Meditación 28 de Mayo … Deja ir las dudas acerca de ti mismo

Melody Beattie, en su Libro El Lenguaje del Adiós ratifica que el codependiente desconfía de sus fortalezas personales, resaltando las debilidades. No es necesario que los cambios sean de un dia para otro. LLeva su tiempo, pero si no se inicia no llegaremos a recuperarnos.

Si deseas conocer mas sobre esta autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esa vía.

Medita sobre esto:

Una mujer casada que recientemente se unió a Al – Anón me llamó una tarde. Trabajaba medio tiempo como enfermera, había asumido todas las responsabilidades de la crianza de sus dos hijos y hacía todos los quehaceres domésticos, incluyendo reparaciones y finanzas. «Quiero separarme de mi marido», sollozó.» Ya no lo soporto más a él ni a su abuso. Pero dime, por favor dime», me dijo, ¿crees que puedo cuidarme sola?». (Ya No Seas Codependiente).
No solo esta bien que cuidemos de nosotros mismos, sino que podemos cuidarnos muy bien.
Muchos de nosotros confiamos en nuestra capacidad para cuidar de los demás, pero dudamos de nuestra fuerza inherente para cuidar de nosotros mismos. Hemos llegado a creer, a partir de nuestras circunstancias pasadas o presentes, que necesitamos cuidar a los demás y necesitamos que los demás nos cuiden. Esa es la más acabada creencia codependiente.
No importa dónde nació esta creencia autoderrotista, podemos liberarnos de ella y remplazarla por otra mejor, otra más sana, más adecuada. Podemos cuidar de nosotros mismos, estemos dentro de una relación o no. Se nos proveerá de todo lo que necesitemos. Tendremos seres queridos, amigos y a nuestro Poder Superior para ayudarnos.
Saber que podemos cuidarnos solos no significa que a veces no tengamos sentimientos de miedo, incomodidad, duda, ira y fragilidad. Significa que debemos practicar la «valiente vulnerabilidad», como la llamo Colette Dowling en El complejo de Cenicienta. Podremos sentirnos asustados, pero lo hacemos de todas maneras.

«Hoy, Dios mío, ayúdame a saber que me puedo cuidar solo».

Mi Reflexión: Basta de menospreciarnos, de no creer en nuestras fortalezas para dejar ir lo negativo y enfermizo. Hay maneras de abordar este problema psicoafectivo que es la codependencia. Podemos cuidarnos y sentirnos bien con nosotros. No es imposible, solo falta dar ese empuje inicial y buscar ayuda de grupos de CoDA para afianzar las convicciones que tenemos del cambio necesario. (Alpha).

¿Sientes que debes asumir cambios importantes en tu vida? ¿Estás en Terapia de CoDA? Has visto algunos resultados positivos en tu vida? Comparte aquí.

Reflexión del Dia: 27 de Mayo


Melody Beattie, en su Libro Ya no seas Codependiente reitera que la codependencia como padecimiento psicoafectivo puede ser controlado y es al codependiente a quien le corresponde transitar con seriedad ese sendero espiritual.

Si deseas conocer más sobre esta Autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esta vía.

Reflexiona sobre esto:

El desapego también implica aceptar la realidad, los hechos. Requiere fe en nosotros mismos, en Dios, en otras personas, en el orden natural y en el destino de las cosas en este mundo. Nos liberamos de nuestros pesares y preocupaciones y nos damos a nosotros mismos la libertad para disfrutar de la vida a pesar de nuestros problemas no resueltos. Confiamos en que todo está bien a pesar de los conflictos. Confiamos en que Alguien más grande que nosotros sabe, ha ordenado y se preocupa de lo que está sucediendo.
Entendemos que este Alguien puede hacer mucho más por resolver el problema que nosotros. De modo que tratamos de no estorbar su camino y dejar que Él lo haga. A su tiempo, sabremos que todo está bien porque vemos cómo las cosas más extrañas (y a veces, las más dolorosas) se solucionan de la mejor manera y en beneficio de todos.

Reflexión: El desapego no es desamor, sino una manera sana de relacionarse, cuyas premisas son: independencia, no posesividad y no adicción. La persona no apegada (emancipada) es capaz de controlar sus temores al abandono, no considera que deba destruir la propia identidad en nombre del amor, pero tampoco promociona el egoísmo y la deshonestidad. Desapegarse no es salir corriendo a buscar un sustituto afectivo, volverse un ser carente de toda ética o instigar la promiscuidad. La palabra libertad nos asusta y por eso la censuramos. (Walter Riso).

¿Te sientes apegado afectivamente a algo o a alguien? ¿Estás ejercitando el desapego como herramienta liberadora? Comparte aquí.

Meditación 27 de Mayo… Reconoce alternativas


Melody Beattie, en su Libro El Lenguaje del Adiós reitera que es contraproducente mantenerse aferrado al drama. El codependiente tiene opciones, solo debe asumir la necesidad del cambio y llevarlo a la acción.

Si deseas conocer mas sobre esta autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esa vía.

Medita sobre esto:

Tenemos alternativas, mas alternativas de las que nos permitimos ver.
Podremos sentirnos atrapados en nuestras relaciones, en nuestro trabajo, en nuestra vida. Podemos sentirnos encerrados en conductas, tales como cuidar excesivamente a los demás o controlar.
Sentirse atrapado es un síntoma de «codependencia». Cuando nos escuchamos decir: «Tengo que cuidar a esta persona…», «tengo que decir que si…», «tengo que tratar de controlar a esta persona…», «tengo que comportarme de esta manera, que pensar de esta manera, que sentir de esta manera…», podemos saber que estamos eligiendo no ver otras alternativas.
Esa sensación de estar atrapado es una ilusión. No nos controlan las circunstancias, nuestro pasado, las expectativas de los demás o las enfermizas expectativas que tenemos de nosotros mismos. Podemos elegir lo que nos conviene, sin sentimientos de culpa. Tenemos opciones.
La recuperación no es comportarse perfectamente o de acuerdo con las reglas de otro. Más que nada, la recuperación es saber que tenemos alternativas y darnos a nosotros mismos la libertad de escoger.

«Hoy abriré mi pensamiento y me abriré yo mismo a las alternativas de que dispongo.Tomaré las alternativas que me convengan».

Mi Reflexión: El codependiente vive en la creencia de que está atrapado en situaciones enfermizas de las que no puede salir. Realmente no asume la opción de otra manera de vivir. Mientras piense así, actuará en consecuencia y para romper ese círculo insano solo debe intentarlo y verá resultados positivos y saludables en su vida. (Alpha).

¿Has asumido que tal como estás es insano para ti? ¿Estás pensando en otras alternativas de cambios? ¿Has optado por adscribirte a Grupos de Ayuda de CoDA? Comparte aquí tus opiniones.

Meditación 26 de Mayo… Disfruta los días buenos

Melody Beattie, en su Libro El Lenguaje del Adiós plantea la necesidad de cambio que requiere adoptar el codependiente. Basta ya de estar sufriendo y lamentándose por su vida triste y apagada. Es momento de buscar la paz y serenidad.

Si deseas conocer mas sobre esta autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esa vía.

Medita sobre esto:

Los sentimientos agradables se pueden convertir en parte habitual de nuestra vida.
No hay absolutamente ninguna virtud en el sufrimiento innecesario que muchos de nosotros hemos sentido gran parte de nuestra vida. No tenemos por qué permitirle a los demás que nos hagan sentir desdichados, como tampoco tenemos por qué sentirnos desdichados nosotros mismos.
Un buen día no tiene por qué ser «la calma antes de la tormenta». Esa es una vieja forma de pensar que aprendemos en sistemas disfuncionales.
En la recuperación, tener un buen día o un sentimiento agradable no significa que estemos en negación. No tenemos por qué destrozar nuestros buenos momentos buscando obsesivamente un problema o creándolo.
Disfrutar de nuestros días buenos no significa que le estemos siendo desleales a nuestros seres amados que tienen problemas. No tenemos por qué hacernos sentir culpables porque los demás no están teniendo un día bueno. No tenemos porqué hacernos sentir desdichados para ser como ellos. Ellos pueden tener su día y sus sentimientos y nosotros podremos tener los nuestros.
Un sentimiento agradable es para disfrutarlo. Más de lo que podamos imaginar, los días buenos son nuestros si así lo pedimos.

«Hoy me permitiré disfrutar de lo bueno. No tengo por qué destrozar mi día bueno o un sentimiento agradable; tampoco tengo por qué dejar que los demás lo echen a perder».

Mi Reflexión: El codependiente es una persona sufriente. Parte de su vida la ha perdido tratando de complacer a otros, sin atenderse ni responsabilizarse de la propia. Es momento de asumir una postura de autovalía personal y demostrarse que puede y debe cambiar para «desmarcarse» de esa creencia negativa. (Alpha).

¿Has estado en situaciones de sufrimiento y abandono? ¿Piensas asumir con compromiso la Terapia para recuperarte de este padecimiento? Comenta acá.

Reflexión del Dia: 26 de Mayo

Melody Beattie, en su Libro Ya no seas Codependiente recalca que no tenemos porque preocuparnos por los demás hasta obsesionarnos. Eso solo nos conduce a enfermarnos.

Si deseas conocer mas sobre esta Autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esta vía.

Reflexiona sobre esto:

Preocuparse, obsesionarse y controlar son ilusiones. Son trucos que construimos nosotros mismos. Sentimos que estamos haciendo algo para solucionar nuestros problemas, pero no es así. Muchos de nosotros hemos reaccionado de esta manera con justificada buena razón. Podremos haber vivido con problemas complicados y serios que han perturbado nuestra vida, y que a cualquier persona normal podrían volver ansiosa, perturbada, preocupada y obsesionada. Podemos amar a alguien que tiene problemas, alguien fuera de control. Su problema puede ser el alcoholismo, un trastorno de la alimentación, apostar de una manera compulsiva, un problema emocional o mental, o cualquier combinación de estos.
Algunos de nosotros podremos haber vivido con problemas menos serios, pero que nos preocupan de todas maneras. Las personas que amamos o que nos importan pueden tener cambios súbitos en sus estados de ánimo. Pueden hacer cosas que desearíamos que no hicieran. Podemos pensar que él o ella podrían hacer las cosas de otra manera, de un modo mejor, de una forma que creemos que no causaría tantos problemas.
Por fuerza del hábito, algunos de nosotros hemos desarrollado una actitud de apego, de preocuparnos, reaccionar y obsesivamente tratar de controlar. Quizá hemos vivido con personas y a través de eventos que estaban fuera de control. Tal vez obsesionándonos y controlando pudimos guardar un equilibrio o lograr que temporalmente las cosas no empeoraran. Y luego simplemente seguimos haciendo lo mismo. Quizá teníamos miedo de soltarnos, porque cuando nos soltamos en el pasado sucedieron cosas terribles y dolorosas. Tal vez hemos estado apegados a la gente –viviendo sus vidas por y a través de ella– durante tanto tiempo que ya no nos queda una vida propia por vivir. Es más seguro seguir apegados. Por lo menos sabríamos que estamos vivos si reaccionáramos. Al menos tendríamos algo qué hacer si estuviéramos obsesionándonos o controlando. Por varias razones los codependientes tienden a apegarse a los problemas y a la gente. No importa no solucionar nada al preocuparse. No importa que esos problemas rara vez tengan solución. No importa que estén tan obsesionados que ni siquiera puedan leer un libro, ver la televisión o salir a dar un paseo. No importa que sus emociones estén en constante torbellino por lo que la otra persona dijo o no dijo, de lo que hizo o no hizo, o de lo que hará después. ¡No importa que las cosas que estemos haciendo no ayuden a nadie! Sin importarnos el costo, persistiremos en ello. Apretaremos los dientes, nos asiremos a la curda y nos prenderemos a ella más fuerte que nunca. Algunos de nosotros ni siquiera nos daremos cuenta de que nos hemos estado agarrando tan fuerte. Otros nos habremos convencido de que debemos asirnos así de fuerte. Creemos que no existe otra alternativa que la de reaccionar a esta persona o problema de esta manera obsesiva. A menudo, cuando le sugiero a la gente que se aparte de esta persona o de este problema, me responden con horror. “¡Oh, no!”, dicen, “nunca podría hacer eso. Yo lo amo, o la amo, demasiado. Me importa demasiado para hacerle eso. Este problema o esta persona es demasiado importante para mí. Tengo que permanecer apegado a ella (o a esto)”.

Mi Reflexión: No podemos desentendernos por completo de las opiniones de los demás, porque somos seres eminentemente sociales. Sin embargo, cuando te importa más el qué dirán que tu satisfacción, cuando priorizas la aceptación de los demás sobre tu propia felicidad, entonces, antes o después, tu camino se torcerá y cuando mires a tu alrededor, solo verás insatisfacción. (Alpha).

¿Te importa mucho la aprobación de los demás? ¿Estás manejando la herramienta del desapego? Comenta aquí.

Reflexión del Dia: 25 de Mayo

Melody Beattie, en su Libro Ya no seas Codependiente ratifica que el codependiente tiene una baja autoestima y esto lo lleva a menospreciarse y hacer lo que sea para ser aceptado por los demás. El siente que solo así es amado y valorado.

Si deseas conocer mas sobre esta Autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esta vía.

Reflexiona sobre esto:

En la codependencia, al igual que en muchas otras áreas de la vida, todo está conectado con todo, y una cosa conduce a la otra. En este caso, nuestra baja autoestima frecuentemente está conectada con mucho de lo que hacemos o que no hacemos y nos conduce a muchos de nuestros problemas.
Como codependientes, a menudo nos disgustamos tanto con nosotros mismos que pensamos que está mal que nos tomemos tanto en cuenta, en otras palabras, que parezcamos egoístas. Ponernos en primer lugar está fuera de orden. A menudo, pensamos que sólo tenemos valor si hacemos cosas por los demás o cuidamos de ellos, de modo que nunca decimos no. Cualquiera tan insignificante como nosotros debe quitarse hasta la camisa para caer bien. Nadie en su sano juicio podría disfrutar o gustarle estar con nosotros.
Pensamos que tenemos que hacer algo por la gente para lograr su amistad y conservarla. Gran parte de la actitud defensiva que he visto en los codependientes se da no porque pensamos que estamos por encima de la crítica, sino porque nuestra autoestima es tan baja que cualquier ataque que percibamos amenaza con aniquilarnos. Nos sentimos tan mal y tenemos tal necesidad de ser perfectos y de evitar la vergüenza que no podemos permitirle a nadie que nos diga que hemos hecho algo mal. Una razón por la cual molestamos y criticamos a los demás es porque hacemos lo mismo con nosotros mismos.

Mi Reflexión: El codependiente busca la aprobación de los demás para mantenerse en constante manipulación y control de las personas. Recordemos que el codependiente tiene baja autoestima y para ser aceptado se menosprecia e indignifica así mismo, con tal de sentirse querido, acompañado y comprendido. (Alpha).

¿Estás controlando a personas o situaciones? ¿Te sientes aceptado por esas personas? Comenta acá.

Meditacion 25 de Mayo… Amémonos a nosotros mismos incondicionalmente

Melody Beattie, en su Libro El Lenguaje del Adiós ratifica que la baja autoestima del codependiente lo hace no quererse ni aceptarse. Esto lo lleva a conflictos intensos que pueden afectar seriamente su vida emocional y física.

Si deseas conocer mas sobre esta autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esa vía.

Medita sobre esto:

Ámate a ti mismo para curarte y hacerte una buena vida propia.
Ámate a ti mismo teniendo relaciones que te funcionen a ti y a la otra persona.
Ámate a ti mismo para tener paz, felicidad, alegría, éxito y contento.
Ámate a ti mismo para darte todo lo que siempre quisiste.

Podemos dejar de tratarnos a nosotros mismos en la forma como otros nos trataron, si es que se comportaron de una manera menos que sana, menos que deseable. Si hemos aprendido a vernos a nosotros mismos en forma crítica, condicional, devaluada y punitiva, es tiempo de parar. Otras personas nos trataron de esa manera, pero es aún peor tratarnos así ahora a nosotros mismos.
Amarnos a nosotros mismos nos puede parecer extraño, incluso tonto a veces. La gente puede acusarnos de estar siendo egoístas. No tenemos por qué creerles.
La gente que se ama a sí misma es realmente capaz de amar a los demás y de dejar que los otros amen. La gente que se ama a sí misma y que se tiene en alta estima es la que da más, la que contribuye más, la que más ama.
¿Cómo nos amamos a nosotros mismos? Forzándonos a hacerlo, al principio. Fingiéndolo si es necesario. Actuando «como sí». Trabajando tan duro por amarnos y gustarnos como hemos trabajado por no gustarnos. Explora lo que significa amarte a ti mismo.
Haz cosas por ti mismo que reflejen un amor propio compasivo, cariñoso.
Ama todo lo tuyo, pasado, presente y futuro. Perdónate tan pronto y tan frecuentemente como sea necesario. Date ánimos. Halágate tú mismo.
Si pensamos y creemos ideas negativas, saquémoslas a la luz pronta y honestamente, para que podamos reemplazar esas creencias por otras mejores.
Date palmaditas en la espalda cuando sea necesario. Disciplinate a ti mismo cuando sea necesario. Pide ayuda, pide tiempo, pide lo que necesites.
A veces, date tus gustos. No te trates a ti mismo como a una mula de carga, siempre tirando mas duro. Aprende a ser bueno contigo mismo. Elige conductas que tengan consecuencias preferibles, tratarte bien es una de ellas.
Aprende a detener tu dolor, aunque eso signifique tomar decisiones difíciles. No te prives innecesariamente. A veces, date a ti mismo lo que quieras, simplemente por que quieres.
Deja de estarte explicando y justificando. Cuando cometas errores, déjalos ir. Aprendemos, crecemos y aprendemos algo más. Y a través de todo ello, nos amamos a nosotros mismos.

Trabajamos en ello y luego trabajamos más en ello. Un día nos despertaremos, nos veremos en el espejo y descubriremos que amarnos a nosotros mismos se ha hecho algo habitual. Ahora estamos viviendo con una persona que da y recibe amor, porque esa persona se ama a sí misma. El amor propio tomará las riendas y se convertirá en una fuerza directriz en nuestra vida.

«Hoy trabajaré en amarme a mí mismo. Trabajaré tan duro por amarme a mí mismo como he trabajado para no gustarme. Ayúdame a dejar ir el odio de mí mismo y las conductas que reflejan que no me gusto a mí mismo. Ayúdame a reemplazarlas con conductas que reflejan amor propio. Hoy, Dios mío, ayúdame a tenerme en alta estima. Ayúdame a saber que soy digno de ser amado y capaz de dar y recibir amor».

Mi Reflexión: La persona codependiente tiene un baja autoestima, eso lo lleva a no gustarse como es, a no aceptarse tal cual es. Esta percepción le trae serios problemas emocionales que al paso del tiempo van mermando su lado físico hasta enfermarse seriamente. Es fácil cambiar es? Nada fácil, requiere concientizarse del problema y abordarlo con ayuda profesional. (Alpha).

¿Cuál es tu percepción de ti mismo? ¿Estás dispuesto a cambiar estas creencias que te hacen daño? ¿Estás contento con ser como eres? Comparte aquí.

Reflexión del Dia: 24 de Mayo

Melody Beattie, en su Libro Ya no seas Codependiente ratifica que es necesario aprender a dejar ir todo aquello que sea poco saludable para los cambios en la vida del codependiente.La unica herramienta válida es el desapego.

Si deseas conocer mas sobre esta Autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esta vía.

Reflexiona sobre esto:

Siento que el desapego puede volverse una respuesta habitual, de la misma manera que obsesionarse, preocuparse y ser controladores se han vuelto respuestas habituales en la práctica. Podremos no hacerlo perfectamente. Sin embargo, y al ritmo que sea, podemos practicar el desapego en nuestras vidas, y creo que eso es bueno para nosotros. Espero que puedan ser capaces de desapegarse con amor de la persona o de las personas de quienes se están desapegando. Creo que es mejor hacerlo todo con una actitud de amor. Sin embargo, por una multitud de razones, no siempre podemos hacerlo así. Si no puedes desapegarte con amor, en mi opinión es preferible desapegarse con enojo que permanecer apegados. Si nos desapegamos, estamos en una mejor posición para trabajar sobre (o a través) de nuestras resentidas emociones. Si estamos apegados, probablemente no hagamos nada más que estar siempre irritados.
¿Cuándo debemos desapegarnos? Cuando no podamos dejar de pensar, de hablar acerca de o de preocuparnos por alguien o por algo; cuando nuestras emociones estén en constante ebullición; cuando sintamos que tenemos que hacer algo acerca de alguien porque ya no podemos soportar la situación ni un minuto más; cuando estamos colgando de un hilo y sentimos que tal hebra está a punto de romperse; y cuando creemos que ya no podemos seguir viviendo con el problema con el que hemos estado tratando de vivir. ¡Es tiempo de desapegarnos! Aprenderán a reconocer cuándo es aconsejable desapegarse. Una buena regla a seguir es esta: cuando más necesitas desapegarte es cuando esto parece ser lo más lejano o lo menos posible de hacer.

Mi Reflexión: El desapego no es una herramienta con resultados inmediatos. Eso debe tenerlo claro quien inicia la Terapia en CoDA. Para el codependiente dejar ir o soltar es engorroso y se le dificulta hacerlo. Hay que ejercitarse al respecto. (Alpha).

¿Estás utilizando la herramienta del desapego para soltar aquellas personas, eventos o situaciones dańinas para tu recuperación? Comparte tu experiencia acá.

Meditación 24 de Mayo … Deja que fluyan los ciclos


Melody Beattie, en su Libro El Lenguaje del Adiós reafirma que todo ser humano debe permitir que transcurra el flujo de la vida. Hay que ocuparse de crecer, sanar y vivir con tranquilidad y serenidad.

Si deseas conocer mas sobre esta autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esa vía.

Medita sobre esto:

La vida es cíclica, no estática. Nuestras relaciones se benefician cuando les permitimos que fluyan de acuerdo con sus propios ciclos naturales.
Como las altas y bajas de la marea, así son los ciclos dentro de las relaciones. Tenemos periodos de cercanía y periodos de distanciamiento. Tenemos momentos para estar juntos y momentos para separarnos y trabajar en cuestiones individuales.
Tenemos momentos de amor y alegría, y momentos de enojo. A veces, las dimensiones de las relaciones cambian cuando nosotros atravesamos por cambios. A veces, la vida nos trae nuevos amigos o a otro ser amado para que nos enseñe la siguiente lección.
Eso no significa que los viejos amigos desaparezcan para siempre, significa que hemos entrado en un nuevo ciclo. No tenemos por qué controlar el curso de nuestras relaciones, sean éstas amistades o relaciones amorosas. No tenemos que satisfacer nuestra necesidad de control imponiendo a las relaciones una forma
estática.
Déjalas fluir. Permanece abierto a los ciclos. El amor no desaparecerá. El vínculo con los amigos no se romperá. Las cosas no permanecerán igual para siempre, especialmente cuando estamos creciendo y cambiando a un ritmo tan rápido. Confía en la corriente. Cuida de ti mismo, pero permanece dispuesto a dejar ir a la gente. Aferrarse a ella la hará desaparecer.
El viejo adagio acerca del amor sigue siendo cierto: «Si está destinado a ser, será. Y si amas a alguien, déjalo ir. Si regresa, es que era tuyo».

«Hoy acepto la naturaleza cíclica de la vida y las relaciones. Lucharé por ir con la corriente. Lucharé por la armonía entre mis propias necesidades y las necesidades de la otra persona».

Mi Reflexión: Cuando somos controladores pretendemos «manipular» la vida de las personas con quienes nos relacionamos. Cuan equivocado estamos. Es imposible hacer eso. Hay un ser superior que lo controla todo desde siempre y para siempre. Debemos estar concentrados en dejar fluir las situaciones. Ocuparnos de cambiar creencias negativas que nos impiden desarrollarnos. (Alpha).

¿Estás dispuesto a cambiar creencias negativas que enlentecen tu crecimiento personal? Comenta acá.

Reflexión del Dia: 23 de Mayo

Melody Beattie, en su Libro Ya no seas Codependiente reitera que el control es una ilusión que solo ocasiona desesperación y crispación a la persona codependiente. Lo mejor es olvidar esa actitud y empezar a recuperarse.

Si deseas conocer mas sobre esta Autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esta vía.

Reflexiona sobre esto:

El control es una ilusión. No funciona. No podemos controlar el alcoholismo. No podemos controlar las conductas compulsivas de nadie: comer en exceso, una conducta sexual exagerada, la apuesta compulsiva, ni ninguna otra de sus conductas. No podemos (y no es asunto nuestro hacerlo) controlar las emociones, la mente o las elecciones de nadie. No podemos controlar el resultado de los eventos. No podemos controlar a la vida. Algunos de nosotros apenas podemos controlamos a nosotros mismos.
A fin de cuentas las personas hacen lo que quieren hacer. Se sienten como se quieren sentir (o como se están sintiendo); piensan lo que quieren pensar; hacen las cosas que creen que necesitan hacer; y cambiarán sólo cuando estén listos para cambiar. No importa si ellos no tienen la razón y nosotros sí. No importa que se estén lastimando a sí mismos. No importa que nosotros podríamos ayudarles si tan sólo nos escucharan y cooperaran con nosotros. ¡NO IMPORTA, NO IMPORTA, NO IMPORTA, NO IMPORTA!
No podemos cambiar a las personas. Cualquier intento de controlarlas es un engaño y una ilusión. Se resistirán a nuestros esfuerzos o redoblarán los suyos para probar que no podemos controlarlas. Podrán adaptarse temporalmente a nuestras demandas, pero cuando nos demos la vuelta regresarán a su estado natural. Y aún más, la gente nos castigara por obligarla a hacer algo que no quiere, o a ser como no quiere ser. Ningún control será suficiente para efectuar un cambio permanente o deseable en otra persona. A veces podremos hacer cosas que aumenten la probabilidad de que la gente quiera cambiar, pero ni aun eso podemos garantizar o controlar.
Y esa es la verdad. Es una desgracia. A veces es difícil de aceptar, especialmente si alguien a quien amas se lastima a sí mismo o a sí misma y a ti. Pero así es. La única persona a la que puedes o podrás hacer cambiar es a ti misma. La única persona que te atañe controlar eres tú misma.

Mi Reflexión: Quien crea que puede controlar a los demás y lograr hacerles cambiar sus costumbre está totalmente equivocado. Cuando intentamos mantener el control sobre los otros nos damos cuenta que es imposible lograr esto: es más, terminamos enfermándonos y dejando de lado el cuidado propio, que si es nuestra total y única responsabilidad. (Alpha).

¿Estás tratando de controlar a los demás? Cómo te has sentido haciendo esto? Comparte aquí./strong>