Reflexión del Dia: 13 de Diciembre

Melody Beattie, en su Libro «Ya no seas Codependiente» reitera que hay una sola vía para alcanzar la independencia emocional y esta es el desapego.

Si deseas conocer mas sobre esta Autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esta vía.

Reflexiona sobre esto:

El desapego no es un alejamiento frío, hostil; no es una aceptación resignada y desesperante de todo aquello que la vida y la gente nos tire en el camino; no es una manera robótica de ir por la vida, absortos, y totalmente indiferente a la gente y a los problemas; no es una actitud de inocente dicha infantil; ni un desentendimiento de lo que son nuestras verdaderas responsabilidades hacia nosotros mismos y hacia los demás; ni una ruptura en nuestras relaciones. Tampoco es que retiremos nuestro amor y nuestra solicitud, aunque a veces estas formas de desapegarnos pueden ser las mejores a seguir, por el momento.
De una manera ideal, desapegarnos es liberarnos o apartarnos de una persona o problema con amor. Mental, emocional y a veces físicamente nos desembarazamos de nuestro involucramiento insano (y a menudo doloroso) con la vida y responsabilidades de otra persona, y de los problemas que no podemos resolver.

Mi Reflexión: Cuando comprendemos con claridad la importancia de dejar ir las preocupaciones y desórdenes por estar apegado a personas o sustancias, adquirimos conciencia plena que es la mejor herramienta para la recuperación. El codependiente tiene que asumir ese compromiso sincera y honestamente. Allí radica su misión primaria. (Alpha).

Reflexiona en estas preguntas: ¿Estás intentando desapegarte? ¿Lo has logrado? Comenta acá. <

Reflexión del Dia: 10 de Diciembre

Melody Beattie, en su Libro «Ya no seas Codependiente» reafirma que la codependencia tiene salida si y sólo si el codependiente se compromete honestamente a seguir una recuperación continua, en la cual el desapego se utiliza como vía positiva para lograr su independencia efectiva.

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Reflexiona sobre esto:

El desapego no es un alejamiento frío, hostil; no es una aceptación resignada y desesperante de todo aquello que la vida y la gente nos tire en el camino; no es una manera robótica de ir por la vida, absortos, y totalmente indiferente a la gente y a los problemas; no es una actitud de inocente dicha infantil; ni un desentendimiento de lo que son nuestras verdaderas responsabilidades hacia nosotros mismos y hacia los demás; ni una ruptura en nuestras relaciones. Tampoco es que retiremos nuestro amor y nuestra solicitud, aunque a veces estas formas de desapegarnos pueden ser las mejores a seguir, por el momento.
De una manera ideal, desapegarnos es liberarnos o apartarnos de una persona o problema con amor. Mental, emocional y a veces físicamente nos desembarazamos de nuestro involucramiento insano (y a menudo doloroso) con la vida y responsabilidades de otra persona, y de los problemas que no podemos resolver.

Mi Reflexión: La vía más expedita, aunque laboriosa para dejar atrás la dependencia emocional o apego afectivo es el «Desapego». Este término no implica en modo alguno dejar de amar a la personas o personas con quienes estemos involucrados, sino empezar a desprendernos del envolvimiento afectivo que hemos desarrollado durante parte de nuestra vida. Desapegarse no es nada sencillo, cuesta proponérselo y más aún hacerlo. Solo usando este mecanismo estaremos liberándonos de esa necesidad de controlar e intervenir en la vida de las personas. (Alpha).

Te insto a responder estas preguntas: ¿Utilizas el desapego como mecanismo para liberarte de esa compulsión de control? ¿Estás en recuperación? Comparte acá tus vivencias.

Reflexión del Dia: 8 de Diciembre

Melody Beattie, en su Libro «Ya no seas Codependiente» reafirma que la codependencia es una patología porque la persona codependiente asume conductas y hábitos insanos que lo llevan a perder contacto con la realidad, se obsesiona por controlar a otros, en desmedro de su salud física y emocional.

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Reflexiona sobre esto:

Otra razón más por la que se le llama enfermedad a la codependencia es porque las conductas codependientes –como muchas conductas autodestructivas– se vuelven habituales. Repetimos los hábitos sin pensarlo. Los hábitos cobran vida propia.
Sea cual sea el problema que tenga la otra personal, la codependencia implica un sistema habitual de pensar, de sentir y de comportarnos hacia nosotros y hacia los demás que nos causa dolor. Las conductas o hábitos codependientes son autodestructivos. Con frecuencia reaccionamos a las personas que se autodestruyen; reaccionamos aprendiendo a autodestruirnos. Estos hábitos nos pueden conducir a, o mantenernos en, relaciones destructivas que no funcionan. Estas conductas pueden sabotear relaciones que en otras condiciones sí hubieran funcionado. Estas conductas pueden impedirnos encontrar la paz y la felicidad con la persona más importante en nuestra vida: uno mismo. Estas conductas pertenecen a la única persona que cada uno de nosotros puede controlar –a la única persona que podemos hacer cambiar– a uno mismo. Estos son nuestros problemas. En el siguiente capítulo examinaremos estas conductas.

Mi Reflexión: La codependencia esta caracterizada como enfermedad porque el codependiente asume hábitos y conductas que son autodestructivas. Sustenta sus relaciones en apego o dependencia emocional, pretendiendo vivir su vida a través de un control férreo hacia las demás personas. Esto lleva implícito desórdenes obsesivos que alteran la percepción de su realidad. (Alpha).

Contesta estas preguntas: ¿Eres un controlador compulsivo? ¿Has iniciado tu recuperación? Comenta acá tus experiencias al respecto.

Reflexión del Dia: 7 de Diciembre

Melody Beattie, en su Libro «Ya no seas Codependiente» reafirma que de todas las características de la codependencia resalta la reacción permanente ante cualquier evento.

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Reflexiona sobre esto:

«Los codependientes desean ayudar. Yo sospecho que han ayudado. Pero probablemente murieron pensando que no habían hecho demasiado y se sentían culpables.»
“Es natural que tratemos de proteger y de ayudar a las personas que nos importan. También es natural que nos afecten los problemas de la gente que nos rodea y que reaccionemos a ellos. A medida que un problema se vuelve más serio y permanece sin resolverse, más nos afecta y más reaccionamos hacia él.”
La palabra «reaccionar” es importante aquí. Sea como sea que nos aproximemos a la codependencia, como sea que la definamos, y sea cual fuere el marco de referencia que elijamos para diagnosticarla y para tratarla, la codependencia es primordialmente un proceso de reacción. Los codependientes son reaccionarios.
Reaccionan en exceso. Reaccionan demasiado poco. Pero rara vez actúan. Reaccionan a los problemas, las vidas, los dolores y las conductas de otros. Reaccionan a sus propios problemas, dolores y conductas. Muchas reacciones codependientes son reacciones al estrés. No es necesariamente anormal, pero resulta heroico y un auténtico salvavidas aprender a no reaccionar y a actuar de maneras más sanas. Sin embargo, la mayoría de nosotros necesitamos que se nos enseñe a hacerlo.

Mi Reflexión: La codependencia asumida como una enfermedad psico afectiva está mayormente sustentada en que el codependiente «reacciona» a todo evento, desde algo complejo hasta mínimo. Difícilmente resuelva algo reaccionando, pero vive en compulsión, pretendiendo resolver situaciones sin lograrlo. En eso merma su psiquis y su parte física se compromete. (Alpha).

Responde estas preguntas: ¿Eres un reaccionario permanente? ¿Cómo estás manejando tu problema de codependencia? ¿Has buscado ayuda profesional? Comparte aquí tus vivencias.

Reflexión del Dia: 6 de Octubre

Melody Beattie, en su Libro «Ya no seas Codependiente» refiere que los codependientes pasan su mayor tiempo responsabilizándose del cuidado de las otras personas, y todo esto evidencia una baja autoestima.

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Reflexiona sobre esto:

La necesidad imperiosa del codependiente de cuidar obsesivamente de la vida de los demás es como una prisión emocional que lo ata a relaciones tóxicas. En su afán por rescatar y controlar, el codependiente a menudo descuida su propia vida y bienestar. Esta necesidad de intervenir constantemente en la vida de los demás puede surgir de un deseo genuino de ayudar, pero con el tiempo se convierte en una carga insostenible que afecta negativamente su propia salud mental y emocional. La reflexión sobre esta necesidad de cuidar de los demás nos lleva a cuestionar nuestras motivaciones y nos invita a encontrar un equilibrio saludable entre el apoyo a los demás y el autocuidado. Al liberarnos de la obsesión por controlar la vida de los demás, podemos descubrir una mayor libertad, paz y la capacidad de construir relaciones más auténticas y enriquecedoras.

Te invito a responder estas interrogantes: ¿Te mantienes ocupado en cuidar a los otros? ¿Has pensado en iniciar tu recuperación para sanarte? Comenta acá tu vivencia.

Reflexión del Dia: 13 de Diciembre

Melody Beattie, en su Libro «Ya no seas Codependiente» reitera que hay una sola vía para alcanzar la independencia emocional y esta es el desapego.

Si deseas conocer mas sobre esta Autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esta vía.

Reflexiona sobre esto:

El desapego no es un alejamiento frío, hostil; no es una aceptación resignada y desesperante de todo aquello que la vida y la gente nos tire en el camino; no es una manera robótica de ir por la vida, absortos, y totalmente indiferente a la gente y a los problemas; no es una actitud de inocente dicha infantil; ni un desentendimiento de lo que son nuestras verdaderas responsabilidades hacia nosotros mismos y hacia los demás; ni una ruptura en nuestras relaciones. Tampoco es que retiremos nuestro amor y nuestra solicitud, aunque a veces estas formas de desapegarnos pueden ser las mejores a seguir, por el momento.
De una manera ideal, desapegarnos es liberarnos o apartarnos de una persona o problema con amor. Mental, emocional y a veces físicamente nos desembarazamos de nuestro involucramiento insano (y a menudo doloroso) con la vida y responsabilidades de otra persona, y de los problemas que no podemos resolver.

Mi Reflexión: Cuando comprendemos con claridad la importancia de dejar ir las preocupaciones y desórdenes por estar apegado a personas o sustancias, adquirimos conciencia plena que es la mejor herramienta para la recuperación. El codependiente tiene que asumir ese compromiso sincera y honestamente. Allí radica su misión primaria. (Alpha).

¿Estás intentando desapegarte? ¿Lo has logrado? Comenta acá. <

Reflexión del Dia: 10 de Diciembre

Melody Beattie, en su Libro «Ya no seas Codependiente» reafirma que la codependencia tiene salida si y sólo si el codependiente se compromete honestamente a seguir una recuperación continua, en la cual el desapego se utiliza como vía positiva para lograr su independencia efectiva.

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Reflexiona sobre esto:

El desapego no es un alejamiento frío, hostil; no es una aceptación resignada y desesperante de todo aquello que la vida y la gente nos tire en el camino; no es una manera robótica de ir por la vida, absortos, y totalmente indiferente a la gente y a los problemas; no es una actitud de inocente dicha infantil; ni un desentendimiento de lo que son nuestras verdaderas responsabilidades hacia nosotros mismos y hacia los demás; ni una ruptura en nuestras relaciones. Tampoco es que retiremos nuestro amor y nuestra solicitud, aunque a veces estas formas de desapegarnos pueden ser las mejores a seguir, por el momento.
De una manera ideal, desapegarnos es liberarnos o apartarnos de una persona o problema con amor. Mental, emocional y a veces físicamente nos desembarazamos de nuestro involucramiento insano (y a menudo doloroso) con la vida y responsabilidades de otra persona, y de los problemas que no podemos resolver.

Mi Reflexión: La vía más expedita, aunque laboriosa para dejar atrás la dependencia emocional o apego afectivo es el «Desapego». Este término no implica en modo alguno dejar de amar a la personas o personas con quienes estemos involucrados, sino empezar a desprendernos del envolvimiento afectivo que hemos desarrollado durante parte de nuestra vida. Desapegarse no es nada sencillo, cuesta proponérselo y más aún hacerlo. Solo usando este mecanismo estaremos liberándonos de esa necesidad de controlar e intervenir en la vida de las personas. (Alpha).

¿Utilizas el desapego como mecanismo para liberarte de esa compulsión de control? ¿Estás en recuperación? Comparte acá tus vivencias.

Reflexión del Dia: 8 de Diciembre

Melody Beattie, en su Libro «Ya no seas Codependiente» reafirma que la codependencia es una patología porque la persona codependiente asume conductas y hábitos insanos que lo llevan a perder contacto con la realidad, se obsesiona por controlar a otros, en desmedro de su salud física y emocional.

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Otra razón más por la que se le llama enfermedad a la codependencia es porque las conductas codependientes –como muchas conductas autodestructivas– se vuelven habituales. Repetimos los hábitos sin pensarlo. Los hábitos cobran vida propia.
Sea cual sea el problema que tenga la otra personal, la codependencia implica un sistema habitual de pensar, de sentir y de comportarnos hacia nosotros y hacia los demás que nos causa dolor. Las conductas o hábitos codependientes son autodestructivos. Con frecuencia reaccionamos a las personas que se autodestruyen; reaccionamos aprendiendo a autodestruirnos. Estos hábitos nos pueden conducir a, o mantenernos en, relaciones destructivas que no funcionan. Estas conductas pueden sabotear relaciones que en otras condiciones sí hubieran funcionado. Estas conductas pueden impedirnos encontrar la paz y la felicidad con la persona más importante en nuestra vida: uno mismo. Estas conductas pertenecen a la única persona que cada uno de nosotros puede controlar –a la única persona que podemos hacer cambiar – a uno mismo. Estos son nuestros problemas. En el siguiente capítulo examinaremos estas conductas.

Mi Reflexión: La codependencia esta caracterizada como enfermedad porque el codependiente asume hábitos y conductas que son autodestructivas. Sustenta sus relaciones en apego o dependencia emocional, pretendiendo vivir su vida a través de un control férreo hacia las demás personas. Esto lleva implícito desórdenes obsesivos que alteran la percepción de su realidad. (Alpha).

¿Eres un controlador compulsivo? ¿Has iniciado tu recuperación? Comenta acá tus experiencias al respecto.

Reflexión del Dia: 7 de Diciembre

Melody Beattie, en su Libro «Ya no seas Codependiente» reafirma que de todas las características de la codependencia resalta la reacción permanente ante cualquier evento.

Si deseas conocer mas sobre esta Autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esta vía.

Reflexiona sobre esto:

«Los codependientes desean ayudar. Yo sospecho que han ayudado. Pero probablemente murieron pensando que no habían hecho demasiado y se sentían culpables.»
“Es natural que tratemos de proteger y de ayudar a las personas que nos importan. También es natural que nos afecten los problemas de la gente que nos rodea y que reaccionemos a ellos. A medida que un problema se vuelve más serio y permanece sin resolverse, más nos afecta y más reaccionamos hacia él.”
La palabra «reaccionar» es importante aquí. Sea como sea que nos aproximemos a la codependencia, como sea que la definamos, y sea cual fuere el marco de referencia que elijamos para diagnosticarla y para tratarla, la codependencia es primordialmente un proceso de reacción. Los codependientes son reaccionarios.
Reaccionan en exceso. Reaccionan demasiado poco. Pero rara vez actúan. Reaccionan a los problemas, las vidas, los dolores y las conductas de otros. Reaccionan a sus propios problemas, dolores y conductas. Muchas reacciones codependientes son reacciones al estrés. No es necesariamente anormal, pero resulta heroico y un auténtico salvavidas aprender a no reaccionar y a actuar de maneras más sanas. Sin embargo, la mayoría de nosotros necesitamos que se nos enseñe a hacerlo.

Mi Reflexión: La codependencia asumida como una enfermedad psico afectiva está mayormente sustentada en que el codependiente «reacciona» a todo evento, desde algo complejo hasta mínimo. Difícilmente resuelva algo reaccionando, pero vive en compulsión, pretendiendo resolver situaciones sin lograrlo. En eso merma su psiquis y su parte física se compromete. (Alpha).

¿Eres un reaccionario permanente? ¿Cómo estás manejando tu problema de codependencia? Comparte aquí tus vivencias.

Reflexión del Dia: 6 de Octubre

Melody Beattie, en su Libro «Ya no seas Codependiente» refiere que los codependientes pasan su mayor tiempo responsabilizándose del cuidado de las otras personas, y todo esto evidencia una baja autoestima.

Si deseas conocer más sobre esta Autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esta vía.

Reflexiona sobre esto:

La necesidad imperiosa del codependiente de cuidar obsesivamente de la vida de los demás es como una prisión emocional que lo ata a relaciones tóxicas. En su afán por rescatar y controlar, el codependiente a menudo descuida su propia vida y bienestar. Esta necesidad de intervenir constantemente en la vida de los demás puede surgir de un deseo genuino de ayudar, pero con el tiempo se convierte en una carga insostenible que afecta negativamente su propia salud mental y emocional. La reflexión sobre esta necesidad de cuidar de los demás nos lleva a cuestionar nuestras motivaciones y nos invita a encontrar un equilibrio saludable entre el apoyo a los demás y el autocuidado. Al liberarnos de la obsesión por controlar la vida de los demás, podemos descubrir una mayor libertad, paz y la capacidad de construir relaciones más auténticas y enriquecedoras.

¿Te mantienes ocupado en cuidar a los otros? ¿Has pensado en iniciar tu recuperación para sanarte? Comenta acá tu vivencia.