sanación. (Alpha).

¿Estas comportandote duramente contigo? ¿Estas en recuperacion? Comenta acá los resultados hasta ahora.

Reflexión del Dia: 7 de Febrero

Melody Beattie, en su Libro Ya no seas Codependienteratifica que nadie puede cambiar a las personas, y el codependiente se maneja en el triangulo del Drama de Karpman.

Si deseas conocer mas sobre esta Autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esta vía.

Reflexiona sobre esto:

Cerca de un año después de comenzar a recuperarme de mi codependencia me di cuenta de que aún estaba haciendo algo que me causaba dolor. Percibí que este patrón tenía algo que ver con el por qué muchas de las relaciones que establecía se agriaban. Pero no sabia qué era “eso” que estaba yo haciendo, de modo que no pude dejar de hacerlo. ¿Qué es esa cosa que los codependientes hacen una y otra vez? ¿Por qué nos seguimos sintiendo tan mal?”
Pensó un momento en mi pregunta antes de responderme. “Los codependientes son cuidadores de los demás, rescatadores. Rescatan, luego persiguen, y terminan siendo víctimas. Estudia el triángulo del drama de Karpman”, me dijo. El triángulo del drama de Karpman y sus papeles de rescatador, perseguidor y víctima.
Eso era. Ese era mi patrón. Este es nuestro patrón. Esto es lo que hacemos repetidamente con nuestros amigos, familiares, conocidos, clientes o cualquiera que se encuentre a nuestro alrededor. Como codependientes, podernos hacer muchas cosas, pero este patrón es el que seguimos mejor y con mayor frecuencia. Esta es nuestra reacción favorita.
Somos rescatadores, quienes todo lo proporcionan. Somos grandes madrinas o padrinos del mundo entero. No sólo satisfacernos las necesidades de la gente, sino que las anticipamos.
Arreglamos los asuntos de los demás, los enseñamos, nos afligimos por ellos, Les solucionamos, los atendemos. Y lo hacemos todo tan bien. “Tu deseo es un mandato para mí”, es nuestro lema. “Tu problema es mi problema.” Somos cuidadores.
Rescatamos a la gente de sus responsabilidades. Nos hacemos cargo, cuidamos de sus responsabilidades en vez de dejar que ellos lo hagan. Luego nos enojamos con ellos por lo que hemos hecho. Nos sentimos usados y nos da lástima de nosotros mismos. Ese es el patrón, el triángulo.

Mi Reflexión: El codependiente se moviliza como rescatador en el Triangulo del Drama de Karpman. Este escenario insano es una constante en la existencia del codependiente. Esa actitud autodestructiva de victimizarse hace que sufra seriamente un largo tiempo, desgastándose física y emocionalmente. (Alpha).

¿Te mueves en el Triangulo de Karpman? ¿Como te sientes actuando como victima/rescatador? Comenta acá tus vivencias.

Reflexión del Dia: 6 de Febrero

Melody Beattie, en su Libro Ya no seas Codependienteratifica que es imposible cambiar a las personas. Nadie cambia por otro, esto es una ilusión.

Si deseas conocer mas sobre esta Autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esta vía.

Reflexiona sobre esto:

No podemos cambiar a las personas. Cualquier intento de controlarlas es un engaño y una ilusión. Se resistirán a nuestros esfuerzos o redoblarán los suyos para probar que no podemos controlarlas. Podrán adaptarse temporalmente a nuestras demandas, pero cuando nos demos la vuelta regresarán a su estado natural. Y aún más, la gente nos castigara por obligarla a hacer algo que no quiere, o a ser como no quiere ser.
Ningún control será suficiente para efectuar un cambio permanente o deseable en otra persona. A veces podremos hacer cosas que aumenten la probabilidad de que la gente quiera cambiar, pero ni aun eso podemos garantizar o controlar.
Y esa es la verdad. Es una desgracia. A veces es difícil de aceptar, especialmente si alguien a quien amas se lastima a sí mismo o a sí misma y a ti. Pero así es. La única persona a la que puedes o podrás hacer cambiar es a ti misma. La única persona que te atañe controlar eres tú misma.
¡Desapégate. Renuncia!

Mi Reflexión: Pretender cambiar a las personas es ilusorio, imposible. Esa es una opcion netamente personal. Aun cuando lo deseemos para ayudar a otros, esto resulta desgastante y altera la paz y tranquilidad de quien lo hace. (Alpha).

¿Intentas cambiar a los demas? ¿Que has percibdo en esas personas? ¿Observas cambios o eres tu quien se ha desgastado? Comenta aquí.

Reflexión del Dia: 3 de Febrero

Melody Beattie, en su Libro Ya no seas Codependientereitera que solo con la aceptación de nuestras limitaciones humanas para cambiar a los demás podremos asumir la recuperacion de la codependencia.

Si deseas conocer mas sobre esta Autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esta vía.

Reflexiona sobre esto:

El desapego también implica aceptar la realidad, los hechos. Requiere fe en nosotros mismos, en Dios, en otras personas, en el orden natural y en el destino de las cosas en este mundo. Nos liberamos de nuestros pesares y preocupaciones y nos damos a nosotros mismos la libertad para disfrutar de la vida a pesar de nuestros problemas no resueltos. Confiamos en que todo está bien a pesar de los conflictos. Confiamos en que Alguien más grande que nosotros sabe, ha ordenado y se preocupa de lo que está sucediendo.
Entendemos que este Alguien puede hacer mucho más por resolver el problema que nosotros. De modo que tratamos de no estorbar su camino y dejar que Él lo haga. A su tiempo, sabremos que todo está bien porque vemos cómo las cosas más extrañas (y a veces, las más dolorosas) se solucionan de la mejor manera y en beneficio de todos.

Mi Reflexión: La solución es desapegarse. Esto significa entender con claridad meridiana que no podemos cambiar a los demás, ni cambiar la realidad que nos rodea, y aceptar que estamos limitados a lograr cambios en nosotros mismos. (Alpha).

¿Estas trabajando en el desapego?¿Asistes a Grupos de 12 Pasos de CoDA? Comenta acá.

Reflexión del Dia: 31 de Enero

Melody Beattie, en su Libro Ya no seas Codependienteratifica que el codependiente, cuando esta dependiendo de los demás, reacciona ante cualquier evento, lo hace desde el resentimiento y enfado para con el mismo.

Si deseas conocer mas sobre esta Autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esta vía.

Reflexiona sobre esto:

La mayoría de los codependientes son reaccionarios. Reaccionamos con ira, culpa, vergüenza, odio a nosotros mismos, preocupación, sentimientos heridos, gestos controladores, acciones solícitas, depresión, desesperación y furia. Reaccionamos con miedo y ansiedad. Algunos de nosotros reaccionamos tanto que nos resulta doloroso estar cerca de la gente, y torturante encontrarnos dentro de un grupo grande de personas. Es normal reaccionar y responder a nuestro medio ambiente. Reaccionar es parte de la vida. Es parte de interactuar, es parte de ser humano y de estar vivo. Pero nos permitimos irritamos tanto y distraernos tanto.
Pequeñeces, cosas mayores —lo que sea— tienen el poder de descarrilarnos. Y nuestra respuesta después de que reaccionamos a menudo no es la que más nos conviene.
Podemos haber empezado a reaccionar y a responder urgente y compulsivamente con patrones que nos lastiman. El solo hecho de sentir urgencia y compulsión es suficiente para herirnos. Nos mantenemos en un estado de crisis, fluyendo la adrenalina y tensos los músculos, listos para reaccionar ante emergencias que generalmente no son tales. Alguien hace algo, de modo que nosotros debemos hacer algo a la vez. Alguien se siente de determinada manera de modo que nosotros debemos sentirnos de otra determinada manera.

Mi Reflexión: El codependiente asume que a cualquier situacion o evento su respuesta es airado, colerica,enfado.Ese rasgo se manifiesta ante cosas simples, y evidencia el rechazo que siente a si mismo. Cuando su vida esta sobrepasada porque su apego afectivo lo ha llevado a sentirse dependiente de los otros. Asume esa postura que solo lo lleva a herirse, lleno de resentimiento, miedo, vergüenza y culpa. (Alpha).

¿Habitualmente reaccionas con rabia y enojo? ¿Como estas tratando esa situación? Comparte aquí tus vivencias.

Reflexión del Dia: 27 de Enero

Melody Beattie, en su Libro Ya no seas Codependiente plantea que el codependiente utiliza los métodos inimaginables para mantener el control sobre las personas, los sucesos a su alrededor.

Si deseas conocer mas sobre esta Autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esta vía.

Reflexiona sobre esto:

Muchos codependientes combinan sus tácticas, empleando una variedad de métodos. ¡Cualquier cosa que funcione! (O, para ser más exactos, esperando resultados de cualquier cosa que no funcione.)
No importa cuáles sean las tácticas, las metas siguen siendo las mismas, Conducen a otras personas a hacer lo que tú quieres que hagan. Las llevan a comportarse como tú piensas que deben hacerlo. No las dejan actuar de modos que tú consideras incorrectos para ellas, pero que quizá intentarían, si no fuera por tu “ayuda”. Fuerzan los eventos de la vida para que se desarrollen y se desenreden de la manera y a la hora que tú has designado.
No dejan que ocurra lo que ocurre, o lo que podría suceder. Nosotros hemos escrito la obra, y nos encargaremos de que los actores se comporten y de que las escenas se desarrollen exactamente como nosotros hemos decidido que debe ser. No importa que sigamos colándonos de la realidad. Si nos abocamos a la carga con suficiente insistencia, podremos (creemos) detener el flujo de la vida, transformar a la gente y cambiar las cosas a nuestro antojo.
Nos estamos haciendo tontos.

Mi Reflexión: Para el codependiente mantener el control le genera una satisfacción personal. No importa cuantas técnicas de manipulación tenga que utilizar, solo desea controlar a los demás, a los eventos. Esta conducta autodestructiva va mermando su capacidad para vivir en paz. Al llegar a sentirse que no gobierna su vida, asume una conducta terapéutica con el mismo, y aborda la terapia para salir de ese «atolladero» donde el mismo se metió por años. (Alpha).

¿Estas controlando los sucesos y las personas que te rodean? ¿Cual es tu percepción sobre esta situación? Comparte aquí.

Meditación 27 de Enero… Necesitamos de la gente

Melody Beattie, en su Libro Mas del Lenguaje del Adiós reitera que el codependiente, si bien tiene serias dificultades para mantener relaciones sanas, bien puede, con recuperacion, asumir un rol mas sano en sus vínculos afectivos.

Si deseas conocer mas sobre esta autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esa vía.

Medita sobre esto:

Podemos encontrar el equilibrio entre el necesitar demasiado de la gente y no permitirnos necesitar absolutamente a nadie.
Muchos de nosotros tenemos necesidades de dependencia del pasado que no han sido satisfechas. Aunque queremos que los demás satisfagan nuestro deseo de ser amados en forma incondicional, podemos haber elegido gente que no pueda, o no quiera, ser un apoyo para nosotros. Algunos de nosotros estamos tan necesitados emocionalmente por el hecho de no haber sido amados, que ahuyentamos a la gente al hacerles ver que la necesitamos demasiado.
Otros nos vamos al extremo opuesto. Podemos habernos acostumbrado a que la gente no nos apoye, de modo que la evitamos. Luchamos contra nuestros sentimientos de necesidad de los demás volviéndonos demasiado independientes, no permitiéndonos ya necesitar a nadie. Algunos de nosotros no dejamos que la gente nos apoye.
Sea como sea, estamos dejando inconcluso un asunto importante. Nos merecemos otra cosa mejor. Cuando cambiemos, nuestras circunstancias cambiarán.
Si estamos demasiado necesitados de los demás, respondemos aceptando esa parte necesitada que tenemos. Nos dejamos curar el dolor de necesidades pasadas que no se satisficieron. Dejamos de decirnos a nosotros mismos que no somos dignos de amor porque no nos han amado de la manera como queríamos y necesitábamos.
Si hemos cerrado la parte de nosotros que tiene necesidad de la gente, nos disponemos a abrirnos, a ser vulnerables, a permitir que nos amen. Nos permitimos tener necesidades.
Tendremos el amor que deseamos y que necesitamos cuando empecemos a creer que somos dignos de ser amados, y cuando permitamos que esto ocurra.

«Hoy luchare por lograr el equilibrio entre el necesitar demasiado a los demás y el no permitirme necesitar a la gente. Me permitiré recibir el amor que se me ofrece».

Mi Reflexión: Para el codependiente las relaciones son un «problema», por cuanto se mantienen apegado a los otros, y es solo, a través de des dependencia emocional, que «sobreviven» con la gente. Se les dificulta expresar amor genuino amor por los demás y se impide recibirlo. Cuando inicia la recuperacion se da cuenta que puede ir gradualmente «desapegándose» de esas percepciones erróneas sobre el «dar y recibir amor», y va ajustando su creencia de los vínculos afectivos en un marco real de idas y venidas lógicas en cualquier relación con seres humanos. (Alpha).

¿Como manejas tus relaciones afectivas? ¿Eres un controlador de las personas? Comparte aquí tus vivencias al respecto.

Reflexión del Dia: 25 de Enero

Melody Beattie, en su Libro Ya no seas Codependiente plantea la necesidad del codependiente para adscribirse al Programa de Doce Pasos de Coda.

Si deseas conocer mas sobre esta Autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esta vía.

Reflexiona sobre esto:

Muchos de nosotros esperamos y necesitamos tanto de la gente que nos conformamos con muy poco.
Podemos volver nos dependientes de personas con problemas, de alcohólicos y otras personas con problemas. Podemos volvernos dependientes de personas que no precisamente nos gustan ni amamos. A veces, necesitamos tanto de la gente que nos conformamos casi con quien sea. Podemos necesitar a gente que no satisface nuestras necesidades. De nuevo, podemos encontrarnos en situaciones en las cuales necesitamos que alguien esté ahí para apoyarnos, pero que la persona que hemos elegido no puede o no podrá hacerlo.
Es posible incluso llegar a convencernos a nosotros mismos de que no podemos vivir sin alguien y que nos marchitaremos y moriremos si esa persona no está dentro de nuestra vida. Si esa persona es un alcohólico o tiene serios problemas, podremos tolerar el abuso y la enfermedad para mantenerla dentro de nuestra vida, a modo de proteger nuestra fuente de seguridad emocional. Nuestra necesidad se hace tan grande que nos conformamos con demasiado poco. Nuestras expectativas caen por debajo de lo normal, por debajo de lo que deberíamos esperar de nuestras relaciones. Luego, nos quedamos atrapados, varados.

Mi Reflexión: El codependiente ciertamente vve una crisis existencial tremenda: «depende de los demás para tener amor, afecto, felicidad, dicha. Cuan triste es esta situación. Si pierde esos afectos se cae de bruces. No puede sostenerse por si mismo. ¿Como llego allí? Nada bueno fue su pasado, recibió abusos, maltrato, intolerancia de aquellos en quien confiaba. ¿Como salir de ese dilema? Solo creyendo que se puede liberar con ayuda de otros que lo han logrado, confiar en la Divinidad, y aferrarse a la creencia que va a ser guiado en su sendero espiritual por ese poder superior. (Alpha).

¿Te has sometido a terapia Doce Pasos de CoDA? ¿Estas viendo resultados positivos? Comparte acá.

Reflexión del Dia: 23 de Julio

Melody Beattie, en su Libro Ya no seas Codependiente recalca que el rol preferido por el codependiente es de «cuidador compulsivo». También plantea que puede ejercer el de «victima», ejerciendo todo un drama a su alrededor para llamar la atención.

Si deseas conocer mas sobre esta Autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esta vía.

Reflexiona sobre esto:

¡Rescatamos cada vez que cuidamos de los demás!
Al cuidar o rescatar podemos sentir uno o más de los siguientes sentimientos: incomodidad y malestar por el dilema de la otra persona; la urgencia de hacer algo; lástima; sentimiento de culpa; santidad; ansiedad; una extrema responsabilidad por esa persona o problema; miedo; la sensación de estar siendo forzado u obligado a hacer algo; una indisposición ligera o severa a hacer algo; mayor competencia que la persona a la que estarnos “ayudando”; u ocasionalmente resentimiento por haber sido colocados en esta posición. También pensamos que la persona a quien estamos cuidando está desvalida y es incapaz de hacer lo que nosotros hacemos por ella. Sentimos que temporalmente nos necesita.
No me refiero a actos de amor, de amabilidad, de compasión y de verdadera ayuda, a situaciones en las cuales legítimamente se desea y se necesita de nuestra ayuda y nosotros queremos darla. Estos actos son la sal de la vida. Rescatar o cuidar no lo son.
Cuidar de los demás parece un acto mucho más amistoso de lo que es. Requiere incompetencia por parte de la persona a quien estamos cuidando. Rescatamos “víctimas”, personas que creemos no son capaces de ser responsables de si mismas. Las víctimas en realidad son capaces de cuidar de sí mismas, aunque nosotros y ellas no lo admitimos. General mente nuestras víctimas están ahí esperando a un lado del triangulo a que nosotros hagamos el primer movimiento y brinquemos dentro del triángulo con ellas.
Después de que rescatamos, inevitablemente nos movemos a la siguiente esquina del triángulo: la persecución. Nos volvemos resentidos y nos enojamos con la persona a quien tan generosamente hemos “ayudado”. Hemos hecho algo que no queríamos hacer, algo fuera de nuestra responsabilidad, hemos ignorado nuestras propias necesidades y deseos, y nos enojamos por ello. Para complicar más el asunto, esta víctima, esta pobre persona que hemos rescatado, no siente gratitud por nuestra ayuda. No aprecia suficientemente el sacrificio que hemos hecho. La víctima no se porta corno debiera. Ni siquiera está siguiendo nuestro consejo, que tan prontamente le brindamos. Esta persona no nos deja recomponer sus sentimientos. Algo no ha funcionado bien, de modo que nos rasgamos nuestro halo y sacamos nuestro trinche.

Mi Reflexión: El codependiente habitualmente se mueve en un triangulo vicioso que se denomina «Triangulo del drama o de Karpman». En este escenario figuran tres actores: rescatador, victima y victimario. El codependiente ejerce el rol de «rescatador-cuidador por excelencia». Vive pendiente de los otros,de intervenir en su vida, cambiarla, ofrecer consejos, sugerencias. No siempre se queda ejerciendo ese papel sino que en ocasiones pasa a ser victima, se debilita, se desarma, dramatiza, solo para buscar amor, afecto, felicidad. Triste vida la del codependiente. Necesita ayuda para salir de esa trama insana. (Alpha).

¿En ese triangulo cual es tu rol? ¿Identificas claramente la conducta autodestructiva en tu vida? Comenta acá.

Reflexión del Dia: 22 de Enero

Melody Beattie, en su Libro Ya no seas Codependiente plantea la actitud reaccionaria habitual del codependiente. Esto expresa: la ingobernabilidad de su vida y su baja autoestima.

Si deseas conocer mas sobre esta Autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esta vía.

Reflexiona sobre esto:

¡No tenemos que reaccionar! Tenemos opciones. Esta es la alegría de la recuperación de la codependencia. Y cada vez que ejercitamos nuestro derecho para elegir cómo queremos actuar, pensar, sentir y comportarnos, nos sentimos mejores y más fuertes.
No necesitamos eliminar todas nuestras reacciones hacia la gente y hacia los problemas. Las reacciones pueden ser útiles. Pueden ayudarnos a identificar lo que nos gusta y lo que nos hace sentirnos bien. Nos ayudan a identificar los problemas dentro de nosotros y a nuestro alrededor. Pero la mayoría de nosotros reaccionamos demasiado. Y gran parte de las cosas a las que reaccionamos son tonterías. No son tan importantes, y no ameritan el tiempo ni la atención que les damos. Algunas de nuestras reacciones son respuestas a las reacciones que los demás tienen frente a nosotros. (Estoy furiosa porque él se puso furioso; él se puso furioso porque yo estaba enojada; yo estaba enojada porque pensé que él estaba enojado conmigo; pero no estaba enojado sino herido porque…).

Mi Reflexión: Al codependiente se le caracteriza como una persona «reaccionaria» ante cualquier evento. Esta conducta en si misma evidencia una baja autoestima y un grado alto de dependencia afectiva a los demás. Con esa conducta a la defensiva pretende ocultar que su vida es ingobernable, y no tiene control alguno sobre sus acciones, vale decir es un comportamiento habitual y autodestructivo. No siempre las reacciones son inutiles, en ocasiones pueden servir de «termómetro» de nuestro estado emocional. (Alpha).

¿Reaccionas frecuentemente a cualquier evento? ¿Estas en recuperacion? Comenta acá.