Reflexión del Dia: 24 de Mayo



Siento que el desapego puede volverse una respuesta habitual, de la misma manera que obsesionarse, preocuparse y ser controladores se han vuelto respuestas habituales en la práctica. Podremos no hacerlo perfectamente. Sin embargo, y al ritmo que sea, podemos practicar el desapego en nuestras vidas, y creo que eso es bueno para nosotros. Espero que puedan ser capaces de desapegarse con amor de la persona o de las personas de quienes se están desapegando. Creo que es mejor hacerlo todo con una actitud de amor. Sin embargo, por una multitud de razones, no siempre podemos hacerlo así. Si no puedes desapegarte con amor, en mi opinión es preferible desapegarse con enojo que permanecer apegados. Si nos desapegamos, estamos en una mejor posición para trabajar sobre (o a través) de nuestras resentidas emociones. Si estamos apegados, probablemente no hagamos nada más que estar siempre irritados.
¿Cuándo debemos desapegarnos? Cuando no podamos dejar de pensar, de hablar acerca de o de preocuparnos por alguien o por algo; cuando nuestras emociones estén en constante ebullición; cuando sintamos que tenemos que hacer algo acerca de alguien porque ya no podemos soportar la situación ni un minuto más; cuando estamos colgando de un hilo y sentimos que tal hebra está a punto de romperse; y cuando creemos que ya no podemos seguir viviendo con el problema con el que hemos estado tratando de vivir. ¡Es tiempo de desapegarnos! Aprenderán a reconocer cuándo es aconsejable desapegarse. Una buena regla a seguir es esta: cuando más necesitas desapegarte es cuando esto parece ser lo más lejano o lo menos posible de hacer.

(Melody Beattie de su Libro Ya No seas Codependiente).
desapego de chopra1

Meditación 24 de Mayo … Deja que fluyan los ciclos



La vida es cíclica, no estática. Nuestras relaciones se benefician cuando les permitimos que fluyan de acuerdo con sus propios ciclos naturales.
Como las altas y bajas de la marea, así son los ciclos dentro de las relaciones. Tenemos periodos de cercanía y periodos de distanciamiento. Tenemos momentos para estar juntos y momentos para separarnos y trabajar en cuestiones individuales.
Tenemos momentos de amor y alegría, y momentos de enojo. A veces, las dimensiones de las relaciones cambian cuando nosotros atravesamos por cambios. A veces, la vida nos trae nuevos amigos o a otro ser amado para que nos enseñe la siguiente lección.
Eso no significa que los viejos amigos desaparezcan para siempre, significa que hemos entrado en un nuevo ciclo. No tenemos por qué controlar el curso de nuestras relaciones, sean éstas amistades o relaciones amorosas. No tenemos que satisfacer nuestra necesidad de control imponiendo a las relaciones una forma
estática.
Déjalas fluir. Permanece abierto a los ciclos. El amor no desaparecerá. El vínculo con los amigos no se romperá. Las cosas no permanecerán igual para siempre, especialmente cuando estamos creciendo y cambiando a un ritmo tan rápido. Confía en la corriente. Cuida de ti mismo, pero permanece dispuesto a dejar ir a la gente. Aferrarse a ella la hará desaparecer.
El viejo adagio acerca del amor sigue siendo cierto: «Si está destinado a ser, será. Y si amas a alguien, déjalo ir. Si regresa, es que era tuyo».
«Hoy acepto la naturaleza cíclica de la vida y las relaciones. Lucharé por ir con la corriente. Lucharé por la armonía entre mis propias necesidades y las necesidades de la otra persona».

(Melody Beattie de su Libro El Lenguaje del Adiós).