Ciertamente recuperación significa extinguir cualquier incendio que flamee en nuestros hogares o en nuestras vidas hoy. Pero el núcleo de la recuperación es el proceso extensivo de reconstrucción, a veces, pesadisimo, para adquirir conductas nuevas. En la recuperación, dejamos de soportar la vida y empezamos a vivirla.
En la recuperación:
En vez de tratar de controlar a los demás obsesivamente, aprendemos a desapegarnos.
En lugar de permitir que los demás nos lastimen y nos usen, fijamos limites.
En vez de reaccionar, aprendemos a relajarnos y dejamos que las cosas caigan por su peso.
Reemplazamos la visión de túnel con una perspectiva.
Dejamos de preocuparnos y de negar las cosas y aprendemos habilidades constructivas para la solución de problemas.
Aprendemos a sentir y a expresar nuestros sentimientos, aprendemos a valorar lo que queremos y necesitamos.
Dejamos de castigarnos a nosotros mismos por los problemas, las tonterías y las locuras de las otras personas.
Dejamos de esperar de nosotros mismos la perfección, y dejamos de esperar que los demás sean perfectos.
Dejamos de reaccionar ante los poderosos sistemas disfuncionales por los que hemos sido afectados la mayoria de nosotros.
Adquirimos el arte de dejar de ser victimas.
Dejamos de cuidar compulsivamente de los demás y empezamos a cuidar de nosotros mismos.
Aprendemos a ser buenos con nosotros mismos, a divertirnos y a disfrutar de la vida.
Aprendemos a sentirnos bien en relación con lo que hemos logrado.
Dejamos de poner nuestra atención en lo que esta mal y empezamos a fijarnos en lo que esta bien.
Aprendemos a funcionar dentro de las relaciones.
Aprendemos a amarnos a nosotros mismos, para poder amar mejor a los demás.
La recuperación significa tratar con el paquete completo de conductas compulsivas autodestructivas. Pero no tratamos con estas conductas pensando que estamos mal por tenerlos. Nos dirigimos a nosotros mismos, y al proceso de recuperación, con un sentido de perdón y cierta gentileza hacia nosotros mismos. Empezamos a comprender que las conductas que hemos practicado han sido herramientas para sobrevivir. Hemos estado enfrentando situaciones difíciles. Lo hemos estado haciendo de la mejor manera que hemos podido. Nos hemos estado protegiendo a nosotros mismos.
Recuperación quiere decir adquirir, vivir por, y a veces vivir y recuperarnos a causa de principios espirituales. Aprendemos a hacer cosas intangibles como «desapegarnos y dejar hacer a Dios», «renunciar» y «aceptar» al tiempo que tenemos conductas mas tangibles tales como tomar decisiones y fijar limites.
(Melody Beattie de su Libro Mas Allá de la Codependencia).