Reflexión del Dia: 8 de Enero

564074_388634351208663_720772432_n

No tenemos que tomar las cosas tan a pecho (a nosotros mismos, a los eventos y a las otras personas). Sacamos las cosas fuera de toda proporción —nuestros sentimientos, pensamientos, acciones y errores—. Hacemos lo mismo con los sentimientos, pensamientos y acciones de otras personas. Nos decimos a nosotros mismos que las cosas son temibles, terribles, una tragedia y el fin del mundo. Muchas cosas pueden ser tristes, muy malas o desagradables, pero lo único que es el fin del mundo es el fin del mundo. Los sentimientos son importantes, pero son sólo sentimientos. Los pensamientos son importantes, pero son tan sólo pensamientos y todos pensamos en muchas cosas diferentes, y nuestros pensamientos están sujetos a cambio. Lo que hacemos y decimos es importante, lo que otros dicen y hacen es importante, pero el mundo no pende de ninguna frase o acción en particular. Y si es particularmente importante decir o hacer algo, no nos preocupemos: sucederá. Aligérate. Date a ti mismo y a los demás espacio para moverse, para hablar, para ser lo que somos: humanos. Dale oportunidad a la vida para que las cosas se den solas. Date a ti mismo oportunidad para disfrutarlo.

(Melody Beattie de su Libro Ya No Seas Codependiente).
desapego de chopra1

Reflexión del Dia: 6 de Enero

1444165218-007

Los sentimientos pueden no ser siempre un barril de felicidad, pero reprimirlos puede ser verdaderamente desastroso. Así que, ¿cuál es la solución? ¿Qué hacemos con estos incómodos sentimientos que parecen ser tanto una carga como un deleite?
Los sentimos. Podemos sentir. Está bien sentir nuestros sentimientos, Está bien que tengamos sentimientos, todos los que hay. Incluso está bien que los hombres sientan. No está mal que haya sentimientos. Estos no son inadecuados. No necesitamos sentirnos culpables acerca de tos sentimientos. Los sentimientos no son hechos; sentir una furia homicida es enteramente distinto que cometer suicidio. Los sentimientos no se deben juzgar como buenos o malos. Los sentimientos son energía emocional; no son rasgos de personalidad.
Nuestros sentimientos no tienen por qué controlamos. No tenemos que gritar y golpear sólo porque estemos enojados. No tenemos que estar acostados en la cama todo el día sólo porque estemos deprimidos.
El hecho de que estemos asustados no significa que no podamos solicitar un empleo. De ninguna manera implico o sugiero dejar que nuestras emociones controlen nuestras conductas. De hecho, sostengo lo contrario: si no sentimos nuestros sentimientos y los manejamos en forma responsable, estos nos controlarán. Si estamos manejando nuestras emociones en forma responsable, las sometemos a nuestro intelecto, a nuestra razón, a nuestro código moral y a nuestro código ético de conducta.

(Melody Beattie de su Libro Ya No Seas Codependiente).
desapego de chopra1

Reflexión del Dia: 4 de Enero

mujer-con-rosa-en-las-manos

No somos las personas que “hacemos que sucedan las cosas.” Los codependientes son aquellas personas que consistentemente, y con gran cantidad de esfuerzo y energía, tratan de forzar que sucedan las cosas.
Controlamos en nombre del amor.
Lo hacemos porque “sólo estamos tratando de ayudar”.
Lo hacemos porque nosotros sí sabemos cómo deben hacerse las cosas y cómo deben comportarse
las personas.
Lo hacemos porque nosotros estamos bien y ellos están mal.
Controlamos porque nos da miedo no hacerlo.
Lo hacemos porque no sabemos qué otra cosa hacer.
Lo hacemos para dejar de sufrir.
Controlamos porque pensamos que tenemos que hacerlo.
Controlamos porque no pensamos.
Controlamos porque solamente podemos pensar en controlar.

(Melody Beattie de su Libro Ya No Seas Codependiente).
desapego de chopra1

Reflexión del Dia: 1 de Enero

198444_211447878869259_100000121464568_918571_1515717_n

El desapego se basa en las premisas de que cada persona es responsable de sí misma, en que no podemos resolver problemas que no nos corresponde solucionar, y que preocuparnos no sirve de nada.
Adoptamos una política de no meter las manos en las responsabilidades de otras personas y en vez de ello, de atender a las nuestras. Si la gente se ha fabricado desastres a sí misma, le permitimos enfrentar las consecuencias. Le permitimos a la gente ser como es en realidad. Le damos la libertad de ser responsable y de madurar. Y nos damos nosotros mismos la misma libertad. Vivimos nuestra propia vida al máximo de nuestra capacidad. Luchamos para discernir qué es lo que podemos cambiar y qué es lo que no podemos cambiar. Luego dejamos de tratar de cambiar aquello que no podemos. Hacemos lo que podemos para resolver un problema, y luego dejamos de hacernos la vida de cuadritos. Si no podemos solucionar un problema después de intentarlo seriamente, aprendemos a vivir con ese problema o a pesar de él. Y tratamos de vivir felices, concentrándonos heroicamente en lo que de bueno tiene la vida hoy, y sintiéndonos agradecidos por ello. Aprendemos la mágica lección de que sacarle el máximo provecho a lo que tenemos multiplica lo bueno de nuestras vidas.

(Melody Beattie de su Libro Ya No Seas Codependiente).
frases-sobre-el-desapego-emocional

Reflexión del Dia: 29 de Diciembre

564074_388634351208663_720772432_n

Sé que tienes problemas. Entiendo que muchos de ustedes están profundamente apenados y preocupados por ciertas personas en sus vidas. Muchas de ellas pueden estarse destruyendo a sí mismas, a ustedes, a sus familias, frente a sus propios ojos. Pero yo no puedo hacer nada para controlar a esas personas; y quizá ustedes tampoco pueden hacer nada. Si pudieran, probablemente a estas alturas ya lo hubieran hecho.
Desapéguense. Desapéguense con amor o desapéguense con enojo, pero luchen por desapegarse. Sé que es difícil, pero se vuelve más fácil con la práctica. Si no pueden hacerlo completamente, traten de “llevarla con calma.” ¡Relájense! Siéntense Ahora, respiren hondo. !Concéntrense en ustedes!

(Melody Beattie de su Libro Ya No Seas Codependiente).
desapego de chopra1

Reflexión del Dia: 21 de Diciembre

564074_388634351208663_720772432_n

Necesitamos rehusarnos a entrar en una relación antagónica al interior de nosotros. Dejar de culpamos y de ser víctimas, y dar los pasos necesarios para apartar a la víctima. Suprime los sentimientos de culpa. La culpa y la vergüenza no sirven a ningún propósito a largo plazo. Sólo son útiles para indicar momentáneamente cuándo podemos haber violado nuestros propios códigos morales. La culpa y la vergüenza no son útiles como un modo de vida. Suprime los “debería de”. Volvámonos conscientes de cuándo nos estamos castigando y torturando y hagamos un esfuerzo concertado para decirnos mensajes positivos a nosotros mismos. Si debíamos de estar haciendo algo, hagámoslo. Si nos estamos autotorturando, dejemos de hacerlo. Se hace cada vez más fácil. Podemos reírnos de nosotros mismos, decirnos que no nos veremos entrampados, darnos un abrazo a nosotros mismos, y luego vivir como elijamos hacerlo. Si tenernos sentimientos de culpa verdaderos, manejémoslos. Dios nos perdonará. Él sabe que hicimos las cosas lo mejor que pudimos, aunque las hayamos hecho de lo peor. No tenernos que castigarnos sintiéndonos culpables para probarle a Dios o a nadie más cuánto nos importa. Necesitamos perdonarnos, hagamos los pasos cuarto y quinto; habla con un sacerdote; habla con Dios; enmiéndate; y luego da el asunto por terminado.

(Melody Beattie de su Libro Ya No Seas Codependiente).
511eb4518f781_576_!

Reflexión del Dia: 19 de Diciembre

159-134_1

No existe un modo mágico, fácil y repentino de volverse no-dependiente.
La seguridad emocional y nuestro nivel actual de inseguridad son factores importantes que debemos tener en mente al tomar nuestras decisiones. A veces nos volvemos económica y emocionalmente dependientes de una persona, y entonces nos enfrentamos a dos verdaderas preocupaciones —dos preocupaciones que pueden o no tener conexión entre sí—.
Ninguno de estos factores se debe tomar a la ligera; cada uno de ellos demanda nuestra consideración. Mis palabras o nuestras esperanzas no disminuirán la realidad de estos hechos. Si somos dependientes económica o emocionalmente, ese es un hecho, y los hechos deben aceptarse y tomarse en cuenta. Pero creo que podemos luchar por volvernos menos dependientes. Y sé que podemos volvernos no-dependientes si queremos.
He aquí algunas ideas que pueden ayudar:

1.Terminar con los asuntos de nuestra niñez de la mejor manera que podamos. Apenarnos profundamente por ellos. Verlos luego en perspectiva. Averiguar cómo los acontecimientos de nuestra niñez afectan lo que estamos haciendo ahora.
2. Consiente y protege a esa criatura asustada, vulnerable y necesitada que hay en nuestro interior. Este niño interno puede no llegar a desaparecer completamente nunca, no importa que tan autosuficientes nos volvamos. El estrés puede hacer que el niño grite. Sin motivo alguno, el niño puede aflorar y demandar atención cuando menos lo esperamos.
3. Deja de buscar la felicidad en los demás, Nuestra fuente de felicidad y bienestar no está dentro de los demás, está dentro de nosotros mismos. Aprendamos a centrarnos en nosotros mismos.
4. Podemos aprender a depender de nosotros mismos. Tal vez otra gente no haya estado allí cuando la hemos necesitado, pero nosotros podemos estar allí cuando nos necesitamos a nosotros mismos.
5. También podemos depender de Dios. Él está con nosotros y a Él le importamos. Nuestras creencias espirituales nos pueden dar una fuerte sensación de seguridad emocional.
6. Esfuércense por la no-dependencia. Comiencen a examinar las maneras en las que somos dependiente emocional y económicamente, de la gente que nos rodea.

Tú también puedes atravesar situaciones oscuras. Puedes cuidar de ti mismo y confiar en ti mismo. ¡Confía en Dios. Ve tan lejos como puedas ver, y cuando llegues ahí, serás capaz de ver más lejos. Se le llama Día por día!
(Melody Beattie de su Libro Ya No Seas Codependiente).
564074_388634351208663_720772432_n

Reflexión del Dia: 18 de Diciembre

8726296-Carefree-adorable-girl-with-arms-out-in-field-summer-freedom-andjoy-concept--Stock-Photo

Por una multitud de razones hemos perdido la fe en nuestra capacidad para pensar y razonar las cosas. Creer en mentiras, mentirnos a nosotros mismos (negación), el caos, el estrés, la baja autoestima y un estómago lleno de emociones reprimidas puede nublar nuestra capacidad para pensar. Nos confundimos. Pero no quiere decir que no podamos pensar.
Reaccionar en exceso puede deteriorar nuestro funcionamiento mental. La capacidad de decisión se ve obstaculizada al preocuparnos de lo que pensarán otras personas; al forzarnos a nosotros mismos a ser perfectos, y al decirnos que nos demos prisa. Creernos equivocadamente que no podemos hacer la elección “incorrecta”, que nunca tendremos otra oportunidad, y que el mundo entero espera esta decisión en particular. No tenemos que autofastidiarnos de esta manera.
Odiarnos, negarnos la posibilidad de tomar decisiones correctas, y luego echarnos encima una retahila de “debería de” cada vez que tratamos de tomar decisiones, tampoco ayuda a nuestro proceso de pensamiento.
No escuchar a nuestras necesidades y deseos, y decirnos que lo que deseamos está mal, nos esconde la información que necesitarnos para hacer buenas elecciones. Buscar una segunda opinión y los “qué tal si” tampoco ayudan. Estamos aprendiendo a amarnos, a confiar y a escucharnos a nosotros mismos.
Quizá hemos usado nuestras mentes en forma inadecuada, preocupándonos y obsesionándonos, y nuestras mentes están cansadas, hemos abusado de ellas y están llenas de pensamientos de ansiedad. También estarnos aprendiendo a detener estos patrones. Tal vez perdimos la fe en nuestra capacidad para pensar porque la gente nos ha dicho que no podemos pensar ni tomar decisiones correctas. Nuestros padres pueden haber provocado esto en forma directa o indirecta cuando éramos niños. Pueden habernos dicho que éramos tontos. O puede ser que hayan tomado todas las decisiones por nosotros. Quizá criticaron todas las elecciones que hicimos. O pueden habernos confundido negándonos o rehusándose a reconocer nuestra capacidad para pensar cuando señalábamos problemas en casa.
Podemos pensar. Nuestras mentes funcionan bien. Podemos desenmarañar las cosas. Podemos tomar decisiones. Podemos decidir qué queremos y qué necesitamos hacer y cuándo es tiempo de hacerlo. Y podemos tomar decisiones que incrementen nuestra autoestima.
¡Hasta tenemos derecho a tener nuestras opiniones! Y sí tenemos algunas. Podemos pensar apropiada y racionalmente. Incluso tenemos el poder para evaluarnos a nosotros mismos y a nuestros pensamientos, de modo que podamos corregir nuestra manera de pensar cuando se vuelve desastrosa o irracional.
Podemos evaluar nuestra conducta. Podemos tomar decisiones acerca de lo que queremos y necesitamos. Podemos averiguar en qué consisten nuestros problemas y qué podemos hacer para solucionarlos. Podemos tomar decisiones pequeñas y grandes. Podemos sentirnos frustrados cuando tratamos de tomar decisiones o de resolver problemas, pero eso es normal. A veces necesitamos llegar a frustrarnos para cambiar radicalmente de modo de pensar. Es parte del proceso.

Recuerden: no tienen por qué ser perfectas las decisiones tomadas. No tenemos que ser perfectos. Ni siquiera tenemos que ser casi perfectos. Podemos ser simplemente quienes somos. Podemos equivocarnos en nuestras elecciones. No somos tan frágiles que no podamos manejar el hecho de haber cometido un error. ¡No es para tanto! Es parte del vivir. Podemos aprender de nuestros errores, o sencillamente podemos tomar otra decisión.

(Melody Beattie de su Libro Ya No Seas Codependiente).
cropped-despertar-espiritual-1.jpg

Frase del Dia: 9 de Diciembre

tumblr_kxykomQfGi1qac6sjo1_500

Las pérdidas que muchos codependientes deben encarar y aceptar a diario son enormes y continuas. No son los problemas y las pérdidas comunes que la mayoría de la gente encuentra en una vida normal. Estas son pérdidas y problemas provocados por personas que son importantes para nosotros. Aunque los problemas son resultado directo de una enfermedad, condición o trastorno compulsivo pueden parecer actos deliberados y maliciosos. Estamos sufriendo a manos de alguien que amábamos y en quien confiábamos.
Estamos continuamente sin equilibrio, en lucha por aceptar cambios y problemas. No sabemos qué esperar, ni sabemos cuándo esperarlo. Nuestras circunstancias actuales están siempre en un estado de flujo.
Podemos experimentar pérdidas o cambio en todas las áreas. Nos sentimos enloquecer; nuestros hijos están irritados; nuestro cónyuge o amante actúa absurdamente; hemos perdido el coche; nadie ha trabajado durante semanas enteras; la casa es un desastre; y el dinero se ha desvanecido. Las pérdidas pueden darse en alud, todas a un tiempo, o pueden ocurrir gradualmente. Las cosas pueden entonces estabilizarse momentáneamente, hasta que una vez más perdemos el coche, el empleo, el dinero, nuestro hogar y las relaciones con gente que es importante para nosotros. Nos atrevimos a tener esperanza, tan sólo para ver hechos añicos nuestros sueños otra vez. No importa que nuestras esperanzas se basaran en falso sobre nuestros buenos deseos de que el problema desaparecería mágicamente. Esperanzas maltrechas son esperanzas maltrechas. Desilusiones son desilusiones. Los sueños perdidos son sueños muertos, y conllevan dolor.

(Melody Beattie de su Libro Ya No Seas Codependiente).
separador7

Frase del Dia: 29 de Noviembre

desatiendo

Luego de que nos hemos desapegado y comenzamos a ocuparnos de nuestros propios asuntos y nuestras vidas finalmente se serenan, algunos codependientes podemos extrañar en ocasiones un poco del antiguo alboroto. A veces podemos encontrar que nuestro nuevo estilo de vida es aburrido. Simplemente estamos acostumbrados a tantos disturbios y excitaciones que la paz al principio nos parece blanda. Nos acostumbraremos a ella. A medida que desarrollemos nuestras vidas, que fijemos nuestras metas, y encontremos cosas por hacer que nos interesen, la paz nos parecerá cómoda, más cómoda que el caos. Y ya no extrañaremos más el estado de desdicha emotiva.
Debemos aprender a reconocer cuándo estamos buscando nos esa “desdicha emotiva”. Comprender que no hay por qué causarnos problemas ni involucrarnos con los problemas de los demás. Encontrar maneras creativas de llenar nuestra necesidad del drama. Conseguir empleos que disfrutemos. Pero mantener fuera de nuestras vidas la desdicha emotiva.

(Melody Beattie de su Libro Ya No Seas Codependiente).
dejar-ir-el-pasado-845x321