«Estoy cansada de trabajar tanto para ser flaca, usar la última ropa y tratar de maquillarme bien», me dijo Gina, una mujer hermosa, un día. «Solo quiero ser amado por mí, por lo que tengo en mi corazón».
Es saludable lucir lo mejor posible, pero algunos de nosotros sustituimos la autoestima por lo que usamos, cuánto dinero ganamos y las cosas que poseemos.
Un día, conocí a una mujer que tenía el pelo largo, ojos brillantes y tocaba música folclórica irlandesa hermosa. A ella le encantaba cantar y bailar. Sus ojos se iluminaron cuando habló de su música. Pude ver lo apasionada y viva que estaba. Su banda tocaba para la gente, pero generalmente por una tarifa nominal o gratis, explicó.
«Pero queremos mejorar», dijo. «Realmente quiero ser alguien algún día».
«Eres alguien ahora», le dije.
Sigue tus sueños. Conduce ese auto. Vístete bien. Que tengas el cabello arreglado, perfecto. Pero no olvides amarte sin esas cosas.
Eres alguien ahora.
«Dios, ayúdame a ver más allá de todas las trampas exteriores con las que me rodeo. Ayúdame a ver la verdadera belleza en mí y en las personas de mi vida».
(Meody Beattie de su Libro Mas del Lenguaje del Adiós).
Mes: abril 2019
Reflexión del Dia: 9 de Abril
Los Codependientes hacen su «sucio trabajo», el de controlar; en forma encubierta. Se ocultan tras un disfraz de dulzura y amabilidad, y secretamente se dedican a o suyo: A METERSE EN LOS ASUNTOS DE LOS DEMÁS.
Otros, llorando y suspirando, claman incapacidad, proclaman su dependencia, anuncian su total victimación, y exitosamente controlan por medio de su debilidad. Son tan inútiles, Necesitan tanto de tu cooperación. No pueden vivir sin ella. A veces los débiles son los más poderosos manipuladores y controladores. Han aprendido a asirse a las cuerdas de la culpa y de la lástima.
Muchos codependientes combinan sus tácticas, empleando una variedad de métodos. ¡Cualquier cosa que funcione! (O, para ser más exactos, esperando resultados de cualquier cosa que no funcione.)
No importa cuáles sean las tácticas, las metas siguen siendo las mismas, Conducen a otras personas a hacer lo que tú quieres que hagan. Las llevan a comportarse como tú piensas que deben hacerlo. No las dejan actuar de modos que tú consideras incorrectos para ellas, pero que quizá intentarían, si no fuera por tu “ayuda”. Fuerzan los eventos de la vida para que se desarrollen y se desenreden de la manera y a la hora que tú has designado. No dejan que ocurra lo que ocurre, o lo que podría suceder. Nosotros hemos escrito la obra, y nos encargaremos de que los actores se comporten y de que las escenas se desarrollen exactamente como nosotros hemos decidido que debe ser. No importa que sigamos colándonos de la realidad. Si nos abocamos a la carga con suficiente insistencia, podremos (creemos) detener el flujo de la vida, transformar a la gente y cambiar las cosas a nuestro antojo.
(Melody Beattie de su Libro Ya No Seas Codependiente).
Meditación 9 de Abril… Dar
Aprender a dar sanamente puede ser un reto. Muchos de nosotros nos embarcamos en dar de forma compulsiva, actos caritativos motivados por sentimientos no caritativos de culpa, vergüenza, obligación, lastima y superioridad moral.
Ahora entendemos que ser nanas de los demás y dar en forma compulsiva no funciona. Nos sale el tiro por la culata.
Cuidar desmedidamente a los demás hace que nos sigamos sintiendo victimas.
Muchos de nosotros dimos demasiado, pensando que estábamos haciendo bien las cosas; y luego nos confundimos porque nuestra vida y nuestras relaciones no estaban funcionando. Muchos de nosotros dimos tanto y durante tanto tiempo, pensando que estábamos haciendo la voluntad de Dios, que luego en la recuperación nos negamos a dar, a querer o a amar durante un tiempo.
Eso está bien. Tal vez necesitábamos un descanso. Pero dar sanamente es parte de vivir sanamente. La meta en la recuperación es el equilibrio, una actitud solicitada motivada por un verdadero deseo de dar, con una actitud subyacente de respeto hacia nosotros mismos y hacia los demás.
La meta en la recuperación es elegir lo que queremos dar, a quién, cuándo y cuánto. La meta en la recuperación es dar y no sentirnos victimados porque damos.
¿Estamos dando porque queremos hacerlo o porque es nuestra responsabilidad? ¿O estamos dando porque nos sentimos obligados, avergonzados o superiores? ¿Estamos dando porque nos da miedo a decir no? ¿Resultan útiles las maneras como tratamos de ayudar a la gente, o le impiden a los demás afrontar sus verdaderas responsabilidades?¿Estamos dando para caerle bien a la gente o para que se sienta obligada hacia nosotros? ¿Estamos dando para probar que somos valiosos? ¿O estamos dando porque queremos dar y porque nos sentimos bien al hacerlo?
La recuperación incluye un ciclo de dar y recibir. Mantiene una sana energía fluyendo entre nosotros,nuestro Poder Superior y los demás. Aprender a dar de manera sana lleva su tiempo. Se lleva su tiempo aprender a recibir. Sé paciente. El equilibrio vendrá.
«Díos mío, por favor guía hoy mis motivos para dar».
(Melody Beattie de su Libro El Lenguaje del Adiós).
Reflexión del Dia: 8 de Abril
No somos las personas que “hacemos que sucedan las cosas.” Los codependientes son aquellas personas que consistentemente, y con gran cantidad de esfuerzo y energía, tratan de forzar que sucedan las cosas.
Controlamos en nombre del amor.
Lo hacemos porque “sólo estamos tratando de ayudar”.
Lo hacemos porque nosotros sí sabemos cómo deben hacerse las cosas y cómo deben comportarse
las personas.
Lo hacemos porque nosotros estamos bien y ellos están mal.
Controlamos porque nos da miedo no hacerlo.
Lo hacemos porque no sabemos qué otra cosa hacer.
Lo hacemos para dejar de sufrir.
Controlamos porque pensamos que tenemos que hacerlo.
Controlamos porque no pensamos.
Controlamos porque solamente podemos pensar en controlar.
En última instancia quizá controlemos porque esa es la manera en que siempre hemos hecho las cosas.
Tiránicos y dominantes, algunos gobiernan con mano de hierro desde un trono que ellos mismos se han atribuido. Son poderosos. Ellos siempre saben más. Y, por Dios, que las cosas se harán a su modo. Ellos se encargarán de que así sea.
(Melody Beattie de su Libro Ya No Seas Codependiente).
Meditación 8 de Abril… Suelta todo a lo que te aferras
Un amigo me llamó un día. Su brillante coche nuevo estaba en el garaje para reparaciones otra vez. «Debería haber comprado un camión, algo práctico, que comenzara todos los días y me ayudaría a trabajar», dijo. «Si alguna vez, empiezo a gritar que tengo que tener algo y no puedo vivir sin él, comienza a gritarme hasta que me detengo».
¿Qué está asociado a tu autoestima?
Algunas personas unen sus autos a su valor. Otras personas pueden sentirse bien consigo mismas solo si están involucradas en una relación romántica. Algunas personas necesitan un hogar en cierto vecindario. Algunas personas atan su autoestima a los eventos futuros. Si solo pudiera lograr esto, estaría completo.
Toma un descanso. Mira tu vida. ¿Tu autoestima está apegada a ciertas condiciones?
Decimos que queremos que los demás nos amen incondicionalmente, pero el problema es que esa no es la manera en que nos amamos a nosotros mismos. Decimos que primero necesitamos dinero en el banco, un Mercedes o un bolso Gucci.
¿Hay un cierto nivel de éxito que has estado tratando de alcanzar? ¿Estás diciéndote a ti mismo que tienes que tenerlo completo? Quizá es la aprobación de alguien lo que estás esperando.
Hay una manera fácil de ver a lo que nos hemos apegado demasiado. Podemos preguntarnos esto: ¿qué es lo que hay en mi vida que no puedo dejar ir y liberar? ¿Qué me hace enloquecer?
No seas duro contigo mismo. Todos queremos y necesitamos las necesidades diarias, como automóviles, empleos y dinero. Y tener a alguien a quien amar es una parte deliciosa de ser humano.
Pero ese es un problema diferente de decirnos a nosotros mismos que no podemos ser felices sin estas personas o cosas. Ayúdate con una dosis saludable de integridad y déjate llevar. Di a ti mismo que estás completo y que puedes ser feliz, tal como eres. Deja ir tu archivo adjunto a lo que sea que te estés aferrando. Puede o no volver a ti. Pero si lo hace, puedes disfrutarlo más feliz sabiendo que no necesitas que esté completo.
«Dios, ayúdame a soltar mis apegos poco saludables».
Actividad: ¿a qué te aferras y te dices a ti mismo que no puedes vivir sin él? ¿Hay una persona a la que temes que desaparecerá? ¿Hay un trabajo o un nivel particular de éxito al que te hayas apegado? ¿Hay un nivel de finanzas que estás esperando tener antes de permitirte sentirte completo? Haz un inventario de tu vida. Ten cuidado con lo que te has convencido de que necesitas para estar completo. Ahora, transfiere estas personas o cosas a una lista en tu diario. Haga que el título de esa lista sea «personas y cosas que necesito liberar y separar de mi autoestima». Todavía puede tener estas personas o cosas en su vida, pero su objetivo aquí es aclarar sus motivos para querer que entren. su vida.
(Melody Beattie de su Libro Mas del Lenguaje del Adios).}
Reflexión del Dia: 7 de Abril
Nuestras necesidades son distintas y varían de un momento a otro y de un día para otro. ¿Estamos sintiendo la loca ansiedad que acompaña a la codependencia? Quizá necesitemos acudir a una reunión de Al- Anón. ¿Son nuestros pensamientos negativos y desesperantes? Tal vez necesitemos leer un libro de meditación o uno que nos inspire. ¿Estamos preocupados por un problema físico? Quizá necesitemos ir al doctor. ¿Se están portando muy mal los niños? Tal vez necesitemos idear un plan familiar de disciplina. ¿La gente está pisando nuestros derechos? Fijemos algunos límites. ¿Tenemos el estómago hecho nudo a causa de las emociones? Manejemos nuestros sentimientos. Tal vez necesitemos desapegarnos, desaceleramos, enmendar, intervenir, iniciar una relación, o pedir el divorcio. De nosotros depende. ¿Qué pensamos que debemos hacer?
Además de darnos lo que necesitarnos, empezamos a decirle a la gente lo que necesitamos y queremos de ellos porque esto forma parte de cuidarnos y de ser seres humanos responsables.
Darnos a nosotros mismos lo que necesitarnos significa volvernos, como dice el reverendo Phil L. Hansen, nuestro terapeuta personal, nuestro confidente, nuestro consejero espiritual, nuestro compañero, nuestro mejor amigo y nuestro cuidador en esta emocionante nueva aventura que hemos emprendido: vivir
nuestra propia vida.
(Melody Beattie de su Libro Ya No Seas Codependiente).
Meditación 7 de Abril… Encontrar dirección
Solía pasar tanto tiempo reaccionando y respondiendo a todos los demás que mi vida no tenía dirección. Las vidas, los problemas y las necesidades de otras personas marcan el rumbo de mi vida. Una vez que me di cuenta de que estaba bien para mí pensar e identificar lo que quería, comenzaron a suceder cosas notables en mi vida. (Anónimo).
Cada uno de nosotros tenemos una vida para vivir, una que tiene un propósito y significado. Podemos ayudar a nuestro Poder Superior a dar dirección y propósito a nuestra vida estableciendo objetivos.
Podemos establecer metas anuales, mensuales o diarias en tiempos de crisis. Las metas crean dirección y ritmo; los objetivos nos ayudan a lograr una vida manejable que se dirige en el curso que elegimos por nosotros mismos.
Podemos ayudar a orientar nuestras vidas estableciendo objetivos.
«Hoy, prestaré atención a establecer un curso de acción para mi vida, en lugar de dejar que otros controlen mi vida y mis asuntos.»
(Melody Beattie de su Libro El Lenguaje del Adiós-Serie de Meditaciones).
Reflexión del Dia: 6 de Abril
Muchos de nosotros hemos creído que nuestras necesidades no son importantes y que no debemos mencionarlas. Algunos incluso hemos llegado a creer que nuestras necesidades son malas o están mal, de modo que hemos aprendido a reprimirlas y a empujarlas fuera de nuestra conciencia. No hemos aprendido a identificar lo que necesitamos, ni a escuchar a esa necesidad porque de todos modos no importaba: nuestras necesidades no iban a ser satisfechas. Algunos de nosotros no hemos aprendido cómo satisfacer adecuadamente nuestras necesidades.
Darnos a nosotros mismos lo que necesitamos no es difícil. Creo que podemos aprender rápido. La fórmula es sencilla: en cualquier situación dada, desapégate y pregunta: “¿qué necesito hacer para cuidar de mí mismo?”
Luego necesitamos escucharnos a nosotros mismos y a nuestro poder superior. Respetar lo que oímos. El demente negocio de castigarnos por lo que pensamos, sentimos, y deseamos, esta tontería de no escuchar a quien realmente somos y a lo que nuestro yo lucha por decirnos debe parar. ¿Cómo creen que Dios trabaja con nosotros? Como ya lo he dicho antes, no es de sorprender que pensemos que Dios nos ha abandonado; nos hemos abandonado nosotros mismos. Podemos ser gentiles y aceptarnos. No somos sólo o meramente humanos, fuimos creados con la intención de que fuéramos humanos. Y podemos ser compasivos con nosotros mismos. Después, tal vez, podamos desarrollar verdadera compasión hacia los demás. Escuchen lo que nuestro precioso yo trata de decirnos acerca de lo que necesitamos.
(Melody Beattie de su Libro Ya No Seas Codependiente).
Meditación 6 de Abril… Soltando la baja autoestima
«La autoestima es tan elusiva», dijo Amanda. «He estado trabajando en mi autoestima durante años. Cuanto más trabajo en ello, menos parece que tengo».
Creo que podemos abandonar la baja autoestima. Podemos cambiar la falta de creencia en nosotros mismos. Podemos estar dispuestos a perdonarnos a nosotros mismos. Podemos dejar de tolerar un tratamiento que no nos sienta bien. Podemos ver los peligros de definirnos a nosotros mismos por dinero, poder o prestigio, o por quiénes conocemos y qué tenemos. En última instancia, podemos estar dispuestos a cuidar de nosotros mismos y nutrirnos a nosotros mismos a través de cualquier experiencia que la vida pueda traer.
Los Programas de Doce Pasos ofrecen dos Pasos que pueden ayudarnos a desarrollar la autoestima, la aceptación y el amor propio. El Paso Seis dice que estamos completamente listos para que Dios tome nuestros defectos de carácter. El Paso Siete dice que le pedimos humildemente a Dios que elimine nuestros defectos. El trabajo no es fácil, pero vale la pena.
Por ahora es suficiente estar dispuesto a abandonar nuestra baja autoestima y todas las formas en que la baja autoestima se manifiesta en nuestras vidas.
«Dios, por favor reemplaza mi baja autoestima con autoaceptación.»
Actividad: A veces, podemos tener un funcionamiento saludable de la autoestima en un área de nuestras vidas, pero no en otra. Por ejemplo, podemos sentirnos bien con nuestras habilidades laborales, pero podemos sentirnos mal con nuestras relaciones personales. Podemos tener una gran confianza en nuestras habilidades atléticas, pero nos sentimos mal con nuestras finanzas. Decida si hay áreas en las que pueda manifestar una baja autoestima. ¿En qué áreas te sientes bien? Además, observe los sueños que no ha perseguido debido a su falta de confianza en sí mismo.
(Melody Beattie de su Libro Mas del Lenguaje del Adiós).
Reflexión del Dia: 5 de Abril
El desapego es una de las claves en la recuperación de la codependencia. Este fortalece nuestras relaciones sanas, aquellas que queremos que crezcan y florezcan. Beneficia nuestras relaciones difíciles, ésas que estamos aprendiendo a manejar. ¡El desapego nos ayuda!.
El desapego no es algo que hacemos una sola vez. Es una conducta cotidiana en nuestra recuperación. La aprendemos cuando estamos empezando nuestra recuperación de la codependencia y de cuestiones de hijos adultos de alcohólicos. Y seguimos practicándola a medida que crecemos y cambiamos, y a medida que nuestras relaciones crecen y cambian.
Aprendemos a dejar ir a la gente que amamos, a la gente que nos cae bien, y a aquellas que no nos interesan particularmente. Nos separamos nosotros mismos, y a nuestro proceso, de los otros y sus procesos.
Renunciamos a llevar las riendas y a nuestra necesidad de control en nuestras relaciones. Asumimos la responsabilidad para con nosotros y permitimos que los demás hagan lo mismo. Nos desapegamos en el entendimiento de que la vida se está desarrollando exactamente como se necesita desarrollar, tanto para nosotros mismos como para los demás. La manera como la vida se desenvuelve es buena, aun cuando duela. Y en último término, podemos beneficiarnos hasta de las situaciones más difíciles. Hacemos esto en el entendimiento de que está a cargo de ello un Poder que es superior a nosotros y de que todo está bien.
(Melody Beattie de su Libro El Lenguaje del Adiós).