Reflexión del Dia: 24 de Enero

Melody Beattie, en su Libro Ya no seas Codependiente plantea que la codependencia obliga a quien la padece a a sumir irresponsablemente su vida, dedicándose a intervenir en la vida de los otros, manipulando y controlandola.

Si deseas conocer mas sobre esta Autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esta vía.

Reflexiona sobre esto:

Hemos hecho cosas incorrectas por los motivos correctos. ¿Podremos cambiar? ¿Podremos aprender conductas más sanas? No sé si se pueda enseñar la salud mental, emocional y espiritual, pero podemos ser inspirados y alentados. Podemos aprender a hacer las cosas de otra manera. Podemos cambiar. Creo que la mayoría de la gente quiere estar sana y vivir sus vidas lo mejor posible. Pero muchos de nosotros no sabemos que está bien hacer las cosas de otra manera.
Muchos de nosotros ni siquiera sabemos qué es lo que hemos estado haciendo que no ha funcionado. La mayoría de nosotros hemos estado tan ocupados respondiendo a los problemas de otras personas que no hemos tenido tiempo para identificar y mucho menos para ocuparnos de nuestros propios problemas.

Reflexión: Para la persona codependiente la vida ha sido un torbellino en el cual ha transcurrido ocupándose de la vida de las personas que le rodean, sin llegar a detenerse para pensar en cómo ocuparse de su propia vida. Hemos cometido errores, por ello sentimos culpa y vergüenza. No sabemos qué es lo correcto o incorrecto. No tenemos idea de lo que podemos y debemos hacer por nuestra salud emocional. Llegó el momento de iniciar ese camino a recuperarnos, a tener vida propia. (Alpha).

¿Estás encargándote de tu vida? ¿Iniciaste tu recuperación en CoDA? Comparte tus vivencias aquí.

Reflexión del Dia: 23 de Enero

Melody Beattie, en su Libro «Ya no seas Codependiente»reitera que los codependientes nos creamos una falsa creencia de dominio sobre la voluntad de los demás, y eso es ilusorio y debemos modificarla.

Si deseas conocer mas sobre esta Autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esta vía.

Reflexiona sobre esto:

Cuando intentamos controlar a la gente y a las cosas que no tenemos por qué controlar, somos controlados por ellos. Abdicamos a nuestro poder para pensar, sentir y actuar de acuerdo con lo que más nos conviene. A menudo perdemos el control sobre nosotros mismos. Con frecuencia, somos controlados no sólo por la gente, también por enfermedades tales como el alcoholismo, o las tendencias compulsivas en el comer y en los juegos de apuesta. El alcoholismo y otros trastornos destructivos son fuerzas poderosas. Nunca se debe olvidar que los alcohólicos y otras personas con problemas son expertos controladores. Encontramos la horma de nuestro zapato cuando tratamos de controlarlos a ellos o a su enfermedad. Perdemos la batalla. Perdemos la guerra. Nos perdemos a nosotros mismos, a nuestras vidas Como dice una frase de Al-Anón: Tú no lo provocaste; no lo puedes controlar; y no lo puedes curar. ¡Así que deja de tratar de hacerlo! Nos frustramos al máximo cuando tratarnos de hacer lo imposible. Y generalmente impedirnos que suceda lo posible Creo que asirse fuertemente a una persona o cosa, o forzar mi voluntad sobre cualquier situación elimina la posibilidad de que mi poder superior haga algo constructivo acerca de la situación, la persona o yo. Mi afán de controlar bloquea el poder de Dios. Bloquea la capacidad de otras personas para crecer y madurar. Impide que los sucesos ocurran de una manera natural. Me impide a mí disfrutar de la gente o de los eventos.
El control es una ilusión. No funciona. No podemos controlar el alcoholismo. No podemos controlar las conductas compulsivas de nadie: comer en exceso, una conducta sexual exagerada, la apuesta compulsiva, ni ninguna otra de sus conductas. No podemos (y no es asunto nuestro hacerlo) controlar las emociones, la mente o las elecciones de nadie. No podemos controlar el resultado de los eventos. No podemos controlar a la vida. Algunos de nosotros apenas podemos controlamos a nosotros mismos.

Reflexión: Debemos admitir conscientemente que asumir patrones de control sobre los otros no conduce sino a frustración. Llegó el momento de asumir, con total convicción, que no podemos controlar a nadie, sólo podemos cambiarnos a nosotros mismos y despegarnos de la persona por quien sentimos ese apego emocional enfermizo. Al hacer consciente esta realidad, nos disponemos a establecer los cambios necesarios para «alcanzar paz y serenidad» en nuestras agitadas e incontrolables vidas» (Alpha).

¿Has logrado soltar tus patrones de control sobre los demás? ¿Cómo lo has logrado? Comparte tus vivencias aquí.

Reflexión del Dia: 22 de Enero

Melody Beattie, en su Libro Ya no seas Codependiente plantea la actitud reaccionaria habitual del codependiente. Esto expresa: la ingobernabilidad de su vida y su baja autoestima.

Si deseas conocer mas sobre esta Autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esta vía.

Reflexiona sobre esto:

¡No tenemos que reaccionar! Tenemos opciones. Esta es la alegría de la recuperación de la codependencia. Y cada vez que ejercitamos nuestro derecho para elegir cómo queremos actuar, pensar, sentir y comportarnos, nos sentimos mejores y más fuertes.
No necesitamos eliminar todas nuestras reacciones hacia la gente y hacia los problemas. Las reacciones pueden ser útiles. Pueden ayudarnos a identificar lo que nos gusta y lo que nos hace sentirnos bien. Nos ayudan a identificar los problemas dentro de nosotros y a nuestro alrededor. Pero la mayoría de nosotros reaccionamos demasiado. Y gran parte de las cosas a las que reaccionamos son tonterías. No son tan importantes, y no ameritan el tiempo ni la atención que les damos. Algunas de nuestras reacciones son respuestas a las reacciones que los demás tienen frente a nosotros. (Estoy furiosa porque él se puso furioso; él se puso furioso porque yo estaba enojada; yo estaba enojada porque pensé que él estaba enojado conmigo; pero no estaba enojado sino herido porque…).

Reflexión: Al codependiente se le caracteriza como una persona «reaccionaria» ante cualquier evento. Esta conducta en si misma evidencia una baja autoestima y un grado alto de dependencia afectiva a los demás. Con esa conducta a la defensiva pretende ocultar que su vida es ingobernable, y no tiene control alguno sobre sus acciones, vale decir es un comportamiento habitual y autodestructivo. No siempre las reacciones son inútiles, en ocasiones pueden servir de «termómetro» de nuestro estado emocional. (Alpha).

¿Reaccionas frecuentemente a cualquier evento? ¿Estás en recuperación? Comenta acá.

Reflexión del Dia: 20 de Enero

Melody Beattie, en su Libro Ya no seas Codependiente reafirma la importancia de la terapia en Doce Pasos de Coda como mecanismo valido para modificar la percepción del codependiente hacia su papel en su cuidado.

Si deseas conocer mas sobre esta Autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esta vía.

Reflexiona sobre esto:

Quizá se nos ha enseñado a no confiar en nosotros mismos. Esto sucede cuando tenemos un sentimiento y se nos dice que es malo o inadecuado. O cuando confrontamos una mentira o una inconsistencia y se nos acusa de estar locos. Perdemos la fe en esa parte profunda e importante de nosotros que experimenta sentimientos inapropiados, detecta la verdad y tiene confianza en su capacidad para manejar las situaciones de la vida. Muy pronto, podemos empezar a creer lo que nos han dicho de nosotros mismos: que no servimos, que estamos locos, que no se puede confiar en nosotros. Vemos a la gente a nuestro alrededor —personas a veces enfermas, con problemas, fuera de control— y pensamos, “ellos están bien. Deben estarlo. Me lo dijeron. De modo que debo ser yo. Debe haber algo fundamental que está mal en mí”. Nos abandonamos y perdemos la fe en nuestra capacidad para cuidarnos.

Reflexión: El codependiente cree depender de otros para ser feliz, estar sereno y centrado. Esta creencia necesita ser modificada para pasar a la «postura proactiva de asumir su cuidado», y generar los cambios necesarios para alcanzar sus logros personales. Cuando se camina por el sendero espiritual de la recuperación, esta postura positiva fluye y conduce ciertamente a movernos hacia la responsabilidad de cuidarnos con amor y afecto. (Alpha).

¿

Reflexión del Dia: 19 de Enero

Melody Beattie, en su Libro Ya no seas Codependiente plantea que hay una manera de lograr liberarnos del apego efectivo y es a través del DESAPEGO. Reitera que hay que hacerlo para sanar.

Si deseas conocer mas sobre esta Autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esta vía.

Reflexiona sobre esto:

¿Cuándo debemos desapegarnos?
Cuando no podamos dejar de pensar, de hablar acerca de o de preocuparnos por alguien o por algo; cuando nuestras emociones estén en constante ebullición; cuando sintamos que tenemos que hacer algo acerca de alguien porque ya no podemos soportar la situación ni un minuto más; cuando estamos colgando de un hilo y sentimos que tal hebra está a punto de romperse; y cuando creemos que ya no podemos seguir viviendo con el problema con el que hemos estado tratando de vivir. ¡Es tiempo de desapegarnos! Aprenderán a reconocer cuándo es aconsejable desapegarse. Una buena regla a seguir es esta: cuando más necesitas desapegarte es cuando esto parece ser lo más lejano o lo menos posible de hacer.

Mi Reflexión: El apego afectivo o dependencia emocional cursa con obsesión por controlar y manipular los sentimientos, emociones y conductas de los demás. Esto es la codependencia. Cuando asumimos seriamente el compromiso de recuperarnos, tendemos a modificar esas conductas autodestructivas para sanar. La herramienta demostrada como efectiva es el desapego. ¿Cuándo hacerlo? Cuando ya sintamos que no manejamos nuestras decisiones, otros lo hacen por nosotros. (Alpha).

¿Estás en relaciones afectivas de apego? ¿Cuál herramienta usas para zafarte de estas relaciones tóxicas que te desgastan? Comparte aquí.

Reflexión del Dia: 18 de Enero

Melody Beattie, en su Libro Ya no seas Codependiente reafirma la responsabilidad que tiene el codependiente de cuidarse a si mismo, dejando que los demás asuman su vida.

Si deseas conocer mas sobre esta Autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esta vía.

Reflexiona sobre esto:

El cuidado de uno mismo es una actitud hacia nosotros y hacia nuestras vidas que dice: soy responsable de mi persona. Tengo la responsabilidad no sólo de vivir mi vida, sino de conducirla. Tengo la responsabilidad de atender mi bienestar espiritual, emocional, físico y económico. Tengo la responsabilidad de identificar mis necesidades y satisfacerlas. Tengo la responsabilidad de solucionar mis problemas o de aprender a vivir con aquellos que no puedo resolver. Soy responsable por las elecciones que hago. Soy responsable de lo que doy y de lo que recibo. También soy responsable de fijar mis metas y de cumplirlas. Soy responsable de qué tanto disfruto de la vida, por la cantidad de placer que encuentro en las actividades cotidianas. Soy responsable por amar a alguien y por la manera en que expreso ese amor. Soy responsable de lo que hago a los demás y por lo que permito que los otros me hagan. Soy responsable de mis necesidades y deseos. Toda mi persona, todo aspecto de mi ser, es importante. Yo cuento. Yo importo. Se puede confiar en mis sentimientos. Mi manera de pensar es apropiada. Valoro mis necesidades y deseos. No merezco ni toleraré el abuso ni el maltrato constante. Tengo derechos, y es mi responsabilidad reclamar esos derechos. Las decisiones que tomo y la manera como me conduzco reflejarán mí alta autoestima. Mis decisiones tomarán en cuenta las responsabilidades que tengo para conmigo mismo.
Mis decisiones también tornarán en cuenta mis responsabilidades hacia otras personas: mi cónyuge, mis hijos, mis familiares. Examinaré y decidiré exactamente cuáles son estas responsabilidades mientras tomo mis decisiones. También tendré en cuenta los derechos de los que me rodean, el derecho de vivir sus vidas como ellos quieran. No tengo por qué imponerme sobre el derecho de los demás a cuidar de ellos mismos, y ellos tampoco tienen el derecho de imponerse por encima de mis derechos.
El cuidado de uno mismo es una actitud de respeto mutuo. Significa aprender a vivir nuestras vidas responsablemente. Significa permitir a los demás que vivan su vida como ellos elijan siempre y cuando no interfieran con nuestras decisiones de vivir como hemos elegido hacerlo. Cuidar de nosotros mismos no es tan egoísta como muchas personas asumen que es, pero tampoco es tan no egoísta como muchos codependientes creen.

Reflexión: Para el codependiente quien transcurre su vida cuidando y controlando a los demás, es una misión difícil comprender y asumir el cuidado de si mismo. Esto significa asumir una responsabilidad de su acciones,decisiones y dejar que los otros asuman la suya. (Alpha).

¿Estás asumiendo el control de tu vida? ¿Estás en terapia para recuperarte? Comenta acá.

Reflexión del Dia: 16 de Enero

Melody Beattie, en su Libro Ya no seas Codependiente reafirma que podemos como codependientes manejar sentimientos como la ira, solo que puede y debe hacerse desde la óptica de construir cambios en nuestra vida para sanar.

Si deseas conocer mas sobre esta Autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esta vía.

Reflexiona sobre esto:

Tenemos una responsabilidad —primordialmente para con nosotros mismos— que es manejar nuestra ira de manera adecuada: ¡maneja tus sentimientos! ¿Cómo manejamos una emoción tan potente como es la ira? ¿Cómo dejar de sentirnos tan enojados? ¿Cuándo sucede esto? ¿A dónde se va? ¿Con quién podemos hablar? ¿Quién querrá oír todo eso? Probablemente ni siquiera nosotros queremos oírlo. Después de todo, la persona con la que estamos enojados está enferma. De modo que, ¿no deberíamos estar sintiendo compasión y todas esas cosas buenas? ¿Es verdaderamente correcto estar tan enojados con una persona enferma?
Sí, tenemos derecho a estar furiosos con una persona enferma. Nosotros no ocasionamos el problema. Aunque el sentimiento ideal es de compasión, probablemente no lo sentiremos hasta que hayamos manejado nuestra ira. Lo que va entre sentir un furor homicida y mordernos la lengua porque nos sentimos apenados por esa persona enferma, es la manera de ir más allá de nuestros sentimientos de enojo, los viejos y los nuevos. Pero yo no creo que manejar las emociones reprimidas suceda de un día para otro.
Puede no suceder en un mes o aun en un año. ¿Cuánto tardamos en enojarnos a este grado? Manejar una cantidad significativa de ira reprimida puede llevarse tiempo y esfuerzo. Manejar la ira nueva requiere de práctica.

Reflexión: Para el codependiente es difícil manejarse ante situaciones que involucren sentimientos por cuanto es reaccionario ante cualquier evento. Tenemos derecho a sentir enojo, rabia ira, manejandola constructivamente y drenando de manera efectiva. Eso ocurre como respuesta a sentirse abusado, controlado, manipulado. No podemos mantenernos en esa fase, debemos salir de allí. (Alpha).

¿Manejas frecuentemente sentimientos de ira? ¿Cómo escapas de ese evento? Comparte acá.

Reflexión del Dia: 15 de Enero

Melody Beattie, en su Libro Ya no seas Codependiente reafirma que la codependencia se desarrolla en ambientes disfuncionales donde sus miembros crecen con una baja autoestima y eso los hace asumir conductas autodestructivas.

Si deseas conocer mas sobre esta Autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esta vía.

Reflexiona sobre esto:

Como codependientes, tendemos a entablar relaciones totalmente antagónicas en nuestro interior. Algunos de nosotros aprendimos estas conductas de odio a sí mismo dentro de nuestras familias, posiblemente con la ayuda de uno de nuestros padres que era alcohólico. Algunos reforzamos ese desdén que sentimos por nosotros mismos dejando a un padre alcohólico para casarnos con un alcohólico. Podemos haber iniciado relaciones adultas con una frágil autoestima, para luego descubrir que lo que nos quedaba de autoestima se ha desintegrado. Pocos de nosotros podemos haber guardado nuestra autoestima completamente intacta hasta que lo conocimos a él o a ella o hasta que surgió ese problema; repentina o gradualmente nos encontramos odiándonos a nosotros mismos. El alcoholismo y otros trastornos compulsivos destruyen la autoestima tanto en los alcohólicos como en los codependientes. Recuerden, el alcoholismo y otros trastornos compulsivos son autodestructivos. Algunos de nosotros podemos ni siquiera estar conscientes de nuestra baja autoestima y de nuestro odio a sí mismos porque nos hemos estado comparando con los alcohólicos y con las otras personas locas que hay en nuestras vidas; en comparación, estamos por encima de ellos. La baja autoestima puede venirnos encima cada vez que la dejemos actuar.
En realidad, no importa cuándo empezamos a torturarnos. Deberíamos parar ahora. Ahora mismo podemos darnos un gran abrazo mental y emocional. Estamos bien. Es maravilloso ser quienes somos.
Nuestros pensamientos están bien. Nuestros sentimientos son adecuados. Estamos justo en donde debíamos de estar hoy, en este momento. No hay nada mal con nosotros. No hay nada que en lo fundamental esté mal en nosotros. Si hemos fallado, no hay problema; estábamos haciéndolo lo mejor que podíamos.

Reflexión: Vivir en familias disfuncionales hace que desarrollemos una baja estima personal, al punto de resentirnos con el adicto y con nosotros mismos. Este escenario es el medio de cultivo para desarrollar codependencia ¿Cómo detener esta conducta autodestructiva? No existe un recetario por pasos sencillos, Hay que enseriarse y asumir una terapia seria y permanente, sólo así saldremos de ese círculo de drama y aflicción que vivimos. (Alpha).

¿Has vivido en familias disfuncionales? ¿Cuales son tus sentimientos con relación a vivir apegado, abusado? Comparte tu experiencia acá.

Reflexión del Dia: 14 de Enero

Melody Beattie, en su Libro Ya no seas Codependiente reafirma que la vía expedita para sanar de la codependencia es el Desapego.

Si deseas conocer mas sobre esta Autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esta vía.

Reflexiona sobre esto:

Desapégate. Renuncia. A veces cuando hacemos esto el resultado que habíamos esperado sucede rápida, a veces milagrosamente. A veces, no sucede. A veces nunca sucede. Pero tú saldrás beneficiado. No tienes que dejar de ocuparte o de amar. No tienes que tolerar el abuso. No tienes que abandonar métodos constructivos, como la intervención profesional, para solucionar tus problemas. Lo único que tienes que hacer es poner tus manos emocionales, mentales, espirituales y físicas otra vez dentro de tus propios bolsillos y dejar a las cosas y a la gente solas. Déjalas estar. Toma cualquier decisión que necesites tomar para ocuparte de ti mismo, pero no las tomes para controlar a los demás. ¡Empieza a ocuparte de ti mismo.

Reflexión: Resulta importante reiterar que el desapego es la única y viable herramienta para lograr liberarnos de los apegos y dependencias. Cuando aceptamos que somos gobernados, que todo esta confuso y no podemos controlar nuestra propia vida, es el momento crucial para decidir buscar ayuda. Una buena y sabia elección es adscribirse a grupos de Coda que manejan la Terapia en Doce Pasos. Allí, junto a otros codependientes en recuperación, hallaremos el escenario saludable para cambiar gradualmente nuestros hábitos y creencias negativas por aquellos sanos y positivos. (Alpha).

¿Sientes la necesidad imperiosa de inscribirte en un Programa de Doce pasos de CoDA? ¿Ya asistes a un programa? ¿Crees en Dios como proveedor de tus necesidades? Comparte tu experiencia aquí.

Reflexión del Dia: 13 de Enero

Melody Beattie, en su Libro Ya no seas Codependiente reafirma las bondades del desapego como herramienta esencial para lograr la real y duradera recuperación.

Si deseas conocer mas sobre esta Autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esta vía.

Reflexiona sobre esto:

Desapegarnos no quiere decir que nada nos importe. Significa que aprendemos a amar, a preocuparnos y a involucrarnos in volvernos locos. Dejamos de crear un caos en nuestra mente y en nuestro medio ambiente. Cuando no nos hallamos reaccionando de un modo ansioso compulsivo, nos volvemos capaces de tomar buenas decisiones acerca de cómo amar a la gente y de cómo solucionar nuestros problemas. Nos liberamos para comprometernos y para amar de modo que podamos ayudar a los demás sin lastimarnos a nosotros mismos.
Las recompensas que el desapego nos brinda son muchas: serenidad, una profunda sensación de paz interior, la capacidad de dar y de recibir amor de una manera que nos enaltece y nos llena de energía, y la libertad para encontrar soluciones reales a nuestros problemas. Encontramos la libertad para vivir nuestra propia vida sin sentimientos excesivos de culpa o de responsabilidad hacia los demás.23 En ocasiones el desapego llega a motivar y a liberar a la gente que se encuentra a nuestro alrededor para empezar a solucionar sus problemas. Dejamos de mortificarnos por ellos y lo perciben, de modo que finalmente comienzan a preocuparse por ellos. ¡Qué gran plan! Cada quien atiende sus propios asuntos.

Reflexión: Al sopesar las fortalezas del desapego es indiscutible la necesidad de implementar esta estrategia durante la Terapia de Doce Pasos de CoDA. Es útil por cuanto centra su propósito esencial en: a) soltar y dejar ir el control y la manipulación, b) responsabiliza al codependiente de sus propios actos, y c) fomenta la liberación de todo aquello que implica envolvimiento afectivo en la vida de los demás ¡Cuánta utilidad dá el Desapego! (Alpha).

¿Estás trabajando en el Desapego? ¿Cómo te sientes en la recuperación en CoDA? Comenta acá.