Reflexión del Dia: 7 de Noviembre

Melody Beattie, en su Libro «Ya no seas Codependiente» reafirma que debemos confiar en mantener el control de nuestra vida, somos los únicos que podemos cambiarnos y lo lograremos recuperándonos.

Si deseas conocer mas sobre esta Autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esta vía.

Reflexiona sobre esto:

Podemos aprender a depender de nosotros mismos. Tal vez otra gente no haya estado allí cuando la hemos necesitado, pero nosotros podemos estar allí cuando nos necesitamos a nosotros mismos.
Dejemos de abandonarnos a nosotros mismos, nuestras necesidades, nuestros deseos, nuestros sentimientos, nuestras vidas, y todo lo que nos conforma. Haz el compromiso de siempre estar allí cuando te necesites tú mismo. Podemos confiar en nosotros mismos. Podemos manejar y contender con los eventos, los problemas y los sentimientos que la vida nos depara. Podemos confiar en nuestros sentimientos y en nuestros juicios. Podemos resolver nuestros problemas. Podemos, también, aprender a vivir con nuestros problemas no resueltos. Debemos confiar en la persona de la que estamos empezando a depender: «uno mismo».

Mi Reflexión: Nuestra prioridad debe ser cuidarnos, amarnos, respetarnos y confiar en nosotros mismos. Somos capaces de resolver nuestras dificultades y asumir el control de nuestra vida, solo que debemos creerlo. (Alpha).

¿Has asumido el control de tu vida? ¿Confías en tus capacidades para cambiar favorablemente tu conducta dependiente? Comenta acá tus vivencias.

Meditación 7 de Noviembre… La magia de la gratitud y la aceptación

Melody Beattie, en su Libro El Lenguaje del Adiós reitera lo efectivo de la practica de la Gratitud a Dios durante nuestra recuperación. Dejar ir la resistencia y someternos a la guía divina es el eje medular de la sanación.

Si deseas conocer más sobre esta autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esa vía.

Medita sobre esto:

La gratitud y la aceptación son dos trucos de magia disponibles para nosotros en la recuperación. No importa quiénes somos, dónde estamos o qué tenemos, el trabajo de gratitud y aceptación.
Podemos llegar a ser tan felices que nos demos cuenta de que nuestras circunstancias actuales son buenas. O dominamos nuestras circunstancias actuales y luego avanzamos hacia el siguiente conjunto de circunstancias.
Si nos quedamos estancados, miserables, sintiéndonos atrapados y sin esperanza, probemos la gratitud y la aceptación. Si hemos intentado sin éxito alterar nuestras circunstancias actuales y hemos empezado a sentir que estamos golpeando nuestra cabeza contra una pared de ladrillos, intente la gratitud y la aceptación.
Si sentimos que todo está oscuro y la noche nunca terminará, pruebe con la gratitud y la aceptación.
Si nos sentimos asustados e inseguros, prueba con gratitud y aceptación.
Si hemos intentado todo lo demás y nada parece funcionar, pruebe la gratitud y la aceptación.
Si hemos estado luchando contra algo, prueba con gratitud y aceptación.
Cuando todo lo demás falla, vuelve a lo básico.
Trabaja la gratitud y aceptación.

«Hoy, Dios, ayúdame a dejar ir mi resistencia. Ayúdame a saber que el dolor de una circunstancia dejará de doler tanto si lo acepto. Practicaré los conceptos básicos de gratitud y aceptación en mi vida y en todas mis circunstancias actuales».

Mi Reflexión: Si supiéramos el poder de la Gratitud seriamos mas agradecidos con la Divinidad por las cosas hermosas con las que somos bendecidos a diario. Cuando lo reconocemos estamos abriendo aún más las puertas a nuestra serenidad y paz interior. Practiquemos esta herramienta durante nuestro proceso de recuperación. (Alpha).

¿Practicas la Gratitud al Creador? ¿Cuáles son los resultados? Comenta aquí.

Reflexión del Dia: 6 de Noviembre

Melody Beattie, en su Libro «Ya no seas Codependiente» reafirma que el codependiente puede y debe aceptar que su tarea principal es atender su recuperación, responsabilizándose de si mismo.

Si deseas conocer mas sobre esta Autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esta vía.

Reflexiona sobre esto:

Algunos nos cansamos tanto del enorme peso —la responsabilidad total por todos los seres humanos— que podemos brincarnos los sentimientos de lástima y preocupación que acompañan a los actos de rescate y seguirnos con la ira o el enojo. Estamos enojados todo el tiempo; sentimos ira y resentimiento contra víctimas potenciales. Una persona con una necesidad o un problema provoca que sintamos la necesidad de hacer algo o nos sentiremos culpables. Después del rescate, no ocultamos nuestra hostilidad hacia este incómodo predicamento. Con frecuencia veo que esto les sucede a las personas que desempeñan profesiones de ayuda a los demás, Después de tantos años de rescatar — dando tanto y recibiendo tan poco— muchos profesionales de este tipo adoptan una actitud hostil hacia sus clientes. Pueden seguir con su trabajo y seguir “ayudando” a sus clientes, pero, según afirman algunos consejeros, abandonan por lo general su profesión sintiéndose profundamente victimados.
El cuidar como nana no ayuda, sólo provoca problemas. Cuando tomamos a la gente a nuestro cuidado y hacemos cosas que no deseamos hacer, ignoramos necesidades, deseos y sentimientos personales. Nos hacemos a un lado a nosotros mismos. En ocasiones estamos tan ocupados cuidando a los demás que dejamos nuestra vida entera en suspenso. Muchos cuidadores se sienten inquietos y abrumados; no disfrutan ninguna de sus actividades. Los cuidadores aparentamos ser muy responsables, pero no lo somos; pues no asumimos el compromiso de nuestra responsabilidad más alta: nosotros mismos.

Mi Reflexión: El codependiente rescatador compulsivo maneja sentimientos diversos: ira, resentimiento, fastidio. Si bien desea ayudar a los demás, se hastía de esta situación y vive enojado, hostil, colérico. Llegó ese momento consciente que nos llama a la reflexión: debemos responsabilizarnos de nosotros mismos. Hacerlo no es fácil, pero iniciando nuestra recuperación, podemos gradualmente lograrlo. Esa liberación nos hará sentir dicha y gozo. (Alpha).

¿Has alcanzado la madurez suficiente para aceptar que debes cuidar de ti mismo? ¿Cómo sentiste ese llamado a responsabilizarte? Comparte tus experiencias al respecto.

Meditación 6 de Noviembre… No obtendrás más de lo que puedes manejar

Melody Beattie, en su Libro El Lenguaje del Adiós plantea que estamos prestos a resolver la vida de los otros, solo que dejamos de lado resolver la nuestra. Cuando entendemos que todo problema que se presenta en nuestra vida tiene solución siempre y cuando confiemos en la guía divina.

Si deseas conocer más sobre esta autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esa vía.

Medita sobre esto:

Dios es fiel, quien no te permitirá ser tentado más allá de lo que eres capaz, pero con la tentación, también hará un camino de escape, para que puedas soportarlo. (La Biblia).

«Estoy cuidando a mi compañero de cuarto y preocupándome por tres de mis clientes. La gente siempre dice que nunca obtendrás más de lo que puedes manejar. Pero eso no es cierto si estás tratando de manejar las cosas de otras personas. Eso puede ser demasiado», dijo un terapeuta y amigo mío.
La mayoría de nosotros hemos escuchado a lo largo de nuestras vidas que nunca obtendremos más de lo que podemos manejar o soportar. La carga no será demasiado pesada. Si se nos da, podemos estar a la altura de la ocasión y cumplir la tarea. No dijeron que la carga no sería pesada. No dijeron que la tarea podría hacerse fácilmente. Y no dijeron que tendríamos la gracia y la fuerza para soportar la carga de cargas que no eran las nuestras.
A veces, se siente como demasiado. Sé como se siente.
Estás a la altura de la tarea, sea lo que sea, se sienta como si lo fueras o no.

«Dios, por favor dame todo lo que necesito hoy, incluyendo suficiente alegría».

Mi Reflexión: El codependiente maneja su vida con creencias erróneas. Una de estas es creer que puede hacer sus propias tareas y encargarse de los problemas de los demás. Si nos concentramos en actuar y solventar nuestras tareas de manera prioritaria, con la ayuda del Poder Superior las cargas se alivian y lo lograremos. Concentrémonos que si se nos da una tarea Dios nos dará las herramientas para resolverla. (Alpha).

¿Eres de los que asume varias tareas a la vez? ¿Has solicitado ayuda a tu Poder Superior para resolver tus propias tareas? Comparte tus vivencias aquí.

Reflexión del Dia: 5 de Noviembre

Melody Beattie, en su Libro «Ya no seas Codependiente» reafirma que el codependiente puede y debe hacerse responsable de resolver sus problemas. El puede confiar en si mismo.

Si deseas conocer más sobre esta Autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esta vía.

Reflexiona sobre esto:

Podemos aprender a depender de nosotros mismos. Tal vez otra gente no haya estado allí cuando la hemos necesitado, pero nosotros podemos estar allí cuando nos necesitamos a nosotros mismos.
Dejemos de abandonarnos a nosotros mismos, nuestras necesidades, nuestros deseos, nuestros sentimientos, nuestras vidas, y todo lo que nos conforma. Haz el compromiso de siempre estar allí cuando te necesites tú mismo. Podemos confiar en nosotros mismos. Podemos manejar y contender con los eventos, los problemas y los sentimientos que la vida nos depara. Podemos confiar en nuestros sentimientos y en nuestros juicios. Podemos resolver nuestros problemas. Podemos, también, aprender a vivir con nuestros problemas no resueltos. Debemos confiar en la persona de la que estamos empezando a depender: uno mismo.

Mi Reflexión: El propósito mayor en la vida del codependiente es responsabilizarse de su vida, confiar en si mismo, en sus potencialidades para hacerle frente a las situaciones que enfrenta en su vida. (Alpha).

¿Has aprendido a responsabilizarte de tu vida? Comenta tus vivencias al respecto.

Meditación 5 de Noviembre … Trae cualquier solicitud que tengas a Dios.

Melody Beattie, en su Libro El Lenguaje del Adiós ratifica que nuestro Poder Superior nos ayuda a resolver nuestras pruebas por muy difíciles que estas sean.

Si deseas conocer mas sobre esta autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esa vía.

Medita sobre esto:

Ninguna solicitud es demasiado grande; no demasiado pequeño o insignificante.
Cuán a menudo limitamos a Dios al no llevar a Dios todo lo que queremos y necesitamos.
¿Necesitamos ayuda para obtener nuestro equilibrio? Pasando el día?
¿Necesitamos ayuda en una relación particular? ¿Con un defecto de carácter particular?
¿Necesitamos ayuda para progresar en una tarea en particular que nos desafía? ¿Necesitamos ayuda con un sentimiento? ¿Queremos cambiar una creencia autodestructiva que nos ha desafiado? ¿Necesitamos información, una idea? ¿Apoyo? ¿Un amigo?
¿Hay algo en el universo de Dios que realmente nos traiga alegría?
Podemos pedirlo. Podemos pedirle a Dios lo que queramos. Pon la solicitud en las manos de Dios, confiando en que ha sido escuchada, luego déjala ir. ¡Deja la decisión a Dios!
Pedir lo que queremos y necesitamos es cuidarnos a nosotros mismos. Confía en que el Poder Superior a quien hemos entregado nuestra vida y realmente se preocupa por nosotros y por lo que queremos y necesitamos.

«Hoy, le pediré a mi Poder Superior lo que quiero y necesito. No exigiré, preguntaré. Entonces lo soltaré.

Mi Reflexión: Los codependientes enfrentamos sentimientos encontrados durante muchas fases de nuestra vida. Por muy difícil que sean nuestras cargas, todo debemos presentarlas ante Dios, el es nuestro proveedor. No va a fallarnos. Acudirá en nuestra ayuda. (Alpha).

¿Acudes ante el poder superior para obtener ayuda espiritual? Comenta tus vivencias?

Reflexión del Dia: 4 de Noviembre

Melody Beattie, en su Libro «Ya no seas Codependiente» plantea que no podemos controlar a nadie. Eso le corresponde a cada persona. A nosotros mismos si podemos cambiarnos, modificando aquellas conductas negativas e insanas que hemos venido asumiendo por años.

Si deseas conocer mas sobre esta Autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esta vía.

Reflexiona sobre esto:

El control es una ilusión. No funciona. No podemos controlar el alcoholismo. No podemos controlar las conductas compulsivas de nadie: comer en exceso, una conducta sexual exagerada, la apuesta compulsiva, ni ninguna otra de sus conductas. No podemos (y no es asunto nuestro hacerlo) controlar las emociones, la mente o las elecciones de nadie. No podemos controlar el resultado de los eventos. No podemos controlar a la vida. Algunos de nosotros apenas podemos controlamos a nosotros mismos.
A fin de cuentas las personas hacen lo que quieren hacer. Se sienten como se quieren sentir (o como se están sintiendo); piensan lo que quieren pensar; hacen las cosas que creen que necesitan hacer; y cambiarán sólo cuando estén listos para cambiar. No importa si ellos no tienen la razón y nosotros sí. No importa que se estén lastimando a sí mismos. No importa que nosotros podríamos ayudarles si tan sólo nos escucharan y cooperaran con nosotros. NO IMPORTA, NO IMPORTA, NO IMPORTA, NO IMPORTA.
No podemos cambiar a las personas. Cualquier intento de controlarlas es un engaño y una ilusión. Se resistirán a nuestros esfuerzos o redoblarán los suyos para probar que no podemos controlarlas. Podrán adaptarse temporalmente a nuestras demandas, pero cuando nos demos la vuelta regresarán a su estado natural. Y aún más, la gente nos castigara por obligarla a hacer algo que no quiere, o a ser como no quiere ser,
Ningún control será suficiente para efectuar un cambio permanente o deseable en otra persona. A veces podremos hacer cosas que aumenten la probabilidad de que la gente quiera cambiar, pero ni aun eso podemos garantizar o controlar.
Y esa es la verdad. Es una desgracia. A veces es difícil de aceptar, especialmente si alguien a quien amas se lastima a sí mismo o a sí misma y a ti. Pero así es. La única persona a la que puedes o podrás hacer cambiar es a ti misma. La única persona que te atañe controlar eres tú misma.

Mi Reflexión: Los codependientes somos controladores, cuidadores y tenemos la errónea creencia que somos capaces de «cambiar a las personas». Llegó el momento de comprender que el control es una «ilusión», que solo cada quien puede modificar sus comportamientos. No perdamos más nuestro tiempo en asumir tareas que no nos corresponden. Asumamos el compromiso de «cambiarnos nosotros mismos», haciéndonos más responsables de nuestro cuidado, cambiando aquello que debemos cambiar. Eso si esta bajo nuestro control personal. (Alpha).

¿Vives una situación donde controlas a otros? Comenta tus vivencias aquí.

Meditación 4 de Noviembre… Miedos financieros

Melody Beattie, en su Libro El Lenguaje del Adiós reafirma que podemos tener serios problemas financieros en nuestra vida, pero asi mismo confiar que nuestro Poder Superior sabrá guiarnos usar eficazmente y eficientemente nuestro dinero.

Si deseas conocer mas sobre esta autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esa vía.

Medita sobre esto:

Me senté en el auto, mirando el cartel en la puerta de la oficina de la estantería de alimentos: «Cerrado hasta el viernes». Era miércoles. Tuve dos hijos hambrientos y yo mismo; No tengo dinero.

Apoyé la cabeza en el volante. No pude soportarlo más.
Había sido tan fuerte, tan valiente, tan confiada durante tanto tiempo. Yo era una madre soltera con dos hijos, recientemente divorciada. Había trabajado tan valientemente para estar agradecida por lo que tenía, mientras establecía objetivos financieros y creía que merecía lo mejor.
Había aguantado tanta pobreza, tanta privación. Diariamente, trabajé el Undécimo Paso. Trabajé muy duro para orar por el conocimiento de la voluntad de Dios solo para mí y el poder para llevarla a cabo. Creía que estaba haciendo lo que tenía que hacer en mi vida. Yo no estaba jugando. Estaba haciendo mi mejor esfuerzo, trabajando duro.
Y simplemente no había suficiente dinero. La vida había sido una lucha de muchas maneras, pero la lucha financiera parecía interminable.
El dinero no lo es todo, pero se necesita dinero para resolver ciertos problemas. Estaba harto de «dejar ir» y «dejar ir» y «dejar ir». Estaba harto de «actuar como si» tenía suficiente dinero. Estaba cansada de tener que trabajar tan duro diariamente para dejar ir el dolor y el miedo de no tener suficiente. Estaba cansada de trabajar tan duro para ser feliz sin tener suficiente. En realidad, la mayor parte del tiempo estaba feliz. Había encontrado mi alma en la pobreza. Pero ahora que tenía mi alma y mi ser, también quería algo de dinero.
Mientras me sentaba en el auto tratando de recuperarme, escuché a Dios hablarme en esa voz silenciosa que susurra suavemente a nuestras almas.
«Nunca más tienes que preocuparte por el dinero. No a menos que quieras. Te dije que cuidaría de ti. Y lo haré».
Genial, pensé. Muchas gracias. Te creo. Confío en ti. Pero mire a mi alrededor. No tengo dinero. No tengo comida Y la estantería de alimentos está cerrada. Me has decepcionado
Nuevamente escuché su voz en mi alma: “No tienes que preocuparte por el dinero otra vez. No tienes que tener miedo. Prometí satisfacer todas tus necesidades».
Fui a casa, llamé a un amigo y pedí dinero prestado. Odiaba los préstamos, pero no tenía otra opción. Mi avería en el auto fue un lanzamiento, pero no resolvió nada, ese día. No había cheque en el buzón.
Pero tenía comida para el día. Y para el día siguiente. Y la siguiente semana y mes. A los seis meses, mi ingreso se duplicó. En nueve meses, se triplicó. Desde ese día, he tenido momentos difíciles, pero nunca he tenido que pasar por alto, no más de un momento en el tiempo.
Ahora, tengo suficiente. A veces sigo preocupándome por el dinero porque eso parece ser habitual. Pero ahora sé que no tengo que hacerlo, y sé que nunca lo hice.

«Dios, ayúdame a trabajar duro en lo que creo que es correcto para mí en mi vida de hoy, y confiaré en Ti por el resto. Ayúdame a dejar de lado mis miedos sobre el dinero. Ayúdame a pasar esa área a ti, Dios. Quita los bloques y barreras en mi vida al éxito financiero».

Mi Reflexión: Los codependientes solemos usar compulsivamente nuestro dinero, dándole usos indebidos. Cuando estamos ante graves situaciones financieras nos corresponda asumir un control estricto de los gastos. Es allí que nos invade el miedo ante la escasez de lo esencial. Si asumimos con claridad que la Divinidad es nuestro máximo Proveedor, estaremos confiados. Nuestra responsabilidad es controlar los gastos y usar racionalmente las finanzas. (Alpha).

¿Controlas tus finanzas con sentido de racionalidad? ¿Confías en la divinidad para proveerte? Comenta al respecto.

Reflexión del Dia: 3 de Noviembre

Melody Beattie, en su Libro «Ya no seas Codependiente» plantea que los problemas de autoestima del codependiente lo alejan de darse un trato solidario y amoroso a si mismo. También reitera que la Terapia en Doce Pasos de CoDA es una oportunidad para revertir ese escenario y responsabilizarse de su cuidado.

Si deseas conocer mas sobre esta Autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esta vía.

Reflexiona sobre esto:

Necesitamos ser buenos con nosotros mismos. Necesitamos ser compasivos y amables con nosotros mismos. ¿Cómo podemos esperar cuidarnos adecuadamente si no nos gustamos o nos odiamos?
Necesitamos rehusarnos a entrar en una relación antagónica al interior de nosotros. Dejar de culpamos y de ser víctimas, y dar los pasos necesarios para apartar a la víctima. Suprime los sentimientos de culpa. La culpa y la vergüenza no sirven a ningún propósito a largo plazo. Sólo son útiles para indicar momentáneamente cuándo podemos haber violado nuestros propios códigos morales. La culpa y la vergüenza no son útiles como un modo de vida. Suprime los “debería de”. Volvámonos conscientes de cuándo nos estamos castigando y torturando y hagamos un esfuerzo concertado para decirnos mensajes positivos a nosotros mismos. Si debíamos de estar haciendo algo, hagámoslo. Si nos estamos auto torturando, dejemos de hacerlo. Se hace cada vez más fácil. Podemos reírnos de nosotros mismos, decirnos que no nos veremos entrampados, darnos un abrazo a nosotros mismos, y luego vivir como elijamos hacerlo. Si tenernos sentimientos de culpa verdaderos, manejémoslos. Dios nos perdonará. Él sabe que hicimos las cosas lo mejor que pudimos, aunque las hayamos hecho de lo peor. No tenernos que castigarnos sintiéndonos culpables para probarle a Dios o a nadie más cuánto nos importa. ¡Necesitamos perdonarnos!, hagamos los pasos cuarto y quinto; habla con un sacerdote; habla con Dios; enmiéndate; y luego da el asunto por terminado.

Mi Reflexión: El codependiente tiene problemas de autoestima, por ello desconfía de si mismo, no se acepta tal cual es, invierte tiempo en ayudar a otros relegándose a un segundo plano. ¡No asume responsabilidades de cuidarse! Ese escenario, a medida que avanza en la recuperación, se va modificando hasta lograr que asuma un trato solidario con el mismo, y decida perdonarse, aceptarse y cuidarse. Trabajar los Doce Pasos es liberador y sanador. (Alpha).

¿Asumes un trato solidario y amoroso contigo mismo? ¿Estás trabajando los Doce Pasos de CoDA? Comparte tu experiencia personal.

Meditación 3 de Noviembre… Estar preparado

Melody Beattie, en su Libro El Lenguaje del Adiósplantea que la vida nos ubica ante dificultades que debemos asumir como lecciones para aprender. Nuestro Poder Superior nos guiara para resolver tales eventos y salir airosos de esas situaciones difíciles.

Si deseas conocer mas sobre esta autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esa vía.

Medita sobre esto:

¿Alguna vez tuvo un maestro en la escuela que advirtió a principios de año que le daría exámenes sin previo aviso, así que prepárese? Puede que no nos haya gustado, pero apreciamos que nos avisen. Sabíamos en esa clase que necesitábamos hacer nuestra tarea de manera oportuna si queríamos una buena calificación. Mantuvimos nuestra conciencia. Sabíamos que no podíamos pasar.Cuando llegó esa prueba, estábamos preparados para ello o, al menos, conscientes. Nos habían advertido. Sabíamos que la prueba venía.

Cuando decidí dejar de consumir alcohol y drogas y vivir una vida de abstinencia y recuperación, me examinaron muchas veces. La gente pone drogas y alcohol en mi mano. Una vez, en los primeros meses, poco después de mi decisión, fallé la prueba y me sentí muy mal. Entonces aprendí esa importante lección, la vida desafiaría mi decisión de vez en cuando. Tenía que estar preparado no solo para tomar la decisión de estar sobrio, sino para apoyar esa decisión cada día.
Cuando decidí convertirme en escritor, las cosas avanzaron bien durante los primeros años, luego comencé a golpear algunas paredes. Hice un hechizo seco. No salieron palabras. Los resultados no fueron como los había planeado. Era hora de decidir si quería respaldar mi decisión o retirarme.
Nos darán pruebas, sin previo aviso, en casi todas las decisiones que tomemos y los límites que establezcamos. Cada vez que decimos que puedo, seremos probados. Y basándose en la experiencia personal, la prueba nunca es una que hubiéramos elegido. A menudo es feo, incómodo y nos golpea en nuestro punto más débil.
No se sienta victimizado o torturado cuando llegue su prueba. Está preparado. Deja que te enseñe más sobre ti mismo, lo que quieres y lo mal que lo quieres. Úsalo como resistencia, el tipo contra el que podemos presionar para aclarar quiénes somos y qué queremos. A veces realmente no queremos; lo que pensamos que hicimos. Otras veces lo hacemos. Ya no estamos en la escuela, al menos no en la escuela primaria. La prueba no es para el beneficio del maestro. Es para nuestro beneficio, para enseñarnos cuánto hemos aprendido.
No te preocupes. Me han dicho que nunca nos darán una prueba que no podamos aprobar.
Entonces, alístate. Has sido advertido.
Estemos atentos.
La prueba podría llegar en cualquier momento.

«Dios, ayúdame a dejar de lado mi resistencia a las pequeñas pruebas que la vida me da. En su lugar, ayúdame a usar estas pruebas como una oportunidad para conocerme mejor a mí mismo. Ayúdame a hacer mi mejor esfuerzo».

Mi Reflexión: En la vida pasamos momentos difíciles que son pruebas que debemos asumir como vivencias que nos ayudan a crecer y probar nuestras capacidades humanas y espirituales para afrontarlas y resolverlas, siempre con ayuda del Poder Superior. Durante la codependencia enfrentamos serias dificultades que asumiremos siempre y cuando saquemos provecho de lo que Dios quiere enseñarnos de esos eventos. Confiar en Dios y en nosotros mismos son la clave para solventarlas. ¡Estemos preparados para esto! (Alpha).

¿Has enfrentado situaciones que asumes como lecciones de vida? Comparte tus vivencias al respecto.