Meditación 23 de Mayo … Disfrute

Melody Beattie, en su Libro El Lenguaje del Adiós reitera la imperiosa necesidad del codependiente para asumir una vida que le lleve a alcanzar paz, serenidad, amor y aceptación. Nadie dice que es fácil, pero sí posible. Es cuestión de actitud positiva y asertiva consigo mismo.

Si deseas conocer más sobre esta autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esa vía.

Medita sobre esto:

La vida no es para soportarla, es para disfrutarla y abrazarla.
La creencia de que debemos encogernos de hombros y vivir una existencia de escasez y privaciones para tener nuestra «recompensa en el Cielo» es una creencia codependiente.
Y sin embargo, la mayoría de nosotros todavía tenemos temporadas en que la vida es estresante y reta a nuestra habilidad para soportarla. Pero en la recuperación estamos aprendiendo a vivir nuestra vida, a disfrutarla y a manejar las situaciones como vienen.
Nuestras habilidades de supervivencia nos han servido bien. Nos han acarreado en tiempos difíciles, de niños y de adultos. Nuestra capacidad para congelar sentimientos, negar problemas, privarnos a nosotros mismos y lidiar con el estrés nos han ayudado a llegar a donde estamos hoy. Pero ahora estamos a salvo. Estamos aprendiendo a hacer algo más que sobrevivir. Podemos dejar ir conductas de supervivencia enfermizas. Estamos aprendiendo maneras nuevas, mejores, de protegernos y cuidar de nosotros mismos. Estamos libres para sentir nuestros sentimientos, identificar problemas y resolverlos, y darnos a nosotros mismos lo mejor. Estamos libres para abrirnos y sentirnos vivos.

«Hoy dejaré ir mis habilidades para soportar y sobrevivir. Escogeré un nuevo modo de vivir, uno que me permita estar vivo y disfrutar de la aventura».

Mi Reflexión: El codependiente no está hecho para la diversión y el disfrute, solo para ensimismarse en sí mismo y atender aquello que le da más tranquilidad aparente: controlar, rescatar y cuidar a los demás. Para revertir esta creencia sería necesario que el concientizará la necesidad de iniciar una terapia que lo conduzca a sanar ese padecimiento. (Alpha).

¿Estás dispuesto a reinventarte y construir una nueva vida? Comparte aquí.

Reflexión del Dia: 17 de Mayo

Melody Beattie, en su Libro Ya no seas Codependiente reitera la importancia de desmontar creencias que podemos cambiar a los demás, solo podemos hacerlo con nosotros mismos,

Si deseas conocer mas sobre esta Autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esta vía.

Reflexiona sobre esto:

A veces, la vida y la gente parecen presionar y presionar. Como estamos tan acostumbrados al dolor, podremos decirnos a nosotros mismos que no nos duele. Como estamos tan acostumbrados a que la gente nos controle y nos manipule, podremos decirnos que estamos equivocados.
No estamos equivocados. La vida nos está presionando y lastimando para captar nuestra atención. A veces, el dolor y la presión apuntan hacia una lección. La lección puede ser que nos hemos vuelto demasiado controladores. O quizá se nos está empujando para que nos adueñemos de nuestro poder para cuidar de nosotros mismos. La cuestión son los límites.
Si alguien o algo nos está presionando hasta el límite, eso es exactamente lo que está sucediendo: nos han presionado hasta nuestro límite. Podemos estar agradecidos por esa lección que está aquí para ayudarnos a explorar nuestros límites y a fijarlos.
¡Date el permiso de fijar límites sanos en tu vida!

Mi Reflexión: El codependiente se acostumbra al dolor y al sufrimiento. Luego le parece natural sentirse así. Pero hay otra manera de vivir: en paz, con gozo y dicha. Para alcanzar ese estado debe batallar en su recuperación. Destronar mitos y creencias negativas que le han llevado a esta circunstancia donde no siente que gobierna su vida. Es momento de «buscar ayuda» (Alpha).

¿Sientes que es normal vivir estresado, abatido, triste y hasta deprimido? Comenta acá.

Meditación 17 de Mayo… Experimenta tu vida

Melody Beattie, en su Libro El Lenguaje del Adiós plantea que es importante entender quienes somos? y hacia donde debemos ir? Al comprender estas preguntas, buscaremos la solución segura.

Si deseas conocer mas sobre esta autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esa vía.

Medita sobre esto:

En cuanto digas: «Quiero cambiar», y haces un programa para lograrlo, se creara una fuerza contraria que te impide el cambio. Los cambios están teniendo lugar por sí mismos. Si profundizas más en lo que eres, si aceptas lo que hay allí, entonces un cambio ocurre automáticamente por sí mismo. ¡Esta es la paradoja del cambio! (Frederick S. Perls).

El Dr. Frederick S. Perls, fundador de la Terapia Gestalt, influenció profundamente mi vida. Cuando trabajé en comunidades terapéuticas, para «Gestalt», un sentimiento significaba entrar completamente en ese sentimiento, volverme uno con ese sentimiento, aceptar total y completamente el sentimiento y la experiencia como un medio de trascender, sanar o manejarlo.
¿Cómo cambiamos? No te fuerces. Déjate cambiar. Déjate ser. Adéntrate plenamente en la experiencia de tu vida, tus sentimientos y ser tú lo que puedas.
Cuando salgas, serás diferente.
Acepta también quién eres.
No intelectualices tu vida. Experimentala.

«Dios, ayúdame a aceptar quién y dónde estoy, y cómo me siento hoy. Entonces mañana, ayúdame a hacer lo mismo».

Mi Reflexión: Para el codependiente es imprescindible «aceptarse tal cual es», «donde esta» y «hacia donde ir». Si logra responder estas interrogantes podrá responsabilizarse de su vida asumiendo una conducta terapéutica, yendo hacia su sanación. (Alpha).

¿Cómo te percibes a ti mismo?¿Estás en disposición de cambiar para tu sanación? Comparte aquí

Reflexión del Dia: 16 de Mayo

Melody Beattie, en su Libro Ya no seas Codependiente reitera la necesidad que el codependiente tiene de reforzar su autoestima y autoconcepto. Su tarea puntual es «conocerse sus fortalezas y debilidades». Reforzar las primeras y ejercitarse para convertir las segundas en fortalezas.

Si deseas conocer mas sobre esta Autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esta vía.

Reflexiona sobre esto:

¡Empieza ahora!. Podemos aprender a ser amables, amorosos, y cariñosos con nosotros mismos. De todas las conductas de recuperación que estamos luchando por lograr, amarnos a nosotros mismos puede ser la mas difícil y la mas importante. Si habitualmente somos duros y críticos con nosotros mismos, aprender a ser amables puede requerir de un dedicado esfuerzo.
¡Pero que valiosa aventura!
Al no gustarnos a nosotros mismos, podemos estar perpetuando el desprecio, el abandono o el abuso que recibimos durante la niñez por parte de la gente importante en nuestra vida: No nos gusto lo que sucedió entonces, pero nos descubrimos copiando a aquellos que nos maltrataron al tratarnos mal a nosotros mismos.
Podemos detener ese patrón.
Podemos empezar a darnos el tratamiento amoroso, respetuoso, que merecemos.
En vez de criticarnos, podemos decirnos que nos hemos desempeñado suficientemente bien.
Podemos despertar por la mañana y decirnos que nos merecemos tener un día bueno.
Podemos hacer el compromiso de cuidar bien de nosotros mismos durante el día.
Podemos reconocer que somos merecedores de amor.
Podemos hacer cosas amorosas por nosotros mismos.
Podemos amar a otras personas y dejarlas que nos amen.

Mi Reflexión: La gente que en verdad se ama a sí misma no se centra destructivamente en sí misma. No abusa de los demás. No deja de crecer y de cambiar. La gente que se ama bien a sí misma aprende a amar también a los demás. Continuamente crece para convertirse en gente más sana, aprendiendo que colocó su amor en el lugar correcto. (Alpha).

¿Sientes que tu autoestima está bien? ¿Has buscado ayuda en Grupos de CoDA? Comenta acá tu vivencia.

Meditación 16 de Mayo… Espontaneidad

Melody Beattie, en su Libro El Lenguaje del Adiós reafirma la importancia de soltar el control. Es ilusorio pensar que podemos controlar la vida de los otros.Mejor nos ocupamos de la propia.

Si deseas conocer mas sobre esta autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esa vía.

Medita sobre esto:

En recuperación, ¡estamos aprendiendo a dejarnos llevar! Estamos aprendiendo a ser espontáneos.

La espontaneidad puede asustar a algunos de nosotros. Podemos temer la pérdida de control relacionada con la espontaneidad. Todavía podemos estar operando bajo las reglas codependientes que prohíben la espontaneidad: ser bueno; tener razón; ser perfecto; sé fuerte; no te diviertas; y siempre estar en control.

Podemos asociar la espontaneidad con actuar de una manera adictiva, compulsiva, autodestructiva o irresponsable.
No es de eso de lo que estamos hablando en recuperación. La espontaneidad positiva implica expresar libremente quiénes somos, de una manera que sea divertida, saludable, que no nos hiera y que no infrinja los derechos de los demás.
Aprendemos a ser espontáneos y libres a medida que crecemos en autoconciencia y autoestima. La espontaneidad surge a medida que aumenta nuestra confianza en nosotros mismos, y nos volvemos más seguros en nuestra capacidad de mantener límites saludables.
Ser espontáneo está conectado a nuestra capacidad de jugar y lograr la intimidad. Para todos esos actos deseables, debemos ser capaces de dejar de lado nuestra necesidad de controlarnos a nosotros mismos y a los demás, y entrar plena y libremente en el momento presente.
Suelta tus riendas sobre ti mismo. Entonces, ¿qué pasa si te equivocas? Entonces, ¿qué pasa si estás equivocado? Disfruta de tus imperfecciones.
Déjate un poco necesitado, un poco vulnerable. ¡Tomar un riesgo!
Podemos ser espontáneos sin lastimarnos a nosotros mismos ni a los demás. De hecho, todos se beneficiarán con nuestra espontaneidad.

«Hoy, tiraré el libro de reglas y disfrutaré de ser quien soy. Me divertiré un poco con el don de la vida, de mí mismo y de otros».

Mi Reflexión: Difícilmente un codependiente quiere perder el control de su entorno personal, familiar y social. Se cree un interventor sano sobre la vida de los demás. Cuando se inicia y transcurre la recuperación, se va acostumbrando a que el control es una ilusión, y solo deja problemas en el camino. Cambiar esta creencia y asumir un comportamiento saludable es la misión verdadera y puntual de esa Terapia ¡Hazla bien día a día! (Alpha).

¿Eres un controlador compulsivo? ¿Iniciaste la Terapia Doce Pasos CoDA? Comparte tu experiencia acá.

Reflexión del Dia: 15 de Mayo

Melody Beattie, en su Libro Ya no seas Codependiente reitera que el codependiente para sanar debe «dejar ir» o «soltar» todos los sentimientos negativos: culpa, fracaso, miedo, vergüenza. Solo así podrá llegar gradualmente a la meta de sanarse.

Si deseas conocer más sobre esta Autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esta vía.

Reflexiona sobre esto:

¡Corre un riesgo. Date una oportunidad!
Obviamente no tenemos que correr riesgos temerarios o contraproducentes, pero en la recuperación podemos permitirnos correr riesgos positivos. No podemos darnos el lujo de quedarnos paralizados.
No tenemos por que quedarnos frustrados y atrapados por miedo a cometer un error o a fracasar. Naturalmente, de vez en cuando cometeremos errores y fracasaremos. Eso es parte de estar completamente vivos. No hay garantías. Si estamos esperando cursos garantizados de acción, podemos pasar gran parte de nuestra vida esperando.
No tenemos por qué avergonzarnos a nosotros mismos o aceptar que nos avergüence cualquier otra persona, incluso aquella que está en recuperación, por cometer errores. La meta de la recuperación no es vivir la vida perfectamente. La meta de la recuperación es vivir, aprender nuestras lecciones y lograr un progreso general.
Corre un riesgo. No esperes siempre una garantía.
No tenemos por qué escuchar el «te lo dije». Límpiate el polvo después de un error y, luego, camina hacia el éxito.

Mi Reflexión: El camino hacia la recuperación implica desafiar creencias arraigadas y patrones de comportamiento poco saludables. Esto puede generar temor al cambio y a lo desconocido. Sin embargo, cada paso que damos fuera de nuestra seguridad habitual nos acerca más a una vida más auténtica y plena. Al correr riesgos, nos damos la oportunidad de descubrir nuestras fortalezas, capacidades y deseos genuinos. Aunque el proceso pueda ser desafiante y a veces doloroso, también nos brinda la posibilidad de crecer, aprender y transformarnos en personas más fuertes y resilientes. (Alpha).

¿Estás dispuesto a soltar sentimientos de miedo, abandono, vergüenza, fracaso y culpa? Comparte tu vivencia al respecto.

Meditación 15 de Mayo… ¿Qué esperas?

Melody Beattie, en su Libro El Lenguaje del Adiós reitera la importancia de soltar esa imagen «fabricada» de ti mismo para complacer a los otros. Llegó el momento de ser «tu mismo».

Si deseas conocer más sobre esta autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esa vía.

Medita sobre esto:

La clave de la vida y el poder es simple. Es saber quiénes somos. Es saber lo que pensamos, lo que sentimos, lo que creemos, lo que sabemos e incluso lo que sentimos. Es entender dónde hemos estado, dónde estamos y hacia dónde queremos ir. A menudo, eso es diferente de lo que pensamos que debemos ser, de lo que otros quieren que seamos, nos digan que seamos, y algunas veces hasta nos dicen que sí lo somos.(Melody Beattie).

Es fácil engancharse a las expectativas que otras personas tienen de nosotros. A veces, es incluso más fácil engancharse a lo que creemos que esperan de nosotros.
Una de las mayores trampas es encerrarnos en una noción preconcebida de nosotros mismos. Podemos mantenernos tan ocupados viviendo a la altura de una imagen de nosotros mismos que olvidemos quiénes somos en realidad. Es lo suficientemente fuerte como para liberarse de las expectativas, habladas y no dichas, que otros nos imponen. Es más insidioso cuando comenzamos a decirnos que somos lo que creemos que otras personas esperan que seamos, ya sea que lo sean o no.
Mírate en el espejo. Si ves a una persona confinada con una imagen limitante que ya no le queda bien o no se siente bien, libérate.

«Dios, ayúdame a soltar el ego. Ayúdame a dejar de vivir las caricaturas autoimpuestas de quien creo que se supone que soy»

Mi Reflexión: Para el codependiente es crucial reflexionar sobre quiénes somos más allá de nuestras relaciones interpersonales. Necesitamos reconectar con nuestras propias necesidades, deseos y valores, y aprender a establecer límites saludables que nos permitan cuidar de nosotros mismos sin sacrificar nuestra integridad. Salir de la codependencia nos desafía a redefinir nuestra identidad en términos de autenticidad y autonomía, liberándonos del peso de las expectativas externas para abrazar nuestra singularidad y plenitud interior. (Alpha).

¿Te estás ocupando de ser «tu mismo» sin armaduras ni caretas? ¿Estás asistiendo a grupos de ayuda de CoDA? Comenta tu experiencia.

Meditación 14 de Mayo… Disculpas

Melody Beattie, en su Libro El Lenguaje del Adiós reafirma la importancia de asumir las consecuencias de nuestros actos, reparando errores que cometemos.

Si deseas conocer mas sobre esta autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esa vía.

Medita sobre esto:

A veces, actuamos de una manera que no nos sentimos cómodos. Eso es humano. Es por eso que tenemos las palabras: «Lo siento». Sanan y acortan la brecha. Pero no tenemos que decir «lo siento» si no hicimos nada malo. Una sensación de vergüenza puede mantenernos disculpándonos por todo lo que hacemos, cada palabra que decimos, por estar vivos y ser lo que somos.

No tenemos que disculparnos por cuidarnos a nosotros mismos, lidiar con los sentimientos, establecer límites, divertirnos o recuperar la salud.
Nunca tenemos que cambiar nuestro rumbo, si es en nuestro mejor interés, pero a veces una disculpa general reconoce otros sentimientos y puede ser útil cuando los problemas de una circunstancia o relación no son claros. Podríamos decir: «Lo siento por el alboroto que tuvimos. Lo siento si lo que necesitaba hacer para cuidarme te lastimaba; no fue pensado de esa manera».
Una vez que hacemos una disculpa, no tenemos que seguir repitiendo. Si alguien quiere continuar librándonos de una disculpa por el mismo incidente, ese es el problema de la persona, y no tenemos que engancharnos.
Podemos aprender a tomar nuestras disculpas en serio y no repartirlas cuando no son válidas. Cuando nos sentimos bien con nosotros mismos, sabemos cuándo es el momento de decir que lo sentimos y cuándo no.

«Hoy intentaré ser claro y saludable en mis disculpas, tomando responsabilidad por mis acciones y las de nadie más. Dios, ayúdame a descubrir por qué necesito disculparme y qué no es mi responsabilidad».

Mi Reflexión: Cuánto nos cuesta pedir excusas o disculpas. Es un momento que solemos evitar. Esta justificado hacerlo siempre y cuando hayamos cometido alguna error y merezca ser reparado. No tenemos porque disculparnos por las conductas saludables que estamos asumiendo, como es el cuidarnos de nosotros mismos. (Alpha).

¿Estás dispuesto a reparar algún error cometido? Comenta acá.

Reflexión del Dia: 12 de Mayo

Melody Beattie, en su Libro Ya no seas Codependiente plantea que el codependiente si bien ha vivido dificultades, convirtiéndose en un ser «asocial», la terapia le ayuda a asumir un rol diferente en sus vínculos afectivos.
Si deseas conocer mas sobre esta Autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esta vía.

Reflexiona sobre esto:

Podemos permitirnos tener cercanía con la gente.
Muchos de nosotros tenemos patrones profundamente inculcados de sabotear las relaciones. Algunos podemos terminar instintivamente una relación una vez que esta llega a cierto nivel de cercanía e intimidad.
Cuando empezamos a sentirnos cerca de alguien, podemos decir que esa persona tiene cero defectos de carácter, y luego hacerlos tan grandes, que es lo único que le podemos ver. Podemos retirarnos o empujar a la persona para crear distancia. Podemos empezar a criticarla, una conducta que seguramente provoca distanciamiento.
Podemos tratar de controlar a la persona, una conducta que impide la intimidad.
Podemos decirnos a nosotros mismos que no queremos o necesitamos otra persona, o asfixiar a la persona con nuestras necesidades.
A veces nos derrotamos a nosotros mismos tratando de tener cercanía con gente que no está en condiciones para la intimidad, gente con adicciones activas o que no quiere tener cercanía con nosotros. A veces escogemos gente con particulares defectos para que cuando llegue el momento de la cercanía, podamos tener un pretexto para escapar.
Estamos asustados y nos da miedo perdernos a nosotros mismos. Tememos que la cercanía signifique que no seamos capaces de adueñarnos de nuestro poder para cuidar de nosotros mismos.
En la recuperación estamos aprendiendo que está bien que nos permitamos tener cercanía con la gente. Estamos escogiendo relacionarnos con gente sana, segura, de modo que la cercanía es una posibilidad. Cercanía no significa que tengamos que perdernos a nosotros mismos, o nuestra vida. Como dijo un hombre, estamos aprendiendo que podemos adueñarnos de nuestro poder con la gente, aunque tengamos cercanía con ella, aunque la otra persona tenga algo que nosotros necesitemos.

Mi Reflexión: El codependiente se aísla, se convierte en una persona impedida de dar y recibir afecto sanamente. Durante el proceso de recuperación aprende progresivamente a modificar sus creencias y costumbres, asumiendo las relaciones en un clima de respeto, franqueza y asertividad. (Alpha).

¿Vives aislado de los demás? ¿Estás modificando ese comportamiento con la Terapia de CoDA? Comparte tu experiencia al respecto.

Meditación 12 de Mayo… Dejar que las cosas buenas sucedan

Melody Beattie, en su Libro El Lenguaje del Adiós reafirma que el codependiente se victimiza para mantener el control de los demás. La conducta autodestructiva le impide avanzar hacia el equilibrio deseado.

Si deseas conocer mas sobre esta autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esa vía.

Medita sobre esto:

Antes de la recuperación, mis relaciones eran pésimas. No me fue muy bien en mi trabajo. Estaba enredado en mi familia disfuncional ¡Pero al menos sabía qué esperar! (Anónimo).
Quiero que la segunda mitad de mi vida sea tan buena como la primera mitad fue miserable. A veces, me temo que no será así. A veces, estoy asustado de que pueda ser.
Lo bueno puede asustarnos. El cambio, incluso un buen cambio, puede ser aterrador. De alguna manera, los buenos cambios pueden ser más aterradores que los tiempos difíciles.
El pasado, particularmente antes de la recuperación, puede haber llegado a ser confortablemente familiar. Sabíamos qué esperar en nuestras relaciones. Fueron predecibles. Eran repeticiones del mismo patrón: los mismos comportamientos, el mismo dolor, una y otra vez. Puede que no hayan sido lo que queríamos, pero sabíamos lo que iba a suceder.
Esto no es así cuando cambiamos patrones y comenzamos a recuperarnos.
Es posible que hayamos sido bastante buenos para predecir eventos en la mayoría de las áreas de nuestra vida. Las relaciones serían dolorosas Estaríamos privados.
Cada año sería casi una repetición de la última. A veces empeoraba un poco, a veces un poco mejor, pero el cambio no era drástico. No hasta el momento en que comenzamos la recuperación.
Entonces las cosas cambiaron. Y cuanto más avanzamos en este programa milagroso, más cambian nosotros y nuestras circunstancias. Comenzamos a explorar territorio inexplorado.
Las cosas se ponen bien. Ellos mejoran todo el tiempo. Comenzamos a tener éxito en el amor, en el trabajo, en la vida. Un día a la vez, lo bueno comienza a suceder y la miseria se disipa.
Ya no queremos ser una víctima de la vida. Hemos aprendido a evitar crisis y traumas innecesarios.
La vida se pone bien.
«¿Cómo manejo las cosas buenas?», Preguntó una mujer. «Es más difícil y más extraño que el dolor y la tragedia».
«De la misma manera en que manejamos las experiencias difíciles y dolorosas» respondí. «Un día a la vez.»

«Hoy, Dios, ayúdame a dejar de lado mi necesidad de sentir dolor y crisis. Ayúdame a moverme lo más rápido posible a través de sentimientos y problemas tristes. Ayúdame a encontrar mi base y equilibrio en paz, alegría y gratitud. Ayúdame a trabajar tan duro para aceptar lo que es bueno como lo he trabajado en el pasado al aceptar lo doloroso y lo difícil.»

Mi Reflexión: El codependiente se siente «víctima» y actúa dramáticamente como un mecanismo para mantener el control sobre los demás. Esa práctica insana debe ser revertida y empezar a cambiar el comportamiento autodestructivo por otra actitud saludable que permita armonizar los eventos de su vida. (Alpha).

¿Te sientes víctima y te mantienes en el drama? ¿Estás en Terapia? Comenta acá.