Reflexion del Dia: 22 de Agosto


Melody Beattie, en su Libro «Ya no seas Codependiente» reflexiona sobre los actos de bondad que debemos asumir con nuestro prójimo, y si bien es hermoso desprenderse practicando la caridad humana, es cierto que fijar límites al respecto es necesario. Plantea que nuestra conducta desprendida puede acarrearnos problemas económicos, por ello debemos ser cuidadosos a la hora de dar nuestra ayuda.

Si deseas conocer mas sobre esta Autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esta vía.

Reflexiona sobre esto:

Creo que Dios quiere que ayudemos a la gente y que compartamos nuestro tiempo, talento y dinero. Pero creo también que Él quiere que demos desde una posición de alta autoestima Creo que los actos de amabilidad no son amables a menos que nos sintamos bien con nosotros mismos, con lo que estamos haciendo y con la persona para la cual estarnos haciéndolo. Creo que Dios está en cada uno de nosotros y que nos habla a cada quien. Si no podemos sentirnos bien en absoluto acerca de algo que estamos haciendo, entonces no debemos hacerlo, no importa cuán caritativo parezca ser. Tampoco debemos hacer por los demás las cosas que ellos deben y son capaces de hacer por sí mismos. Los demás no son inválidos. Nosotros tampoco. “Dios no dijo que perdiéramos nuestras vidas. Nos dijo que diéramos a la gente”.

Mi Reflexión: Dios pide que seamos bondadosos y caritativos, pero para los codependientes, quienes estamos acostumbrados a tener poca responsabilidad sobre nuestras finanzas, este acto de amor debe ser bien pensado. Evitemos que algunas personas se aprovechen de nuestro «buen corazón» para desestabilizarnos económicamente. La caridad debe salir desde dentro y hacernos sentir a gusto con lo que hacemos. No es meramente por darle gusto a la gente, sino porque lo deseemos hacer nosotros y seamos felices haciéndolo. (Alpha).

¿Has vivido experiencia con dar a los demás? ¿Han abusado de tu confianza? Deseas compartir tus experiencias sobre este aspecto. Haz tus comentarios aquí.

Meditación 11 de Agosto… Curación


Melody Beattie, en su Libro El Lenguaje del Adiós ratifica que el codependiente debe considerar la recuperación como única vía para sanar de la codependencia.

Si deseas conocer más sobre esta Autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esa vía.

Medita sobre esto:

Deja que la energía de la curación fluya a través de tu cuerpo.
La energía curativa de Dios, del universo, de la vida y de la recuperación nos rodea. Está a nuestra disposición, esperando a que la atraigamos, esperando a que la extraigamos. Está esperando en nuestras reuniones o grupos, en las palabras de una plegaria que se murmura, en un gesto gentil, en una palabra y un pensamiento positivo. La energía curativa está en el sol, en el viento, en la lluvia, en todo lo que es bueno.
Deja que venga la energía curativa. Atraelo. Acéptala. Déjala que te empape. Respira la luz dorada. Exhala. Deja ir el miedo, la ira, el dolor, la duda. Deja que la energía curativa fluya hacia ti, a través de ti.
Es tuya si la pides, si crees en ella.

«Hoy pediré y aceptaré la energía curativa de Dios y del universo. La dejaré fluir hacia mí, a través de mí, y que regrese a los demás. Yo soy parte del ciclo continuo de curación, y uno con él.»

Mi Reflexión: El codependiente debe tener fe y confianza que la recuperación es posible y debe aceptar esa realidad como parte de su sanación. (Alpha).

¿Estás en recuperación? ¿Te entregas a la guía del poder superior para sanar? Comenta tus vivencias acá.

Reflexión del Dia: 10 de Agosto


Melody Beattie, en su Libro «Ya no seas Codependiente» ratifica la necesidad de asumir la responsabilidad de su propio cuidado.

Si deseas conocer mas sobre esta Autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esta vía.

Reflexiona sobre esto:

Descubre qué necesitas hacer para cuidar de ti mismo. Toma tus decisiones basándote en la realidad y tómalas en un estado de ánimo apacible. ¿Necesitas pedir disculpas? ¿Quieres olvidarte del asunto? ¿Necesitas hablar con alguien de corazón a corazón? ¿Necesitas tomar otra decisión para cuidar de ti mismo? Cuando tomes tu decisión ten en mente cuáles son tus responsabilidades. No tienes la responsabilidad de que los otros “vean la luz” y no necesitas “enderezarlos”. Tienes la responsabilidad de ayudarte a ti mismo a ver la luz y de enderezarte. Si no te sientes en paz con alguna decisión, olvídala. No es tiempo para tomarla todavía. Espera hasta que tu mente esté consistente y tus emociones estén tranquilas.
Cálmate. No necesitas sentirte tan asustado. No necesitas sentirte tan frenético. Mantén las cosas en perspectiva. ¡Hazte la vida más fácil!

Mi Reflexión: El codependiente asume posiciones y conductas que le envuelven en una trama de desesperación y angustia permanente. Para salir de ese caos debería estar sereno y calmado, centrando su atención en la paz que viene de la divinidad. (Alpha).

¿Cómo actúas en momentos de angustia? ¿Logras serenarte o por el contrario, te exasperas más? Comparte tus vivencias al respecto.

Meditación 10 de Agosto… Desapegarse con amor


Melody Beattie, en su Libro El Lenguaje del Adiós plantea que la persona codependiente esta apegada afectivamente a eventos, personas, A eso se acostumbra y le resulta difícil desapegarse de lo que le hace sentir mal.

Si deseas conocer mas sobre esta Autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esa vía.

Medita sobre esto:

Algunas veces las personas que amamos hacen cosas que no nos gustan o que no aprobamos. Nosotros reaccionamos Ellos reaccionan. En poco tiempo, todos estamos reaccionando el uno al otro, y el problema se intensifica.
¿Cuándo nos separamos? Cuando estamos atrapados en una reacción de ira, miedo, culpa o vergüenza. Cuando nos enganchamos en un juego de poder: un intento de controlar u obligar a otros a hacer algo que no quieren hacer. Cuando la forma en que reaccionamos no es ayudar a la otra persona ni resolver el problema. Cuando la forma en que reaccionamos nos está lastimando.
A menudo, es hora de separarse cuando el desprendimiento parece ser lo menos probable o posible de hacer.
El primer paso hacia el desapego es comprender que reaccionar y controlar no ayudan. El siguiente paso es lograr la paz: centrarse y restablecer el equilibrio.
Dar un paseo. Dejar la habitación. Ir a una reunión. Toma un baño largo y caliente. Llamar a un amigo. Llama a Dios. Respira profundamente. Encontrar paz. Desde ese lugar de paz y centro emergerá una respuesta, una solución.

«Hoy, me rendiré y confiaré en que la respuesta está cerca».

Mi Reflexión: El codependiente se mantiene pendiente de la vida de los demás. Eso pasa a ser la razón de su existencia. Si las personas que le rodean y representan afectivamente algo para el, asumen determinadas conductas trata de alinearse con las reacciones de esas personas. No soporta estar lejos de quienes ama, mejor dicho, a quienes controla y manipula pretendiendo ilusoriamente que va a cambiarlos. (Alpha).

¿Vives pendiente de los demás y eso te controla? ¿Continuas con la ilusión de cambiar sus vidas? Comparte aquí tus vivencias.

Meditación 9 de Agosto… Práctica un acto de gratitud

Melody Beattie, en su Libro El Lenguaje del Adiós ratifica el agradecimiento que debe asumirse con ese Poder Superior que nos provee y satisface nuestras necesidades.

Si deseas conocer mas sobre esta autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esa vía.

Medita sobre esto:

Ninguno de nuestros éxitos llega sin la ayuda de otros. Una y otra vez, parece que hay alguien parado en la encrucijada esperándonos, señalando el camino con el corazón. Pueden ser amigos, familiares, ministros o mentores, o incluso oficiales de policía o jueces. Creo que podrían ser ángeles enviados para ayudarnos a atravesar esos momentos difíciles y señalarnos de nuevo al camino con el corazón.
Están en el lugar correcto en el momento adecuado con las palabras exactas y la ayuda que necesitamos. ¿Les has dado las gracias por estar allí?
Práctica un acto de gratitud. Encuentra una de tus luces, guía o ángeles de la guarda, y dile a esa persona lo que él o ella significaron para ti en tu vida. Es posible que tus guías ni siquiera se den cuenta del impacto que tuvieron en ti. Y quién sabe si tus amables palabras pueden ser solo la luz que necesitan hoy para empujarlas suavemente en su camino con el corazón.
Luego, da un paso más. Asume la actitud amable y afectuosa que te hicieron o te transmitieron a otra persona.

«Dios, recuérdame dar gracias donde se deba hacer».

Mi Reflexión: Mostrar Gratitud es uno de los comportamientos más encomiables para Dios. Significa que agradecemos lo que somos, tenemos y vamos a lograr. Esa actitud positiva abre las puertas de la abundancia. (Alpha).

¿Eres una persona agradecida con la Divinidad? Comenta acá.

Meditación 5 de Agosto… Sentimientos y rendición


Melody Beattie, en su Libro El Lenguaje del Adiós reitera que el codependiente tiene la necesidad imperiosa de concientizar que solo a través de la guía divina puede salir de ese desierto permanente lleno de problemas físicos, psíquicos y espirituales. Ratifica que el sometimiento a la Divinidad es imperioso para tener paz interior.

Si deseas conocer más sobre esta autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esa vía.

Medita sobre esto:

Rendirse es una experiencia altamente personal y espiritual.
La rendición no es algo que podamos hacer en nuestras cabezas. No es algo que podamos forzar o controlar por la fuerza de voluntad. Es algo que experimentamos.
La aceptación, o rendición, no es un paquete ordenado. A menudo, es un paquete lleno de resentimientos: ira,tristeza, seguidos de alivio. A medida que nos rendimos, experimentamos nuestra frustración e ira contra Dios, contra otras personas, contra nosotros mismos y ante la vida. Luego llegamos al corazón del dolor y la tristeza, la pesada carga emocional que debe surgir antes de que podamos sentirnos bien. A menudo, estas emociones están conectadas con la curación y la liberación en un nivel profundo.
El sometimiento pone las ruedas en movimiento. Nuestro miedo y ansiedad sobre el futuro se liberan cuando nos rendimos.
Estamos protegidos, somos guiados. Se han planeado cosas buenas. El próximo paso ahora está siendo tomado. La rendición es el proceso que nos permite avanzar. Así es como nuestro Poder Superior nos mueve hacia adelante.
Confíe en la exactitud del tiempo y la libertad en el otro extremo, mientras lucha humanamente a través de esta experiencia espiritual.

«Estaré abierto al proceso de rendición en mi vida. Me permitiré todas las emociones torpes y potentes que deben ser liberadas».

Mi Reflexión: El codependiente atraviesa un desierto de tribulación y penas. Vive pendiente de los demás, y poco o nada de si mismo. Cuando llega a darse cuenta que ha perdido tiempo y vida de cuidarse y buscar la tranquilidad y paz espiritual, se enfrenta a una realidad cruda. Entregarse a la guía divina se le enseña en el caminar de un sendero espiritual que constituye la recuperación con la terapia en Doce Pasos CoDA, es allí donde aprende que someterse a su poder superior es la solución a tantísimas dificultades emocionales y espirituales que enfrenta. (Alpha).

¿Estás atravesando un desierto de problemas que hacen tu vida ingobernable? ¿Asistes a Terapia Doce Pasos de CoDA? Comenta acá.

Reflexión del Dia: 30 de Julio

Melody Beattie, en su Libro Ya no seas Codependiente reitera que tenemos un magnífico aliado para salir de esta vida tormentosa que vivimos como codependientes. Ese aliado es nuestro poder superior. A el podemos entregar las cargas. Contribuyendo nosotros en recuperarnos, lo demás dependerá de ese tránsito espiritual que es la Terapia Doce Pasos de CoDA.

Si deseas conocer más sobre esta Autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esta vía.

Reflexiona sobre esto:

También podemos depender de Dios. Él está con nosotros y a Él le importamos. Nuestras creencias espirituales nos pueden dar una fuerte sensación de seguridad emocional.
Permítanme ilustrar esta idea, Una noche, cuando vivía en un vecindario violento, tuve que caminar por el callejón de atrás de mi casa para subirme a mi coche. Le pedí a mi esposo que me viera desde una ventana del segundo piso para asegurarse de que nada me pasara. Estuvo de acuerdo. Mientras caminaba por el patio posterior, lejos de la seguridad de mi hogar y en !o negro de la noche, empecé a sentir miedo. Me volteé y vi a mi esposo en la ventana. Me estaba cuidando. Estaba ahí, Inmediatamente me abandonó el miedo, y me sentí consolada y a salvo. Sucede que creo en Dios, y que encuentro el mismo sentimiento de consuelo y de seguridad al saber que Él siempre cuida de mi vida. Me empeño en buscar esta seguridad.
Algunos codependientes empiezan a creer que Dios nos ha abandonado. Hemos sufrido tanto. Tenemos tantas necesidades insatisfechas, a veces por tanto tiempo que nos lamentamos: “¿A dónde se ha ido Dios? ¿Por qué se ha ido? ¿Por qué Él ha permitido que esto suceda? ¿Por qué no quiere ayudar? ¿Por qué me ha abandonado?” Dios no nos ha abandonado. Nosotros nos hemos abandonado a nosotros mismos.
Él está ahí, y a Él le importamos. Pero Él espera que nosotros cooperemos cuidando de nosotros mismos.

Mi Reflexión: No hay nada más positivo que tener la certeza y fe de que Dios está Obrando en nuestra vida dándonos guía y provisión para cubrir nuestras necesidades materiales y espirituales. Cuando manejamos esta idea con convicción todo va a fluir de manera inesperada, pero saludable. (Alpha).

¿Confías en la guía y provisión divina? ¿Has tenido experiencias al respecto? Comparte aquí.

Meditación 30 de Julio… Controlar o Confiar


Melody Beattie, en su Libro El Lenguaje del Adiós ratifica que el codependiente pasa por etapas muy difíciles. Siente hasta temor de vivir. Esta sensación negativa se minimiza cuando confía fielmente en la divinidad como nuestro proveedor permanente.

Si deseas conocer mas sobre esta Autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esa vía.

Medita sobre esto:

Hubo un momento en mi vida en que me sentí tan asustado y abrumado por el acto de vivir que realmente quería hacer un calendario para cada día de mi vida durante los próximos cinco años. Quería incluir todas las tareas que tenía que hacer, cuando las haría, incluso cuando programara la relajación. Quería ordenar algo que me resultaba abrumador. Quería sentir que tenía el control. (ANÓNIMO).

El control es una respuesta directa a nuestro miedo, pánico y sensación de impotencia. Es una respuesta directa a sentirse abrumado y desconfiar.
No podemos confiar en nosotros mismos, nuestro Poder Superior, el Plan, el Universo o el proceso de la vida. En lugar de confiar, volvemos al control.
Podemos abordar esta necesidad de control tratando con nuestro miedo. Nos ocupamos del miedo confiando en nosotros mismos, nuestro Poder Superior, el amor y el apoyo del Universo, el Plan y este proceso que llamamos vida y recuperación.
Podemos confiar en que cuando las cosas no salen como queremos, Dios tiene algo mejor planeado.
Podemos confiar en nosotros mismos para llegar a donde necesitamos ir, decir lo que tenemos que decir, hacer lo que tenemos que hacer, saber lo que necesitamos saber, ser lo que necesitamos ser, y convertirnos en todo lo que podemos ser, cuando estamos destinado a hacer eso, cuando estemos listos, y cuando sea el momento adecuado.
Podemos confiar en nuestro Poder Superior y el Universo para que nos den la dirección que necesitamos.
Podemos confiar en nosotros mismos para escuchar y responder, en consecuencia.
Podemos confiar en que todo lo que necesitamos en este viaje vendrá a nosotros. No obtendremos todo lo que necesitamos para todo el viaje de hoy. Hoy recibiremos los suministros de hoy y los suministros de mañana mañana. Nunca tuvimos la intención de llevar suministros para todo el viaje. La carga sería demasiado pesada, y el camino estaba destinado a ser ligero.
Confía en ti mismo. No tenemos que planificar, controlar y programar todas las cosas. El cronograma y el plan han sido escritos. Todo lo que tenemos que hacer es aparecer.
El camino quedará claro y los suministros serán amplia y claramente proporcionados, un día a la vez.
¡Confía, mi amigo, en hoy!

«Hoy, confiaré en que recibiré todo lo que necesito para ayudarme a superarlo hoy. Confiaré en que lo mismo sucederá mañana».

Mi Reflexión: El codependiente igual que muchos maneja una disyuntiva: controlar la vida o confiar en su poder superior. Es propicio que seleccione el confiar en la guía de la divinidad. Todo va a ser provisto, sus necesidades materiales y espirituales serán cubiertas. Lo saludable es confiar. Un dia por vez. (Alpha).

¿Crees en la provisión divina en nuestra vida? Comparte tu experiencia aquí.

Meditación 29 de Julio… Diviértete

Melody Beattie, en su Libro El Lenguaje del Adiós recalca la necesidad de equilibrar las actividades en la vida del codependiente. No todo es trabajo, ocupaciones de los demás, dejando atrás los momentos de diversión.

Si deseas conocer más sobre esta Autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esa vía.

Medita sobre esto:

Diviértete. Suéltate un poco ¡Disfruta la vida!
No tenemos que ser tan sombríos y serios.No tenemos que ser tan reflexivos, tan críticos, tan enfrascados en nosotros mismos y en los rígidos parámetros que otros, y a menudo nosotros mismos, nos hemos colocado.
Esta es la vida, no un servicio fúnebre. Diviértete con ella. Entra en ella. Participa. Experimenta. Corre algún riesgo. Sé espontáneo. No estés siempre tan preocupado por hacer lo correcto, por hacer lo apropiado.
No te preocupes tanto por lo que otros puedan pensar o decir. Lo que piensen y digan es asunto suyo, no nuestro. No tengas tanto miedo a cometer un error. No seas tan temeroso y tan propio. No te inhibas tanto.
La intención de Dios no es que fuéramos tan inhibidos, tan restringidos, tan controlados. Estos parámetros represivos son los que otra gente nos ha impuesto, lo que nosotros hemos permitido que se nos haga.
Fuimos creados plenamente humanos. Se nos dieron emociones, deseos, esperanzas, sueños, sentimientos. ¡En alguna parte de nuestro interior hay un niño vivo, emocionado, que ama la diversión! ¡Déjalo salir! ¡Déjalo que salga vivo! Déjalo que se divierta un poco, no solo dos horas el sábado en la noche. ¡Tráele aquí con nosotros, déjale ayudarnos a disfrutar este don de estar vivos, de ser completamente humanos y de ser como somos.!
Tantas reglas. Hemos vivido con tanta vergüenza. Sencillamente no es necesario. Nos han lavado el cerebro. Ahora es momento de liberarnos,de dejarnos ir y de entrar a una vida plena y plenamente humana.
No te preocupes. Aprenderemos nuestras lecciones cuando sea necesario. Hemos aprendido la disciplina. No nos descarriaremos. Lo que sucederá es que comenzaremos a disfrutar la vida. Empezaremos a disfrutar y a experimentar a nuestro ser completo. Podemos confiar en nosotros mismos. Ahora tenemos límites. Tenemos nuestro programa como base. Podemos darnos el lujo de experimentar y tener experiencias. Estamos en contacto con nosotros mismos y con nuestro Poder Superior. Se nos está guiando, pero no se le puede guiar a un objeto congelado, inanimado. Ni siquiera se le puede mover.
Diviértete un poco. Suéltate un poquito. Rompe unas cuantas reglas. Dios no nos castigará. No tenemos que permitirle a la gente que nos castigue. Y nosotros podemos dejar de castigarnos a nosotros mismos. Mientras estemos vivos y aquí, empecemos a vivir.

«Hoy me permitiré divertirme un poco. Me soltaré un poquito, sabiendo que no me resquebrajaré y romperé. Dios mío, ayúdame a dejar ir mi necesidad de ser tan inhibido, propio y reprimido. Ayúdame a inyectarme a mí mismo una gran dosis de vida dejándome estar completamente vivo y ser plenamente humano».

Mi Reflexión: La persona codependiente esta buena parte de su tiempo útil ocupada interviniendo en la vida de los demás, tratando de controlar los sentimientos y emociones de otras personas. No se ocupa de sí misma, eso incluye su esparcimiento y diversión. Aprendió a no recrearse ni divertirse. Llegó el momento, como parte de su recuperación, que salga de su encierro y se divierta, entretenga, disfrute socialmente de amistades y familia. (Alpha).

¿Te sientes como una persona con poca diversión en tu vida? ¿Has trabajado ese aspecto? Comparte aquí.

Meditacion 28 de Julio … Miedo

Melody Beattie, en su Libro El Lenguaje del Adiós refuerza la necesidad de confiar en nuestro poder superior, entendiendo que la guia de la divinidad está presente en nuestra vida.

Si deseas conocer más sobre esta autora/Consejera y particularmente con referencia a este Libro visita la Web de Amazon y adquierelo por esa vía.

Medita sobre esto:

Un día, decidí probar algo nuevo. Llevé a mi hijo de diez años al río Saint Croix en una Waverunner. Una Waverunner es un pequeño vehículo de bote parecido a una motocicleta.
Nos pusimos chalecos salvavidas y nos embarcamos en una experiencia que resultó ser tan regocijante como atemorizante: regocijante cuando me permití disfrutarla; atemorizante cuando pensé demasiado en lo que estaba haciendo y en las terribles cosas que podrían suceder.
A la mitad de nuestro paseo, el peor de mis miedos se hizo realidad. Volcamos. Estábamos dando tumbos en treinta pies de agua. La Waverunner se sacudía en las olas frente a mí, como una tortuga motorizada sobre su lomo.
«Que no te entre pánico», dijo mi hijo calmadamente.
¿Y si nos ahogamos?, objeté.
«No podemos», me dijo. «Tenemos chalecos salvavidas. ¡Mira! Estamos flotando».
«El aparato está boca abajo», le dije. «¿Cómo vamos a hacer para enderezarlo?»
«Justamente como el hombre nos dijo», respondió mi hijo. «La flecha apunta hacia este lado».
Con un movimiento fácil, volteamos el aparato boca arriba.
«¿Y qué si ya no podemos volver a subirnos en ella?», pregunté.
«Sí podemos», contestó mi hijo. «Para eso están hechas las Waverunners: para montarlas sobre el agua.»
Me relajé y mientras conducía de regreso, me pregunté por qué me había asustado tanto. Pensé que quizá era porque no confío en mi capacidad para resolver problemas. Quizá porque una vez casi me ahogué por no traer puesto un chaleco salvavidas.
Pero tampoco esa vez te ahogaste, me aseguró una pequeña voz en mi interior ¡Sobreviviste!
Que no te entre el pánico

Los problemas se hicieron para resolverlos. La vida se hizo para vivirla. Aunque a veces el agua nos tape la cabeza, sí, quizá hasta necesitemos sumergirnos en ella unos cuantos momentos y tragar unos cuantos buches de agua, no nos ahogaremos. Llevamos puesto –y siempre lo hemos llevado puesto-un chaleco salvavidas. Ese chaleco de apoyo se llama Dios».

«Hoy, me recordaré de cuidar de mí mismo. Cuando me hunda hasta la cabeza, Dios estará allí apoyándome, aunque mis miedos traten de hacérmelo olvidar».

Mi Reflexión: Sentir miedo e incluso pánico son emociones usuales cuando enfrentamos eventos nuevos que no dominamos. Dejarse llevar por el pensamiento positivo que existe un ser superior que nos cuida y protege permite confrontar esas situaciones de una mejor manera. Dejemos que fluya la guía e intervención divina en nuestras vidas. (Alpha).

¿Crees en la intervención divina en tu vida? ¿Has sentido esa presencia positiva? Comparte aquí.