Reflexión del Dia: 29 de Mayo

Melody Beattie, en su Libro Ya no seas Codependiente reitera que el codependiente, al moverse en ambientes tóxicos, debe ser honesto en evidenciar sus sentimientos, pero siempre cuidando de su seguridad.

Si deseas conocer mas sobre esta Autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esta vía.

Reflexiona sobre esto:

Como codependientes, a menudo perdemos contacto con nuestra parte emocional. A veces nos aislamos emocionalmente para evitar que nos aplasten. Ser vulnerable emocionalmente es peligroso. Se amontona una herida sobre otra, y a nadie parece importarle. Alejarse se vuelve la opción más segura. Nos vemos sobrecargados de dolor, de modo que hacemos cortocircuito para protegernos.
Podemos retiramos emocionalmente de cierta gente, de quienes pensamos que nos pueden herir. No confiamos en esas personas y ante ellas ocultamos nuestra parte emocional.
A veces nos sentimos obligados a retirar nuestras emociones. Los sistemas familiares que sufren los efectos del alcoholismo y de otros trastornos rechazan la honestidad emocional y a veces parecen demandar la deshonestidad. Consideremos nuestros intentos por explicarle a un borracho cómo nos sentimos cuando él o ella chocaron el coche, arruinando nuestra fiesta de cumpleaños, o vomitando en nuestra cama. Nuestros sentimientos pueden provocar reacciones incomodas en los otros, tales como la ira. Expresar nuestros sentimientos puede ser incluso peligroso para nuestro bienestar físico, porque esto bambolea el barco familiar.

Reflexión: Los sentimientos o las emociones son el lenguaje universal y deben de honrarse. Son la expresión auténtica de quién eres en lo más profundo de ti. (Judith Wright).

¿Sientes que puedes expresar abiertamente tus sentimientos? ¿Eres aceptado por los demás cuando eres sincera con respecto a esto? Comenta acá.

Reflexión del Dia: 18 de Mayo

Melody Beattie, en su Libro Ya no seas Codependiente reitera la necesidad que el codependiente asuma el control de su vida. Solo puede cambiarse a si mismo.Los demás deben asumir su propio cuidado.

Si deseas conocer más sobre esta Autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esta vía.

Reflexiona sobre esto:

Los codependientes nunca saben qué esperar, especialmente si están en cercana relación con un alcohólico, un drogadicto, un criminal, un jugador empedernido, o con cualquiera otra persona que tenga un problema serio o un trastorno compulsivo. Estamos bombardeados de problemas, pérdidas y cambio. Soportamos ventanas hechas añicos, citas a las que no se acude, promesas rotas, y francas mentiras. Perdemos nuestra seguridad económica, nuestra seguridad emocional, la fe en las personas que amamos, la fe en Dios, y la fe en nosotros mismos. Podemos perder nuestro bienestar físico, nuestros bienes materiales, nuestra capacidad para disfrutar del sexo, nuestra reputación, nuestra vida social, nuestra carrera, nuestro autocontrol, nuestra autoestima, y a nosotros mismos.
Algunos le perdemos el respeto y la confianza a la gente que amamos. A veces incluso perdemos el amor y nuestro compromiso con una persona que alguna vez amamos. Esto es común. Es una consecuencia natural, normal de la enfermedad.

Mi Reflexión: El codependiente apegado vive en continua zozobra tratando de intervenir en la vida de los demás, y abandona su propio cuidado. Debe revertir este escenario de autoabandono y entrar a interesarse por si mismo, asumiendo su propio cuidado. Iniciar esta tarea le da un respiro a su vida de sufrimiento y desazón que vive.(Alpha).

¿Te interesas mas por el cuidado de otros que por ti mismo? ¿Has pensado en buscar ayuda para desapegarte de lo que hace infeliz? Comparte tu experiencia aquí.

Reflexión del Dia: 7 de Mayo

Melody Beattie, en su Libro Ya no seas Codependiente refiere la actitud reaccionaria del codependiente, quien se deja llevar por cualquier situación para responder exageradamente.

Si deseas conocer mas sobre esta Autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esta vía.

Reflexiona sobre esto:

No tenemos que tomar las cosas tan a pecho (a nosotros mismos, a los eventos y a las otras personas). Sacamos las cosas fuera de toda proporción —nuestros sentimientos, pensamientos, acciones y errores—. Hacemos lo mismo con los sentimientos, pensamientos y acciones de otras personas. Nos decimos a nosotros mismos que las cosas son temibles, terribles, una tragedia y el fin del mundo. Muchas cosas pueden ser tristes, muy malas o desagradables, pero lo único que es el fin del mundo es el fin del mundo. Los sentimientos son importantes, pero son sólo sentimientos. Los pensamientos son importantes, pero son tan sólo pensamientos y todos pensamos en muchas cosas diferentes, y nuestros pensamientos están sujetos a cambio. Lo que hacemos y decimos es importante, lo que otros dicen y hacen es importante, pero el mundo no pende de ninguna fraseo acción en particular. Y si es particularmente importante decir o hacer algo, no nos preocupemos: sucederá. Aligérate. Date a ti mismo y a los demás espacio para moverse, para hablar, para ser lo que somos: humanos. Dale oportunidad a la vida para que las cosas se den solas. Date a ti mismo oportunidad para disfrutarlo.

Mi Reflexión: La persona codependiente tiene un temperamento explosivo y sucumbe ante cualquier situación por muy tonta que parezca. La mueve cualquier evento, estallando con enfado e ira ante los demás. Esa actitud reaccionaria le impide mantener vínculos efectivos y saludables con las personas a su alrededor. (Alpha).

¿Actúas con enfado ante cualquier evento? ¿Te has puesto a pensar qué ocasiona esa conducta? Comparte aquí.

Reflexión del Dia: 29 de Abril

Melody Beattie, en su Libro Ya no seas Codependiente recalca que todo codependiente busca afanosamente llegar a un grado de independencia para volver a decidir por sí mismo y asumir el verdadero rol de responsabilidad propia que le corresponde.

Si deseas conocer mas sobre esta Autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esta vía.

Reflexiona sobre esto:

La gente atrapada busca escapar. Los codependientes que se sienten varados en una relación pueden empezar a planear un escape. Algunas veces nuestra ruta de escape es positiva, saludable.
Podemos comenzar a dar pasos para volvernos no-dependientes, emocional y económicamente. “No-dependencia” es un término que Penélope Russianoff utiliza en su libro para describir ese equilibrio deseable por medio del cual reconocemos y satisfacemos la necesidad sana y natural que tenemos de la gente y del amor, sin que dependamos de manera envolvente y dañina de tal necesidad.
Podemos regresar a la escuela, conseguir un empleo, o fijarnos otras metas que nos den libertad. Y por lo general fijamos esas metas cuando estamos suficientemente hartos de estar atrapados. Algunos codependientes, sin embargo, planean escapes destructivos. Podemos tratar de escapar de nuestra prisión usando alcohol o drogas. Podemos volvemos fanáticos del trabajo. Podernos buscar un escape volviéndonos emocionalmente dependientes de otra persona que es como la persona de la que intentamos escapar, otro alcohólico, por ejemplo. Muchos codependientes comienzan a contemplar la vía del suicidio. Para algunos, terminar con su vida parece ser la única salida de esta situación terriblemente dolorosa.
La dependencia emocional y el sentirse atrapados también pueden provocar problemas en relaciones que podrían salvarse. Si estamos en una relación todavía buena, podemos ser demasiado inseguros para desapegamos y empezar a cuidar de nosotros mismos. Podemos extinguirnos y asfixiar o alejar a la otra persona. Esa necesidad extrema se vuelve obvia para los demás. Se puede sentir, percibir.¡

Mi Reflexión: El proceso de recuperación de la codependencia es enriquecedor para la persona con este padecimiento En este sendero espiritual va cambiando interiormente y asume un rol protagónico en cuanto a su cuidado y compromiso con su curación. Caminar hacia la «no-dependencia» es el reto. (Alpha).

¿Estás transitando el camino transformador de la recuperación? ¿Cuál es la percepción actual de tí mismo? Comparte aquí.

Reflexión del Dia: 27 de Abril

Melody Beattie, en su Libro Ya no seas Codependiente recalca la intolerancia del codependiente ante eventos a su alrededor, y como la ira y otras emociones negativas alteran su equilibrio mental y trastocan su serenidad y paz.

Si deseas conocer mas sobre esta Autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esta vía.

Reflexiona sobre esto:

Como codependientes, podemos estar temerosos de nuestra ira y de la de los demás, Quizá creemos en uno o en más mitos acerca de ella. O tal vez tengamos temor de la ira por otras razones. Alguien puede habemos pegado o abusado de nosotros cuando se encontraba enojado o enojada. Algunos podemos haberle pegado a alguien o haber abusado de él cuando estábamos enojados. En ocasiones simplemente el nivel de energía que acompaña a la ira puede ser atemorizante, especialmente si esa persona está ebria.
Reaccionamos a la ira, tanto a la propia como a la de los demás. Es una emoción provocadora. Puede ser contagiosa. Y muchos de nosotros reaccionamos a ella. Tenemos mucha de la ira que acompaña a la pena, al dolor. Tenemos la ira que proviene de la etapa de persecución, del rescate o del cuidar de los demás. Muchos de nosotros estamos varados en esa esquina del triángulo. Tenemos sentimientos de ira irracionales sin justificación que pueden deberse a un pensamiento de reacción de tipo desastroso: los deberia de, los qué horror, los nuncas y los siempres. Tenemos ira justificada, todos los sentimientos locos que cualquiera sentiría si alguien le hubiera hecho eso a él o a ella. Tenemos la ira que manifiesta cómo nos sentimos cuando hemos sido lastimados o tenemos miedo. Los sentimientos de temor y de tristeza se convierten en ira, y muchos de nosotros hemos sido muy lastimados y hemos tenido mucho miedo.
Tenemos la ira que proviene de sentirnos culpables. Los sentimientos de culpa tanto los genuinos como los que no merecemos, fácilmente se convierten en ira. Los codependientes también tienen mucho de ello. Y, créanlo o no, lo mismo es aplicable a los alcohólicos. Sólo que estos son más propensos a convertirlos en ira.
Y también tenemos ira reactiva. Nos enojamos porque la otra persona está enojada. Luego ella se enoja aún más, y nosotros aumentamos el enojo porque ella se enojó más. Pronto todo mundo está enojado, y nadie sabe bien a bien por qué. Pero todos estamos fuera de sí y nos sentimos culpables por ello.
A veces preferimos permanecer enojados. Nos ayuda a sentirnos menos vulnerables y más poderosos. Es como un escudo protector. Si estamos enojados, no nos sentiremos lastimados o temerosos, por lo menos no se nos notará.
Tristemente, muchos de nosotros no tenemos a dónde ir con toda esa ira. Nos la tragamos, nos mordemos la lengua, sacamos el pecho, la lanzamos a nuestro estómago, la dejamos zumbar en nuestra cabeza, escapamos de ella, le damos medicamentos, o le damos una galleta. Nos culpamos a nosotros mismos, convertimos la ira en depresión, nos metemos en cama, tenemos la esperanza de que nos muramos, y nos enfermamos a causa de ello. Finalmente le pedimos a Dios que nos perdone por ser una persona tan horrible o por sentir ira en primer lugar.

Mi Reflexión: Se caracteriza al codependiente como «reaccionario». Esto significa que es una persona que vive a la defensiva siempre. Esta conducta autodestructiva obstaculiza sus logros personales y profesionales, de allí la importancia de aprender el manejo de la ira y otras emociones negativas. Solo en Terapia de Doce Pasos de CoDA podrá transitar un camino que lo moldee espiritualmente y crea en el como persona. (Alpha).

¿Eres una persona que maneja reacciones de ira? ¿Cuáles herramientas usas para modificar esa actitud? Comenta acá.

Reflexión del Dia: 25 de Abril

Melody Beattie, en su Libro Ya no seas Codependiente plantea que el codependiente por su problema obsesivo tiene dificultad para mantener armonía en sus relacione personales.

Si deseas conocer mas sobre esta Autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esta vía.

Reflexiona sobre esto:

La dependencia emocional y el sentirse atrapados también pueden provocar problemas en relaciones que podrían salvarse. Si estamos en una relación todavía buena, podemos ser demasiado inseguros para desapegamos y empezar a cuidar de nosotros mismos. Podemos extinguirnos y asfixiar o alejar a la otra persona. Esa necesidad extrema se vuelve obvia para los demás. Se puede sentir, percibir.
En última instancia, la dependencia excesiva de otra persona puede matar el amor. Las relaciones que se basan en inseguridad emocional y en una necesidad, en vez de sustentarse en el amor, pueden volverse autodestructivas. No funcionan. Una necesidad demasiado grande aleja a la gente y extingue el amor. Asusta a la gente y hace que se vaya. Atrae a la gente equivocada. Y no satisface nuestras verdaderas necesidades.
Nuestras necesidades reales se hacen cada vez mayores, al igual que nuestra desesperación. Fijamos nuestra vida en torno a esta persona, tratando de proteger así nuestra fuente de seguridad y de felicidad. Abdicamos a vivir nuestra propia vida al hacer esto. Y sentimos ira contra esa persona. Somos controlados por ella. Dependemos de esa persona.

Mi Reflexión: El codependiente con su relación obsesiva con los demás interfiere todo vinculo saludable de amor. No esta preparado para dar y recibir amor. Debe «reaprender» y ello es laborioso, solo con Terapia lo lograra. (Alpha).

¿Mantienes relaciones armónicas con los demás? ¿Cómo haces cuando detectas distanciamiento? Comparte aquí.

Reflexión del Dia: 18 de Abril

Melody Beattie, en su Libro Ya no seas Codependiente refiere que la persona codependencia, atendida a tiempo, puede recuperarse.

Si deseas conocer más sobre esta Autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esta vía.

Reflexiona sobre esto:

Ya sea que los codependientes parezcan frágiles y desvalidos o resueltos y poderosos, la mayoría son niños asustados, necesitados, vulnerables, que dolorosa y desesperadamente buscan que se les ame y se les cuide.
Este niño en nuestro interior cree que no somos dignos de ser amados y que nunca encontraremos el consuelo que buscamos; a veces esta criatura vulnerable siente demasiada desesperación. La gente nos ha abandonado, emocional y físicamente. La gente nos ha rechazado. La gente ha abusado de nosotros, nos ha hecho a un lado. La gente nunca ha estado ahí cuando la hemos necesitado; no ha visto, escuchado o respondido a nuestras necesidades. Podemos llegar a creer que la gente nunca estará ahí cuando la necesitamos. Para muchos de nosotros, hasta Dios parece haberse retirado.
Nosotros hemos estado ahí cuando tantos otros nos han necesitado. La mayoría de nosotros quiere desesperadamente que alguien por fin esté ahí cuando le necesitemos. Necesitamos a alguien, a quien sea, que nos rescate de la helada soledad, del aislamiento y del dolor. Queremos de lo bueno, y lo bueno no está dentro de nosotros mismos. Dentro tenemos dolor Nos sentimos tan desvalidos y desconcertados. Los otros se ven tan poderosos y seguros. Concluimos que algo de magia hay en ellos.
De modo que nos volvemos dependientes de ellos. Podemos volvernos dependientes de nuestros amantes, cónyuges, amigos, parientes o de nuestros hijos. Nos volvemos dependientes de su aprobación. Nos volvemos dependientes de su presencia. Nos volvemos dependientes de la necesidad que tienen de nosotros.
Nos volvemos dependientes de su amor, aun cuando creemos que nunca recibimos su amor; creemos que no somos dignos de ser amados y que nadie nos ha amado nunca de una manera que satisfaga nuestras necesidades.

Mi Reflexión: El codependiente actúa de manera solidaria y bondadosa con los demás. Es un excelente acompañante y cuidador. Solo que esa conducta se va transformando en apego al paso del tiempo, hasta llegar a comprometerse demasiado en la vida de las personas de su entorno. Detectar a tiempo estas conductas obsesivas- compulsivas puede hacer que se le brinde ayuda para salir de ese problema que solo va a menoscabar su salud. (Alpha).

¿Has detectado que asumes conductas destructivas para ti? ¿Has buscado ayuda en grupos de CoDA? Comparte aquí tu experiencia.

Reflexión del Dia: 13 de Abril

Melody Beattie, en su Libro Ya no seas Codependiente refiere que el codependiente pretendiendo dominar a los demás, se convierte en ser controlado por los otros.

Si deseas conocer más sobre esta Autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esta vía.

Reflexiona sobre esto:

La mayoría de los codependientes son reaccionarios. Reaccionamos con ira, culpa, vergüenza, odio a nosotros mismos, preocupación, sentimientos heridos, gestos controladores, acciones solícitas, depresión, desesperación y furia. Reaccionamos con miedo y ansiedad. Algunos de nosotros reaccionamos tanto que nos resulta doloroso estar cerca de la gente, y torturante encontrarnos dentro de un grupo grande de personas. Es normal reaccionar y responder a nuestro medio ambiente. Reaccionar es parte de la vida. Es parte de interactuar, es parte de ser humano y de estar vivo. Pero nos permitimos irritamos tanto y distraernos tanto. Pequeñeces, cosas mayores —lo que sea— tienen el poder de descarrilarnos. Y nuestra respuesta después de que reaccionamos a menudo no es la que más nos conviene.
Podemos haber empezado a reaccionar y a responder urgente y compulsivamente con patrones que nos lastiman. El solo hecho de sentir urgencia y compulsión es suficiente para herirnos. Nos mantenemos en un estado de crisis, fluyendo la adrenalina y tensos los músculos, listos para reaccionar ante emergencias que generalmente no son tales. Alguien hace algo, de modo que nosotros debemos hacer algo a la vez. Alguien se siente de determinada manera de modo que nosotros debemos sentirnos de otra determinada manera. BRINCAMOS DENTRO DEL PRIMER SENTIMIENTO QUE NOS ATRAVIESA Y LUEGO NOS EMPANTANAMOS EN ÉL. Pensamos en el primer pensamiento que cruza por nuestra cabeza y luego elucubramos sobre él. Decimos lo primero que nos viene a la lengua y a veces nos arrepentimos. Hacemos lo primero que nos viene a la mente, generalmente sin pensarlo. Ese es el problema: reaccionamos sin pensar, sin haber pensado honestamente lo que necesitamos hacer y cómo queremos manejar la situación. Nuestras emociones y conductas controladas —disparadas— por cualquier persona o cosa en nuestro entorno.
Indirectamente estamos permitiendo que los demás nos digan qué hacer. Eso significa que hemos perdido el control. Estamos siendo controlados.

Mi Reflexión: El codependiente mantiene una actitud reaccionaria ante cualquier evento por muy mínimo que sea. Explota con ira, angustia, miedo, producto de sentimientos de vergüenza y culpa.Estas emociones le dominan y eso significa que está siendo controlado por los demás, él es una persona controlado, se invirtieron los roles. (Alpha).

¿Estás reaccionando bruscamente ante cualquier situación? ¿Cómo controlas esa situación? Comparte aquí.

Reflexión del Dia: 3 de Abril

Melody Beattie, en su Libro Ya no seas Codependiente ratifica que el codependiente esta inconsciente de la seriedad de su trastorno obsesivo, y cree estar bien en lo físico, emocional y espiritual.

Si deseas conocer mas sobre esta Autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esta vía.

Reflexiona sobre esto:

Podemos haber empezado a reaccionar y a responder urgente y compulsivamente con patrones que nos lastiman. El solo hecho de sentir urgencia y compulsión es suficiente para herirnos. Nos mantenemos en un estado de crisis, fluyendo la adrenalina y tensos los músculos, listos para reaccionar ante emergencias que generalmente no son tales. Alguien hace algo, de modo que nosotros debemos hacer algo a la vez. Alguien se siente de determinada manera de modo que nosotros debemos sentirnos de otra determinada manera. BRINCAMOS DENTRO DEL PRIMER SENTIMIENTO QUE NOS ATRAVIESA Y LUEGO NOS EMPANTANAMOS EN ÉL. Pensamos en el primer pensamiento que cruza por nuestra cabeza y luego elucubramos sobre él. Decimos lo primero que nos viene a la lengua y a veces nos arrepentimos. Hacemos lo primero que nos viene a la mente, generalmente sin pensarlo. Ese es el problema: reaccionamos sin pensar, sin haber pensado honestamente lo que necesitamos hacer y cómo queremos manejar la situación. Nuestras emociones y conductas controladas —disparadas— por cualquier persona o cosa en nuestro entorno. Indirectamente estamos permitiendo que los demás nos digan qué hacer. Eso significa que hemos perdido el control. ¡Estamos siendo controlados!

Mi Reflexión: El codependiente para sanar definitivamente debe dejar atrás ese círculo vicioso de «control-dolor» que lo ha acompañado toda su vida. Sincerarse con el mismo, y asumir una terapia que ciertamente lo conduzca a su mejoría y recuperación. (Alpha).

¿Sigues perdiendo el control ante situaciones que te rebasan? ¿Estás en terapia de CoDA? Comenta acá.

Reflexión del Dia: 30 de Marzo

Melody Beattie, en su Libro Ya no seas Codependiente refiere que todo codependiente debe entender la necesidad de cambiar los hábitos autodestructivos de dependencia afectiva.

Si deseas conocer mas sobre esta Autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esta vía.

Reflexiona sobre esto:

Otros pueden haber interpretado sus creencias religiosas como un mandato divino de cuidar a los demás. Dad con alegría, se nos dice. Ama a tu prójimo, y tratamos de hacerlo. Tratamos con empeño.
Tratamos con demasiado empeño. Y luego nos preguntamos qué nos pasa y por qué nuestras creencias cristianas no funcionan. Nuestras vidas tampoco están funcionando.
Las creencias cristianas funcionan perfectamente. Tu vida puede funcionar igual de bien. Lo que no funciona es el rescate. “Es como tratar de atrapar mariposas con un palo de escoba”, me decía una amiga. El rescate nos deja confundidos y perplejos cada vez que lo hacemos. Es una reacción autodestructiva, otra manera por medio de la cual los codependientes se apegan a la gente y se desapegan de sí mismos. Es otra forma de tratar de controlar, pero en vez de conseguirlo resultamos controlados por la gente. Ser cuidador es una relación padre-hijo poco sana, a veces entre dos adultos complacientes, a veces entre un adulto y un niño.
El cuidar despierta la ira. Los cuidadores se vuelven padres iracundos, amigos iracundos, amantes iracundos. Podemos volvernos cristianos insatisfechos, frustrados y confundidos. Las personas a quienes ayudamos son o se convierten en víctimas desvalidas y enojadas. Los cuidadores se vuelven víctimas.

Mi Reflexión: La necesidad del codependiente de cuidar a los demás le trae problemas a su vida. Es relevante introducir esos cambios de actitud para soltar esa dependencia emocional. (Alpha).

¿Estás recuperándote de la codependencia? ¿Has logrado soltar la dependencia emocional? Comparte acá.