La dependencia emocional y el sentirse atrapados también pueden provocar problemas en relaciones que podrían salvarse. Si estamos en una relación todavía buena, podemos ser demasiado inseguros para desapegamos y empezar a cuidar de nosotros mismos. Podemos extinguirnos y asfixiar o alejar a la otra persona. Esa necesidad extrema se vuelve obvia para los demás. Se puede sentir, percibir.
En última instancia, la dependencia excesiva de otra persona puede matar el amor. Las relaciones que se basan en inseguridad emocional y en una necesidad, en vez de sustentarse en el amor, pueden volverse autodestructivas. No funcionan. Una necesidad demasiado grande aleja a la gente y extingue el amor. Asusta a la gente y hace que se vaya. Atrae a la gente equivocada. Y no satisface nuestras verdaderas necesidades.
Nuestras necesidades reales se hacen cada vez mayores, al igual que nuestra desesperación. Fijamos nuestra vida en torno a esta persona, tratando de proteger así nuestra fuente de seguridad y de felicidad. Abdicamos a vivir nuestra propia vida al hacer esto. Y sentimos ira contra esa persona. Somos controlados por ella. Dependemos de esa persona.
(Melody Beattie de su Libro Ya No Seas Codependiente).
Día: 25 de abril de 2019
Meditación 25 de Abril… Encontremos nuestra propia verdad
Cada uno de nosotros debe encontrar su propia verdad.
No nos ayuda que aquellos que amamos encuentren su verdad. No nos la pueden dar. No nos ayuda que alguien que amamos sepa una verdad particular de nuestra vida. Nosotros debemos descubrir solos nuestra verdad.
Cada uno de nosotros debe descubrir su propia luz y permanecer en ella.
A menudo necesitamos batallar, fracasar y sentirnos confundidos y frustrados. Así es como nos abrimos paso en la batalla; así es como aprendemos lo que es verdad y está bien para nosotros.
Podemos compartir información con los demás. Los otros pueden decirnos lo que predeciblemente puede suceder si seguimos un rumbo en particular. Pero esto no significará nada hasta que integremos el mensaje y esté se convierta en nuestra verdad, en nuestro descubrimiento, en nuestro conocimiento.
No hay una manera fácil de abrirnos paso para descubrir nuestra verdad. Pero podemos hacerlo y lo haremos si queremos.
Quizá queramos hacerlo más fácil. Podremos correr nerviosamente hacia los amigos, pidiéndoles que nos digan su verdad o que hagan más fácil nuestro descubrimiento. No pueden hacerlo. La luz se verterá sola a su debido tiempo.
Cada uno de nosotros tiene su propia parte de verdad, esperando a sernos revelada. Cada uno de nosotros tiene su propia parte de luz, esperando a que nos paremos en ella, a que la reclamemos como nuestra.
El estimulo ayuda, El apoyo ayuda. Una firme creencia de que cada persona tiene la verdad a su disposición- adecuada a cada situación- es lo que ayudara.
Cada experiencia, cada frustración, cada situación, tiene su propia verdad esperando a ser revelada. No te des por vencido hasta que la encuentras, tu solo.
Seremos guiados a la verdad si la estamos buscando. No estamos solos.
«Hoy buscare mi propia verdad y permitiré que los demás hagan lo mismo. Valoraré mi visión y la visión de los demás. Todos estamos en el camino, haciendo nuestros propios descubrimientos, aquellos que nos corresponde hacer hoy».
(Melody Beattie de su Libro El Lenguaje del Adiós).