Reflexión del Dia: 12 de Octubre

Melody Beattie, en su Libro «Ya no seas Codependiente» refiere la importancia de los sentimientos para el ser humano. Estos nos permiten crear una relación armónica con nosotros mismos y con el entorno. También nos conectan con la parte emocional consciente.

Si deseas conocer mas sobre esta Autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esta vía.

Reflexiona sobre esto:

Los sentimientos no son el fin ni el principio del vivir. Lo sentimientos no deben dictar o controlar nuestro comportamiento, pero tampoco podemos ignorar nuestros sentimientos. No pueden ser ignorados. Nuestros sentimientos son muy importantes. Cuentan. Importan. Nuestra parte emocional es especial.
Si hacemos que los sentimientos se vayan, si los alejamos, nos perdemos de una parte importante de nosotros mismos y de nuestras vidas. Los sentimientos son nuestra fuente de alegría, y también de tristeza, de miedo y de ira. La parte emocional de nosotros es la parte que ríe y la que llora. La parte emocional de nosotros es el centro para dar y recibir la cálida llama del amor. Esa parte de nosotros nos permite sentirnos más cerca de la gente. Esa parte de nosotros nos permite disfrutar del tacto y de otros sentimientos sensuales.
Nuestros sentimientos también son indicadores. Cuando nos sentimos felices, cómodos, cálidos y contentos, por lo general sabemos que todo está bien en nuestro mundo, en el momento presente. Cuando nos sentimos disgustados, con enojo, miedo o tristeza, nuestros sentimientos nos dicen que hay un problema.
Puede estar en nuestro interior —algo que estamos haciendo o pensando— o puede ser externo. Pero algo está mal.
Los sentimientos también pueden ser motivadores positivos. La ira puede ayudarnos a resolver un molesto problema. El miedo nos empuja a correr fuera del peligro. Las heridas que se repiten y el dolor emocional nos dicen que nos mantengamos alejados. Nuestros sentimientos también nos pueden dar claves para conocernos a nosotros mismos: nuestros deseos, necesidades y ambiciones. Nos ayudan a descubrirnos ya conocer lo que realmente estamos pensando. Nuestras emociones también golpean esa parte de nosotros que busca y sabe la verdad y desea la autopreservación, el automejoramiento, la seguridad y la bondad.
Nuestras emociones están conectadas a nuestro proceso de pensamiento consciente, cognoscitivo ya ese don misterioso llamado instinto o intuición.

Reflexión: Debemos permitir aflorar nuestros sentimientos, son indicadores valiosísimos que nos permiten saber claramente lo pensamos, nos conectan con nuestras emociones positivas o no. Lo que debemos impedir que estos controlen permanentemente nuestra parte emocional y nos impidan sentirnos alegres o en bienestar. Leamos que nos dicen, sin mantener presente aquellos que impiden la posibilidad de estar a gusto con nosotros mismos. (Alpha).

¿Te detienes a interpretar tus sentimientos y emociones? ¿Qué te manifiestan habitualmente? Comparte acá tu experiencia al respecto.

Reflexión del Dia: 10 de Octubre

Melody Beattie, en su Libro «Ya no seas Codependiente» plantea que no hay que avergonzarse de ser un codependiente. Podemos sanar, si nos proponemos hacerlo. Debemos tomar una decisión y ejecutarla.

Si deseas conocer mas sobre esta Autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esta vía.

Reflexiona sobre esto:

¡No hay necesidad de sentir vergüenza de ser (y quedarse) Codependiente!
No hay que avergonzarse de haber pasado por el proceso de permitir que la codependencia (de una manera negativa) impacte nuestras vidas, y luego aprender a dejar de tratar de hacer lo imposible (controlar a los demás) y empezar a centrarse en lo posible: Nosotros mismos. Conscientemente y de una manera que toma en consideración a otros y a nosotros mismos al tomar decisiones.
Sentirse avergonzado acerca de las diferentes etapas de la vida que experimentamos en el camino a convertirse en lo que somos ahora no es diferente de encogerse cuando vemos fotos de cómo usamos nuestro cabello hace 25 años. Podemos sentirnos así; pero no es necesario. Estábamos haciendo lo que pensamos mejor en ese momento.
No estábamos locos, ni siquiera a la altura de nuestra obsesión y control. Estábamos codependiente de factores no saludables en nuestras decisiones y comportamientos.
Para muchos millones de nosotros, esa revelación fue y sigue siendo un gran alivio. Nos ponemos libres para vivir nuestras vidas de una manera que fue y sigue siendo en nuestro mejor interés.
¡No hay vergüenza en eso!

Reflexión: No sintamos vergüenza de ser codependientes. Cuando nos movemos en el sendero espiritual de la recuperación, pasamos por etapas que van quitando el dolor y sufrimiento para dar paso a la «serenidad y paz interior». Todo es valido, nada debe avergonzarnos. Por el contrario hemos recorrido mucho terreno para llegar al lugar que estamos ahora. (Alpha).

¿Antes de iniciar la recuperación te sentías avergonzado? ¿Cómo te percibes actualmente con respecto a tu codependencia? Comparte tus experiencias acá.

Reflexión del Dia: 8 de Octubre

Melody Beattie, en su Libro «Ya no seas Codependiente» plantea que el codependiente lo mueve cualquier viento y se convierte en un manojo de sentimientos de confusión e ira, esto le impide controlarse y mucho menos controlar la situación.

Si deseas conocer mas sobre esta Autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esta vía.

Reflexiona sobre esto:

¿Somos como cantores de un gran coro. Si el que está junto a nosotros desentona, ¿debemos hacerlo nosotros también? No le ayudaría más a él, y a nosotros, tratar de seguir entonado? Podemos aprender a cumplir con nuestra parte.
No necesitamos eliminar todas nuestras reacciones hacia la gente y hacia los problemas. Las reacciones pueden ser útiles. Pueden ayudarnos a identificar lo que nos gusta y lo que nos hace sentirnos bien. Nos ayudan a identificar los problemas dentro de nosotros y a nuestro alrededor. Pero la mayoría de nosotros reaccionamos demasiado. Y gran parte de las cosas a las que reaccionamos son tonterías. No son tan importantes, y no ameritan el tiempo ni la atención que les damos. Algunas de nuestras reacciones son respuestas a las reacciones que los demás tienen frente a nosotros. (Estoy furiosa porque él se puso furioso; él se puso furioso porque yo estaba enojada; yo estaba enojada porque pensé que él estaba enojado conmigo; pero no estaba enojado sino herido porque…)
Nuestras reacciones pueden ser el eslabón de una cadena de reacciones tal que a menudo los involucrados están irritados y nadie sabe por qué. Simplemente están irritados. Luego, todos están fuera de control y a la vez son controlados. A veces la gente se comporta de cierta manera para provocar que nosotros reaccionemos de otra. Si dejamos de reaccionar de esta cierta manera, la privamos de lo divertido que esto le resulta. Quedamos fuera de su control y le quitamos el poder que tiene sobre nosotros.
A veces nuestras reacciones provocan que los demás reaccionen de cierto modo. (Pero no necesitamos seguir haciéndolo, ¿o sí?) A veces el reaccionar estrecha nuestra visión en tal forma que nos quedamos varados reaccionando a los síntomas o a los problemas. Podemos estar tan ocupados reaccionando que no tenemos tiempo ni energía para identificar el problema real, y mucho menos para descubrir cómo solucionarlo. Podemos pasar años reaccionando ante cada incidente provocado por la bebida y la crisis resultante, ¡fallando completamente en reconocer que el verdadero problema es el alcoholismo! Aprende a dejar de reaccionar de maneras que no son necesarias y que no funcionan. Elimina las reacciones que te lastiman.

Reflexión: Los codependientes somos reaccionarios y no siempre es malo hacerlo. En ocasiones nuestras reacciones sirven para saber que nos causa inquietud y que debemos cambiar para mejorar nuestras relaciones. Hay que cuidar que como reaccionamos impactamos a los demás y es una cadena de eventos que pierde el control, entrando en desajustes serios. Reflexionemos antes de hacerlo, nos da tiempo de «reacomodar «nuestros sentimientos.(Alpha).

¿Habitualmente reaccionas ante cualquier evento? ¿Cómo controlas la situación posteriormente? Comenta tus experiencias.

Reflexión del Dia: 7 de Octubre

Melody Beattie, en su Libro «Ya no seas Codependiente» refiere como el codependiente puede y debe desarrollar la habilidad para detectar a tiempo que esta «reaccionando» ante sus relaciones y detener esa conducta.

Si deseas conocer mas sobre esta Autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esta vía.

Reflexiona sobre esto:

Aprende a reconocer cuando estás reaccionando, cuándo estás permitiendo que alguien o algo tire de tus cuerdas. Generalmente cuando empiezas a sentirte ansioso, temeroso, indignado, rechazado, avergonzado, preocupado, confundido o a padecer autoconmiseración, hay algo en tu medio ambiente que te ha hecho nudos. (No afirmo que esté mal experimentar estos sentimientos. Probablemente cualquiera se sentiría así. La diferencia estriba en que estamos aprendiendo a decidir por cuánto tiempo deseamos seguir sintiéndonos así, y qué queremos hacer al respecto.). Emplear las palabras “ella, o él o eso me hicieron sentir” a menudo indica que estamos reaccionando. Perder nuestra sensación de paz y serenidad.

Reflexión: Para el codependiente es importante detectar cuando experimenta sentimientos de confusión y miedo ante las situaciones en sus relaciones con las personas, ya que esto significa que está reaccionando inadecuadamente, generando conductas insanas. No debemos permitir que nos quiten nuestra paz interior. Mantengámonos alertas ante cualquier situación y abordemos a tiempo la solución. (Alpha).

¿Puedes detectar cuando estás experimentando reacciones negativas en tus relaciones? Comenta tus vivencias.

Reflexión del Dia: 6 de Octubre

Melody Beattie, en su Libro «Ya no seas Codependiente» refiere que los codependientes pasan su mayor tiempo responsabilizándose del cuidado de las otras personas, y todo esto evidencia una baja autoestima.

Si deseas conocer más sobre esta Autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esta vía.

Reflexiona sobre esto:

Muchos no entendernos de qué somos responsables y de qué no lo somos. Podemos creer que tenemos la obligación de estremecernos cada vez que alguien tiene un problema porque es responsabilidad nuestra actuar justamente así. En ocasiones al sentirnos responsables de tantas cosas, nos enfermamos de tal manera que rechazamos toda responsabilidad y nos volvemos totalmente irresponsables.
Sin embargo, en el centro de la mayoría de los rescates hay un demonio: baja autoestima. Rescatamos porque no nos sentimos bien con nosotros mismos. Aunque los sentimientos son temporales y artificiales, el hecho de cuidar nos da un estado temporal de sentimientos agradables, de autoestima y de poder. Tal y como un trago ayuda a un alcohólico a sentirse mejor momentáneamente, un rescate nos distrae temporalmente del dolor de ser quienes somos.
No nos sentimos adorables, de modo que nos conformamos con sentirnos necesarios. No nos sentimos bien con nosotros mismos, de modo que nos vemos obligados a hacer algo en particular que pruebe qué tan buenos somos.

Reflexión: Cuando estamos apegados somos rescatadores permanentes y nos sentimos bien cuidando a los demás, aunque no tengamos el mínimo amor a nosotros mismos. Rescatar y cuidar a los otros es una manera evasiva de sentirnos con poder y alta estima, aunque de manera engañosa. La actitud es revertir esa situación y empezar nuestra recuperación. (Alpha).

¿Te mantienes ocupado en cuidar a los otros? ¿Has pensado en iniciar tu recuperación para sanarte? Comenta acá tu vivencia.

Reflexión del Dia: 5 de Octubre

Melody Beattie, en su Libro «Ya no seas Codependiente» plantea que durante la recuperacion trazamos metas para lograrlas gradualmente, de no cumplirse alguna de estas, insistamos hasta que se de el momento correcto.

Si deseas conocer mas sobre esta Autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esta vía.

Reflexiona sobre esto:

Confiemos en el tiempo que Dios nos marca. No quitemos una meta de la lista si todavía es importante para nosotros sólo porque no la logramos o no recibimos algo cuando lo esperábamos; los malvados “debería de…” infiltran cada área de nuestra vida. En ocasiones, mis metas no se cumplen por años enteros. Cuando fijo mis metas en forma anual, he mirado mi lista y he pensado: “¡Oh! este problema nunca se resolverá. Ha estado en mi lista por años”. O: “Este sueño nunca se hará realidad. Es el cuarto año consecutivo que lo he fijado por escrito”. O: “Nunca seré capaz de cambiar este defecto de carácter que tengo”. No es cierto. Simplemente, aún no ha sucedido.
Las cosas suceden cuando llega el tiempo de que así sea; cuando estemos listos, cuando Dios esté listo, cuando el mundo esté listo. Déjalas. Suéltalas. Pero mantenlas, en tu lista.
Necesitamos fijar metas para nosotros mismos. Inicia hoy cuando termines este capítulo. Si no tienes ninguna meta, que la primera meta sea “tener algunas metas”. Quizás no empieces a vivir por siempre feliz, pero puede que empieces a vivir feliz.

Reflexión: Los codependientes tenemos la responsabilidad de asumir nuestra recuperación. Para ello nos trazamos metas, los cuales no siempre se cumplen como deseamos según nuestra planificación. Aun así, debemos mantenernos firmes para lograrlas. Llegará el momento preciso, con la ayuda de nuestro Poder Superior, para que se den esos cambios que en ocasiones son difíciles de lograr. Son creencias, y es «engorroso» desmontar unas para adoptar otras ¡Persistamos hasta lograrlo! (ALpha).

¿Has trazado tus metas alcanzables para lograr tu recuperación? ¿Cómo estás logrando este proceso kiberador? Comenta acá tus vivencias.

Reflexión del Dia: 3 de Octubre

Melody Beattie, en su Libro «Ya no seas Codependiente»reafirma que los codependientes llegan a obsesionarse tanto por las otras personas que pierden su capacidad de reaccionar para solicitar la ayuda profesional que necesitan.

Si deseas conocer mas sobre esta Autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esta vía.

Reflexiona sobre esto:

Es posible incluso llegar a convencernos a nosotros mismos de que no podemos vivir sin alguien y que nos marchitaremos y moriremos si esa persona no está dentro de nuestra vida. Si esa persona es un alcohólico o tiene serios problemas, podremos tolerar el abuso y la enfermedad para mantenerla dentro de nuestra vida, a modo de proteger nuestra fuente de seguridad emocional. Nuestra necesidad se hace tan grande que nos conformamos con demasiado poco. Nuestras expectativas caen por debajo de lo normal, por debajo de lo que deberíamos esperar de nuestras relaciones. Luego, nos quedamos atrapados, varados.

Reflexión: El codependiente con apego afectivo piensa de manera obsesiva y su conducta sólo se orienta a vivir la vida de las demás personas. Eso les da una seguridad emocional que le oxigena. Por supuesto la obsesión lo lleva a una compulsión que le enturbia el entendimiento, llegando a perder el control sobre sus emociones y sentimientos. Parar ese proceso es importante y sano. Necesita recuperarse y es responsabilidad propia buscar la ayuda que necesita. (Alpha).

¿Estás pasando por una situación similar? ¿Has buscado ayuda profesional? Comenta aca tus experiencias.

Reflexión del Dia: 2 de Octubre

Melody Beattie, en su Libro «Ya no seas Codependiente»reafirma que los codependientes, en nuestra obsesión por controlar a los otros, dejamos de abrirnos al propósito divino que nuestro Poder Superior tiene para cada uno de nosotros.

Si deseas conocer mas sobre esta Autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esta vía.

Reflexiona sobre esto:

Vivir nuestra vida puede no ser tampoco un prospecto emocionante para algunos de nosotros. Tal vez hemos estado tan envueltos con otras personas que hemos olvidado cómo vivir y disfrutar de nuestras vidas.
Podemos sufrir un dolor emocional tan grande que pensamos que no tenemos vida propia; lo único que sentimos es nuestro dolor. Eso no es verdad. Somos más que nuestros problemas. Podemos ser más que nuestros problemas.40 No porque hasta ahora la vida haya sido tan dolorosa debe seguir lastimándonos. La vida no tiene que herirnos tanto, y no será así, si empezamos a cambiar. De aquí en adelante puede ser que no todo sean rosas, pero tampoco tiene por qué ser todo espinas. Necesitamos y podemos desarrollar nuestras propias vidas. Como dice un amigo mío: “Consiguete una vida”.
Algunos codependientes piensan que una vida sin futuro, sin propósito, sin grandes sacudidas y sin grandes quebrantos no vale la pena vivirse. Eso tampoco es verdad. Yo creo que Dios nos tiene guardadas cosas emocionantes e interesantes a cada uno de nosotros. Creo que para cada quien existe un propósito placentero y que vale la pena por algo más que cuidar a la gente y ser un apéndice de ella. Creo que manifestamos esta actitud cuando cuidamos de nosotros mismos. Empezamos a cooperar. Nos abrimos a la bondad y a la riqueza de que disponemos dentro de nosotros y para nosotros.

Reflexión: Los codependientes nos olvidamos de vivir, pasamos nuestro tiempo complaciendo a los demás. Perdemos la perspectiva de disfrutar la vida. Debemos tener claro que nuestro Poder Superior tiene un propósito específico para nosotros y ese se revelara si nos abrimos a conocerlo. Ocupemos nuestro tiempo dándonos la libertad para abrirnos a esa guía divina. (Alpha).

¡Te das chance para divertirte y disfrutar la vida? Comenta acá tus vivencias.

Reflexión del Dia: 30 de Septiembre

Melody Beattie, en su Libro «Ya no seas Codependiente»plantea que el codependiente tiene un dilema para aceptarse tal cual es. Tiene la creencia errónea que los otros son felices porque se lo merecen, sin entender conscientemente que la diferencia estriba en que ellos se aceptan, aman como son, y merecen ser felices.

Si deseas conocer mas sobre esta Autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esta vía.

Reflexiona sobre esto:

Podemos amarnos a nosotros mismos y a nuestras vidas. Podemos consentirnos y amarnos. Podemos aceptar a nuestros maravillosos yo, con todas nuestras faltas, flaquezas, puntos fuertes, puntos débiles sentimientos, pensamientos, y todo lo demás. Es lo mejor que tenemos. Es lo que somos, y lo que teníamos que ser y no es un error. Nosotros somos lo más grande que alguna vez nos pueda suceder. Creanlo. Esto hace la vida mucho más fácil.
La única diferencia entre los codependientes y el resto del mundo es que las otras personas no se fastidian a sí mismas por ser quienes son. Toda la gente tiene pensamientos similares y tiene todo un rango de sentimientos. Toda la gente comete errores y hace unas cuantas cosas bien. De modo que podemos dejarnos en paz.
No somos ciudadanos de segunda clase. No merecemos llevar vidas de segunda mano ¡Y no merecemos relaciones de segunda! Somos adorables y vale la pena que nos conozcan. La gente que nos ama y a quienes les caemos bien no son estúpidos ni inferiores por hacerlo. Tenemos derecho a ser felices. Nos merecemos cosas buenas.

Reflexión: Los codependientes vivimos en un dilema existencial… «no aceptarnos lo que somos». Nuestra autoestima está comprometida y nos desafiamos comparándonos con los demás. Por supuesto en ese terreno, salimos perdiendo. Debemos aceptarnos tal cual somos, aprender a amarnos y responsabilizarnos de hacer los ajustes y lograr los cambios necesarios ¡No somos perfectos, somos humanos! (Alpha).

¿Entras en ese grupo de no aceptarse como es? ¿Has usado la aceptación de ti mismo para hacer cambios? Comenta tus experiencias aquí.

Reflexión del Dia: 29 de Septiembre

Melody Beattie, en su Libro «Ya no seas Codependiente»plantea que los codependientes para evadirse de sus propios problemas usan su esfuerzo en pretender controlar a las demás personas, aunque se topan con un barrera infranqueable, por cuanto cada quien es responsable de sus acciones.

Si deseas conocer mas sobre esta Autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esta vía.

Reflexiona sobre esto:

El control es una ilusión. No funciona. No podemos controlar el alcoholismo. No podemos controlar las conductas compulsivas de nadie: comer en exceso, una conducta sexual exagerada, la apuesta compulsiva, ni ninguna otra de sus conductas. No podemos (y no es asunto nuestro hacerlo) controlar las emociones, la mente o las elecciones de nadie. No podemos controlar el resultado de los eventos. No podemos controlar a la vida. Algunos de nosotros apenas podemos controlamos a nosotros mismos.
A fin de cuentas las personas hacen lo que quieren hacer. Se sienten como se quieren sentir (o cómo se están sintiendo); piensan lo que quieren pensar; hacen las cosas que creen que necesitan hacer; y cambiarán sólo cuando estén listos para cambiar. No importa si ellos no tienen la razón y nosotros sí. No importa que se estén lastimando a sí mismos. No importa que nosotros podríamos ayudarles si tan sólo nos escucharan y cooperaran con nosotros. NO IMPORTA, NO IMPORTA, NO IMPORTA, NO IMPORTA.
No podemos cambiar a las personas. Cualquier intento de controlarlas es un engaño y una ilusión. Se resistirán a nuestros esfuerzos o redoblarán los suyos para probar que no podemos controlarlas. Podrán adaptarse temporalmente a nuestras demandas, pero cuando nos demos la vuelta regresarán a su estado natural. Y aún más, la gente nos castigara por obligarla a hacer algo que no quiere, o a ser como no quiere ser,
Ningún control será suficiente para efectuar un cambio permanente o deseable en otra persona. A veces podremos hacer cosas que aumenten la probabilidad de que la gente quiera cambiar, pero ni aun eso podemos garantizar o controlar.
Y esa es la verdad. Es una desgracia. A veces es difícil de aceptar, especialmente si alguien a quien amas se lastima a sí mismo o a sí misma y a ti. Pero así es. La única persona a la que puedes o podrás hacer cambiar es a ti misma. La única persona que te atañe controlar eres tú misma.

Reflexión: Quienes somos controladores solemos creer «ilusoriamente» que podemos intervenir y cambiar a las personas, hasta que un día conscientemente aceptamos que hemos perdido nuestro tiempo, esfuerzo y salud física y emocional en ese fallido intento. Cada quien se comporta como quiera. A nosotros nos toca asumir que la única persona que podemos cambiar es a nosotros mismos ¡Nuestra real y mayor tarea! (Alpha).

¿Has vivido esta experiencia? ¿Cuales han sido tus sentimientos cuando no logras tu cometido? Comparte aquí con nosotros tus vivencias.