Reflexión del Dia: 18 de Noviembre

Melody Beattie, en su Libro «Ya no seas Codependiente» reafirma que nadie le da la felicidad a otro. Alcanzaremos ser felices cuando confiemos en nuestras capacidades y poder para lograrlo.

Si deseas conocer mas sobre esta Autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esta vía.

Reflexiona sobre esto:

Deja de buscar la felicidad en los demás, Nuestra fuente de felicidad y bienestar no está dentro de los demás, está dentro de nosotros mismos. Aprendamos a centrarnos en nosotros mismos.
Deja de centrarte y de poner tu atención en otras personas. Confórmate contigo mismo. Deja de buscar tanta aprobación y validación de parte de los demás. No necesitamos la aprobación de todos ni de nadie. Sólo necesitamos aprobarnos nosotros. Tenemos iguales fuentes de felicidad y de elección en nuestro interior que los demás. Encuentra y desarrolla tu propio suministro interno de paz, de bienestar y de autoestima. Las relaciones ayudan, pero no pueden ser nuestra fuente. Desarrolla núcleos personales de seguridad emocional dentro de ti mismo.

Mi Reflexión: El codependiente tiene una profunda necesidad de aprobación de los demás. Intenta buscar su «felicidad» en otras personas. Esto plantea que no confía en si mismo. Revertir esta creencia es difícil, pero no imposible. Cuando logra centrarse en si mismo, puede comprender que solo el puede lograr su felicidad. Responsabilizarse es la clave. (Alpha).

¿Has logrado cambiar la creencia errónea que solo a través de la aprobación de otros seras feliz? Comparte tus vivencias al respecto.

Meditación 18 de Noviembre… Somos adorables

Melody Beattie, en su Libro El Lenguaje del Adiós plantea que el codependiente puede dar y recibir amor saludable. Debe modificar la creencia errónea que tiene desde su infancia al respecto.

Si deseas conocer mas sobre esta autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esa vía.

Medita sobre esto:

Incluso si la persona más importante en tu mundo te rechaza, sigues siendo real, y todavía estás bien. (No Seas Codependiente).

¿Alguna vez te encuentras pensando: ¿cómo alguien podría amarme? Para muchos de nosotros, esta es una creencia profundamente arraigada que puede convertirse en una profecía autocumplida.
Pensar que no podemos ser amados puede sabotear nuestras relaciones con compañeros de trabajo, amigos, familiares y otros seres queridos. Esta creencia puede hacer que elijamos, o permanezcamos en relaciones que son menos de las que merecemos porque no creemos que nos merecemos algo mejor. Podemos desesperarnos y aferrarnos como si una persona en particular fuera nuestra última oportunidad de amor. Podemos ponernos a la defensiva y alejar a la gente. Podemos retirarnos o reaccionar exageradamente.
Mientras crecía, muchos de nosotros no recibimos el amor incondicional que merecíamos. Muchos de nosotros fuimos abandonados o descuidados por personas importantes en nuestra vida. Puede que hayamos llegado a la conclusión de que la razón por la que no nos amaron fue porque no nos querían. Culparnos a nosotros mismos es una reacción comprensible, pero inapropiada. Si los demás no nos pueden amar, o amarnos de manera que funcionó, no es culpa nuestra. En la recuperación, estamos aprendiendo a separarnos del comportamiento de los demás. Y estamos aprendiendo a asumir la responsabilidad de nuestra curación, independientemente de las personas que nos rodean.
Del mismo modo que podemos haber creído que no somos amados, podemos volvernos hábiles para practicar la creencia de que somos amables. Esta nueva creencia mejorará la calidad de nuestras relaciones. Mejorará nuestra relación más importante: nuestra relación con nosotros mismos. Podremos dejar que otros nos amen y se abran al amor y la amistad que merecemos.

«Hoy, Dios, ayúdame a conocer y liberar cualquier creencia contraproducente que tengo acerca de no ser digno de ser amado. Ayúdame a comenzar, hoy, a decirme a mí mismo que soy amable. Ayúdame a practicar esta creencia hasta que llegue a mi núcleo y se manifieste en mis relaciones.

Mi Reflexión: El codependiente aprende desde su infancia que no puede ni merece ser amado porque sufre violencia o abandono. Esa creencia le acompaña parte de su vida. Durante nuestra recuperacion, aceptamos que podemos ser considerados, respetados y queridos por los demás. Esa creencia errónea debe desaparecer para dar paso a una mejora de nuestra autoestima y a la convicción plena que si podemos amar y ser amados. Pidamos mucha guía a nuestro Poder Superior. (Alpha).

¿Tienes la creencia de no poder recibir amor de las personas significativas para ti? ¿Has cambiado esa creencia? Comenta tus herramientas para lograrlo.